Let's Be Alone Together

Tiempo

Ya habían pasado dos semana. Kaori y yo nos tomamos esos días para contarnos a detalle los encuentros más importantes de nuestra juventud, porque sí, lo serían por siempre. Aunque el tiempo pase y se quede ahí, en los años pobres de experiencia y ricos en emociones.

-Así que... Así terminó tu "salida" con Patrick... En una cabaña y sin ropa.
-Pues tu noche con Pete no estuvo tan llena de inocencia que digamos...
-¡Silencio! -enrojeció- que hasta te lo conté con vergüenza.
-Jajaja -no sé cómo hice para que esa risa sonara creíble- okay ya no molesto.

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Era un día de escuela, fue cotidiano; las clases aburridas, las frases o versos escritos al reverso de mis libretas, desayuno con Kao, Landon espiándo mis dibujos, taller con Ximena, comida con Kao, fin de escuela.

Tiempo después salimos de clases. Al llegar a la jardinera que se encontraba fuera Kaori recibió una llamada. No había que pensar mucho para saber quien llamaba, sus apagados ojos castaños se encendieron después de tantas horas de tristeza.

-¡¿Peter?! -Su ojo derecho botó una lágrima-.
Ella corrió lejos de donde Arom y yo.
De alguna manera me sentía despierta y... Algo bien. Cómo un ligero respiro.

Arom, ya se había marchado.

Kao duró varios minutos más hablando antes de regresar. Su cara explotaba de alegría.
-No lo creo... Y tú tampoco lo creerás -dijo con su voz quedita toda cortada-.
-¿qué sucede?.
-Peter me dijo...
*Suena claxon*
-No...
-Te lo explicaré mañana, te lo prometo.
¡No demonios, ya me había metido la curiosidad!
-No, dilo de rápido.
*suena más fuerte*
-Lo siento Li, será mañana.
-Pe...
-Nos vemos -interrumpió besando mi mejilla y marchándose-.
-Bye.

Regresé caminando a casa, a mí no me recogían, ni me iba en camión, me iba sola.

Traía su voz guardada en un aparato, la forma más lejana de tenerlo cerca, irónico... ¿no? retumbaba erizando mi piel de golpe, el tiempo que pasamos juntos no se me hizo suficiente como para tener aquel tono ronco y grave entonando palabras cómo... te amo.

Llegando a casa dejé mis cosas en el sofá, estaba sola, claro, de no ser así mi madre me habría asesinado si me viera hacer lo anterior.
Entré a la ducha, deshaciéndome del caluroso uniforme.

Me relajé bajo el agua helada de la regadera. Dejé el congelado ambiente besar mi piel desnuda, cómo lo hicieron los labios rosados de...
*suena el teléfono*
-No voy a contestar.
No lo hice.
Usé ropa abrigada al salir, el clima estaba fresco. Recogí mis cosas del sofá y me tiré en la cama, con un té de manzanilla en el buró y la computadora en las piernas.
Decidí chatear con Kaori, mi intento de sacarle toda la información sobre la llamada fue en vano, ella prefirió decírmelo frente a frente... ¿Qué ssería?.
Intentaré dormir bien ésta noche.