CAPITULO 8º: PILLADOS:

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A las seis de la mañana el despertador les despertó, Mayra estaba llena de energía, lista para empezar un nuevo día.

Ulises se levantó antes de que ella le viera el hombro vendado, no quería preocuparla, se metió en el baño y se dio una ducha rápida. Luego se vistió con el uniforme que Mayra le había llevado el día anterior para que se pusiera.

Cuando salió entró ella para bañarse también. Él la esperó pacientemente sentado en la cama. Estaba bastante cansado.

Bajaron despacio con sus mochilas colgadas en el hombro, Mayra rezando para no encontrarse a sus padres, no tenía excusa para que Ulises estuviera tan temprano en su casa.

Salieron con éxito, nadie les vio, ni siquiera las criadas. Se subieron en el coche y fueron a desayunar a una cafetería cercana al instituto.

Ulises pidió para el café y magdalenas, Mayra pidió chocolate con churros. No le gustaban pero esa mañana le apetecía mucho comerlos.

-¿Le dijiste a tu padre que quieres sacar el carnet?- Preguntó Ulises.

-Sí. Y empiezo hoy. Y he pensado en decirles a mis padres de mi embarazo.-

-¿Cuándo?- Volvió a preguntar él.

-Dentro de dos meses, después de mi cumpleaños.- Respondió ella.

-Me parece estupendo. Ojalá que en estos dos meses yo pueda estar fuera de todo este mundo.- Dijo pensativo Ulises.

-¿Crees que serás capaz?- Le llegó el turno de preguntar a Mayra.

-Si consigo el dinero sí. La verdad estoy deseando salir de todo esto. Ahora deseo más que nunca una vida normal.- Contestó Ulises y ella como respuesta se sentó en su regazo para darle un tierno beso.

Juntaron sus lenguas hasta que el dolor hizo que él la alejara. Pero Ulises no quería que pensara que la estaba rechazando.

-Ayer me llevé un golpe, nada serio, pero unido a los golpes que ya tengo estoy resentido. Hoy estudiaremos en mi casa y después te llevaré a la academia y a la autoescuela.- Dijo él.

-Luego me enseñarás ese golpe, ¿dormirás conmigo esta noche?-

-Nada me gustaría más pero no podemos arriesgarnos de esta manera.- Contestó triste él.

-Quizá pueda quedarme yo. A ver que invento.- Propuso ella.

Terminaron el desayuno que ya estaba frío. Y fueron hasta el instituto. Como ya era costumbre él la acompañó hasta su clase.

Ese día tampoco se vieron en el recreo y Mayra lo echo de menos. Aunque le gustaba pasar tiempo con Nancy. Ella se la pasaba intentando convencerla de estudiar música.

Al final le tendría que confesar que estaba embarazada y que sus sueños tendrían que posponerse hasta que pudiera realizarlos.

Pero para evitar seguir hablando de lo mismo, le cambió el tema de conversación.

-Nancy, dentro de dos meses, es mi fiesta de cumpleaños. Eres mi única amiga, me gustaría que vinieras.- Le informó ella.

-Iré pero solo porque me lo pides tú. ¿Qué me pondré? Supongo que a tus padres no les gustara verme vestida de cuero negro.- Pidió consejo Nancy.

-Veo que tu color favorito es el negro. Cuando vayamos al centro comercial buscaremos algo acorde a tu personalidad.-

-Tarde de chicas entonces. Nada de Ulises.-

LOS JUEGOS DEL AMOR.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora