-¿quieres cenar algo?, no soy muy buena cocinera, te lo advierto- harry sonrió y yo respiré agradecida de que lo hiciera, antes había tenido malas emociones con su cara totalmente triste, aunque yo no tenga muy buen temperamento y parezca mala por fuera por dentro no lo soy tanto y no me gusta ver a la gente sufrir, siento horrible.
-¿Qué vas a preparar?- hice que se sentara en una de la sillas del comedor mientras yo buscaba en la alacena algo que pudiera utilizar para preparar un sándwich, si lo sé, no soy muy útil si tienes hambre.
-mi especialidad… sándwich- harry volvió a sonreír negando con la cabeza, por fin encontré el pan, le pondría un poco de jamón, queso, tomate, lechuga, mayonesa, mostaza, kétchup, guacamole y todo acompañado de un vaso de jugo, justo lo que harry necesitaba, por lo menos cuando yo como sándwich me siento mejor.
-vaya que bonito se ve- dijo mirando mi obra de arte en comida.
-lo sé, y espera a que lo pruebes, soy la mejor preparadora de sándwiches del mundo, que digo del mundo, del universo- harry y yo comenzamos a cenar, a veces nos deteníamos a conversar de cosas no tan profundas, supe su color favorito, su fecha de nacimiento, canción favorita, nombre completo, y otras cosas que yo también le conté sobre mí.
La puerta se abrió y escuché la voz de gloria y zayn en el pasillo, entraron a la cocina y ambos nos vieron con caras de sorpresa.
-hola, oh, mira zayn, él es harry, el novio de ________, harry el es mi novio zayn- ambos se estrecharon la mano, como anteriormente dije no es por ser grosera pero no quisiera que harry conociera a toda la gente que yo, porque entonces estaríamos muy involucrados y al momento de acabar el contrato todo esto sería más difícil.
-pensé que te demorarías más, Bill me dijo que ambos salieron muy calientes del edificio- gloria se sonrojó y zayn comenzó a toser con una falsedad inmensa, no reí gracias a la mirada desaprobatoria de harry pero disfruté mentalmente.
-fuimos al cine, ¿tu donde estuviste toda la tarde?, ni si quiera me llamas para hacerme saber que estás bien, louis vino a verte pero no estabas- tomé los platos que harry y yo ensuciamos y los llevé a lavar.
-por ahí, a louis ya lo vi hace rato en el lobby- terminé de lavar los platos y me giré a ver a los tres, todas las miradas estaban posadas en mí como si yo fuera un fenómeno en exhibición, en especial harry quien se notaba incómodo.
-zayn se quedará a dormir, espero no te moleste- sonreí coqueta a la pareja.
-seguro que van a dormir, solo un favor, no hagan ruidos es muy incómodo- gloria volvió a sonrojarse.
-se quedará a dormir porque voy a ayudarle a terminar un proyecto, como eres de mal pensada- volví a sonreír mientras me acercaba a harry y le tomaba de la mano.
-yo no dije que tipo de ruidos, si te quedó el chaleco póntelo- salí junto a mi novio falso de la cocina y cuando estuve en la sala estalle en carcajadas a lo que él solo me miraba divertido.
-serás molesta, casi matas a tu amiga de la vergüenza- la mano de harry subió de mi cintura a la espalda alta y se quedó acariciándome un rato en lo que yo lo miraba fijamente a los ojos, después de haber llorado aún se veía muy atractivo, ¿Cómo es que nunca lo había visto?, juro que recordaría unos ojos tan bonitos, claro… harry era el mimo que le dio la flor a gloria aquel día, espero no sea el harry que también es primo de la fastidiosa de Hannah.
-¿en qué piensas?- dijo pegando su frente a la mía, antes de que pudiera responderle sus labios capturaron los míos mordisqueándolos lentamente, acaricie su brazo y pude sentir los músculos relajados, apenas llevaba un día de toda esta farsa y ya sentía que podía acostumbrarme, será mejor que aleje esos est.upidos pensamientos de mi cabeza y me concentre en lo que de verdad importa, mi guión y mi ficticia historia de amor.
-ya es tarde- comenté aturdida, él se despegó de mí y sentí un extraño cosquilleo en el pecho.
-sí, tienes razón, te llamo después- lo acompañé a la puerta y le vi alejarse lentamente, ahora sí puedo escribir a pierna suelta, y además mi escritorio estaba ordenado, lo cual me ponía de buen humor.
-¿harry ya se fue?- preguntó gloria asomando la cabeza por la puerta de mi habitación, yo asentí recostada en mi cama con mi laptop en frente.
-sí, hace un momento- gloria entendió mi mirada seria y se marchó con su novio a la sala, ahora solo necesito concentración, tal vez las tomas del mar en la puesta de sol me ayuden a tomar de nuevo inspiración, tomé mi cámara y la conecté a mi computadora, el video comenzó a reproducirse, el mar se veía precioso debo decir.
Mi celular comenzó a vibrar, lo tomé de mi mesita de noche y vi un número desconocido, aún así contesté.
-¿hola?- dije insegura.
-_________, soy harry, solo te llamaba para avisarte que ya estoy en casa- ¿y eso a mí que me importa?, ¿de verdad harry me estaba llamando para eso?, justo cuando la inspiración volvía a mí el viene a esfumarla.
-que bien, bueno adiós-colgué exasperada, tiré mi celular a la cama sin importarme si caía al suelo o no y volví a recostarme, volví a reproducir lo que quedaba del video y apareció harry en la pantalla mirando al mar con la misma mirada que me había dedicado mientras lloraba, después aparecí yo, por dios creo que necesito perder peso, se me hace un rollo espantoso en el abdomen al sentarme.
-que mier.da- mi celular comenzó a vibrar de nuevo, lo tomé, esta vez era un mensaje de nuevo el mismo número, lo mejor sería registrarlo, así ya no sería más un número desconocido, “harry”, a secas, así lo escribí.
“que tengas dulces sueños, amargura”- harry.