Narra _______*
Gregg se despidió de mí con una sonrisa y un beso en la mejilla, era un chico respetuoso, divertido, atento y al igual que yo estaba despechado, me había divertido bastante y el efecto del alcohol aún me mantenía completamente feliz, las chicas y yo subimos al auto de Adi y ella con cuidado manejó hasta el departamento, dani vivía en el edificio, mientras que Andrea y Adi vivían en otros complejos, pero ambas se quedarían a dormir en nuestra casa.
-¿sabes que estaría realmente genial?- me dijo Adi exclusivamente a mí, yo negué y le presté toda mi atención mientras las chicas ya habían entrado al edificio.
-que fueras a visitar a Henry, dale un beso y si puedes otras cosas… tú me entiendes- me sonrojé pero la idea no me desagradó, tenía tantas ganas de verlo, no había podido sacarme al ton.to incluso bailando con Gregg, y me estaba muriendo por acariciar su cabello y ver sus ojos.
-es harry, ¿tú crees que sea buena idea?- Adi asintió y me llevó de vuelta al auto, subimos en él y en un abrir y cerrar de ojos con mis indicaciones fuimos a dar frente al edificio donde harry vive con sus amigos.
-aquí estamos, ¿te espero o no?- tomé mi bolso y me puse la chaqueta, acomodé un poco mi cabello y retoqué mi maquillaje, mi amiga me miraba con una sonrisa y levantaba sus cejas.
-no me esperes… tomaré tu consejo- ella gritó emocionada y me dio un abrazo.
-te deseo una feliz noche salvaje, usa protección- bajé del auto y ella arrancó, con dificultad caminé balanceándome de un lugar a otro y me sostuve de un bote de basura, luego con cuidado seguí el trayecto y por fin llegué a la puerta, el portero del edificio abrió amablemente y el guardia me miró desconcertado, estoy segura que me recuerda, le había dicho que yo era novia de harry el otro día que fui a reclamarle.
-¿se le ofrece algo señorita?- preguntó amablemente, yo asentí.
-¿puedo subir?, soy novia de harry styles, vive en el 6C- el guardia miró al portero y luego a los otros guardias que veían televisión detrás del mostrador.
-claro pase- me escoltó hasta el ascensor lo cual agradecí, todos los guardias se miraban algo consternados y yo pensaba que era porque me encontraba en estado de ebriedad.
-se le va a armar al chico- dijo uno de ellos al portero, todos aguantaron la risa y uno que otro estaba con cara de preocupación, yo subí, se me hizo un trayecto largo y lento, respiré hondo tres veces y solté el aire poco a poco, aún tenía el valor que una persona ebria puede tener.
-aquí voy- dije estando frente a su puerta, dude unas seis veces antes de tocar, la última vez que había estado ahí salí confundida, derrotada y enojada, esperaba que la historia no se volviera a repetir, porque estaba por mandar mi orgullo al cara.jo y sería una de las pocas veces en las que yo pido disculpas a alguien.