CAPÍTULO 1.
Desperté medio dormida, entre las sábanas de mi cama.Escuché que mi madre me llamaba con su voz llena de alegría,diciéndome:
-Cariño ya es de día además hoy es tu primer día de clase en tu nueva escuela.–dijo dándome un beso en la mejilla mientras se alejaba hacia la cocina.
Ya se había acabado el verano, y empezaban de nuevo las clases en mi nuevo colegio, y mi nieva ciudad. Nos tuvímos que cambiar de ciudad por motivos de trabajo, ya que le ofreciéron a mi madre la opurtunidad de trabajar en Madrid.
Sinceramente no me gustaba ser la nueva de clase, tener que presentarme a mis nuevos compañeros, a mis nuevos profesores. Ya era hora de irse a clase y no queria llegar tarde el primer día de curso, causaría mala impresión.
-¡MAAAAAAAMÁ! No quiero llegar tarde, porfavor vamonos.- dige gritando desde la entrada de la casa.
-Ya voy hija, estoy un poco desorientada con esto de tener nueva casa, nuevo trabajo, nueva ciudad.- dijo ella apartándose el mechón que le caía de la cara.
El instituto era bastante nuevo, tenía una puerta grande de metal, al lado tenía un jardín lleno de árboles y flores, y más a lo lejos se podia ver una piscina. Las personas que había en la entrada estaban hablando sobre todo lo que le había pasado en verano, y yo sentada en el asiento del coche de mi madre, escuchando la radio.
-Pronto te haras amigos, Elena, y verás que luego te llevarás muy bien con ellos- dijo mi madre recogiendome el tirante de la camiseta que se había caÍdo.
