CAPÍTULO 3. LA FIESTA.Amber en el gif :D
— ¿Qué haces aquí? — Pregunté mientras alzaba las cejas.
— ¿Y tú? — Respondió con otra pregunta, como odio eso.
— No sé, quizás por que es mi casa. — Le respondí con los ojos en blanco. Miró a mi hermano y el asintió con la cabeza.
— Es mi hermana, la enana. — Rió. Le miré mal, odiaba que me llamase enana. — ¿Os conocéis?
— Desgraciadamente, sí. — Respondí. — ¿Y vosotros como es que os conocéis?
— Dean y yo íbamos juntos a clase, pero yo repetí este año. Y el destino ha querido unirnos a ti y a mi. — Me guiñó el ojo.
— ¿Te han dicho alguna vez la poca gracia que tienes? Me parece que no.
— Así que vais a clase juntos eh. — Dijo Dean. — Cuídame a la enana, Dennis.
— ¡Dean! ¿Te parecerá normal? Protege a tu hermana querida no le digas a un idiota que me cuide. — Me acerqué y me abracé a el. Se separó de mi y me tocó la cabeza en forma cariñosa.
— Ay, mi enana. — Y me dio un beso en la frente. — ¿No venías a por helado? — Dijo después de un tiempo mientras se separaba de mi.
— Al veros la cara se me ha quitado el hambre. — Les dije provocando que los dos rieran y salí de la cocina. — Por cierto Dean. — Paró de hablar con Dennis y miró hacia la puerta que era donde yo estaba. — ¿Sabes cuando bien Sel?
Sel era nuestra hermana mayor, ella se fue a vivir con su marido a Londres y desde hace unos seis meses no había vuelto y según tenía entendido iba a venir dentro de no mucho cosa que me alegraba. Pese a llevarme diez años con ella siempre habíamos tenido una buenísima relación y siempre nos aconsejábamos, aunque Selena no hizo caso al último consejo que le di; que no se casara con Brent. Llevaban tan solo unos tres meses de noviazgo y se casaron porque según mi hermana con 27 años ya era demasiado mayor y no podía dejar pasar esta oportunidad. Sigo diciendo que fue muy tonta, porque algo me decía que Brent no era bueno para ella, pero de momento parecen que van bien o eso es lo que me va diciendo cuando hablamos, aunque apenas charlamos, por eso tenía muchas ganas de verla.
— No se. — Contestó mientras se rascaba la nuca. — Papá me dijo que vendría de aquí un par de semanas pero resulta que al final no podrá venir.
— ¿Por qué? — Pregunté frunciendo el ceño.
— Me dijo papá que por algo de Brent, que no quería venir o algo así...
— Es que ya lo dije yo que ese era un capullo y que no era bueno para Sel. — Dije furiosa.
— Lili... No seas así, no sabes que ha podido pasar.
— Seguro que ha sido algo como "Sel no aguanto a tu familia y no quiero que me dejes solo en Londres así que nos quedamos los dos aquí" — Quizás era un poco exagerada.
— ¡Lilia! — Gritó mi hermano. El nunca me llamaba Lilia, solo cuando decía algo en lo que quizás me he pasado un poco. — No seas mala. — Frunció el ceño pero seguidamente sonrió para mostrarme que no estaba cabreado.
Dennis estuvo escuchando toda la conversación y no intervino en ningún momento hasta que escuchó el nombre de "Lilia" y como no, se debía de estar aguantando algún comentario o simplemente las ganas de reír.
— ¿Te llamas Lilia? — Sonrió.
— Joder... Sí. Un nombre bastante horrible pero más bonito que el tuyo te lo aseguro.
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¿Quién dijo que Ashton cambiaría tantas cosas?
Teen FictionLilia Bennet, una chica extrovertida, malhumorada, divertida, sin pelos en la lengua y en ocasiones inaguantable, le espera un nuevo curso en Ashton por delante donde conocerá a nuevos profesores y amigos. Pero sobretodo donde conocerá a la persona...