Cuando te conocí (Jikook)

Capítulo 6

– Por favor kook, harías mi sueño realidad, además cuidaré de ti -Dijo con un tono de voz dulce, intentando convencerme, al escucharlo me negué con la mirada baja.

– P-pero no entiendo que ganarías con eso. -Hice puchero intentando entenderlo.

– Dos cosas, pagar todo lo que he hecho por ti y cumplir el sueño de uno de tus mejores amigos. - Después de hablar soltó una carcajada y sonreía tan amplio, mientras seguía manejando, sin duda es un tacaño, egoísta, cruel...

– De haberlo sabido, no dejo que hagas nada por mi. -Cruce mis brazos con el ceño fruncido.

– Aw, Kookie...~ -Puso puchero triste mientras hacía un pequeño berrinche, ahora era el quien tenía el ceño y los labios fruncidos.

Lo mire por un pequeño tiempo o quizá lo suficiente para notar su malestar, suspire y ladee mis labios.

– ¿Te enojaste?

– Jum –Escuche de su parte y después nada.

– Jimin... -Insistí para que hablara conmigo pero solo logre otro molesto sonido.

– ¡Jum!

–¡¡Aish!! ¡Solo si me darás de comer helado de postre! -Cruce mis brazos sentándome bien en el respaldo del asiento, algo enojado mire por la ventana.

– ¿Enserio aceptas? jaa ¡Siii! -Dijo feliz de mi respuesta. – ¡Si de helado se trata, día y noche te daré helado!

– Si, si. Jum, bueno ya acelera, quiero llegar a casa, tengo sueño, tuve toda la semana ocupada y estoy muy cansado. –Murmuré un poco mas tranquilo.

– Te estoy secuestrando ahora, no te llevaré a casa. -Sonrío con los labios ladeados, lo mire de inmediato y fruncí mi ceño, ¿Habla enserio? - Ahora hagamos las cosas bien. -Se estacionó y me miro, no hizo nada mas que sonrojarme.– Ven. –Mando haciendo señales con sus manos, me negué y me aleje un poco.

– ¡¿Q-que harás?! -Lo mire extrañado y sorprendido cuando comenzó a acercarse.– ¡Dijiste que cuidarías a de mí!

– Un secuestro, es un secuestro. La finalidad no es hacerte sentir bien, prepárate Kook que te haré sufrir. -Río y de su bolsillo saco una venda, al verla pase saliva y volví mi mirada a la suya.– Cierra tus ojos, más vale que cooperes.

– Después de esto te mataré... -Cerré mis ojos, poco después sentí como el pedazo de tela se ajustaba a mis ojos, Jimin para asegurarse, jalo un poco mas la venda, apretándola para que no viera nada, me quejé.- No lo amarres tanto, Jimin... Duele.

– Kook, ¿que parte de lo que dije no entendiste? No, no, no, ahora guarda silencio o si no también te tapó la boca.

Escuchar lo último hizo que me tensara, apreté los labios y trate de no hablar de más. Bobo.

Escuche movimiento de su parte, no veía nada incluso si podría no podría ver con claridad, poco después me sobresalte al sentir que tomaba mis manos comenzó ha amarrarlas con un lazo un poco suave.
Cuando pude me senté recargandome en el respaldo, ponía atención a cada cosa que escuchaba.