¿Me quieres? Demuéstralo.

Llamada telefónica.

Chicos, este capítulo es el primero de los último, al final no sé si serán dos o tres, espero que pueda escribir tres ^^ A ver pregunta, ya algunos lo sabéis pero quiero preguntaros: ¿Qué preferís? ¿¿Que termine la historia de una vez para siempre o que haga una secuela?? Si hago una secuela esta novela acabaría de una forma diferente. Por favor, os lo suplico, comentadme lo que os gustaría que pasara, ¿si? 

Ah, y votad!!!!!!!!

Os adoro <3333

Lucía xoxo

*********** NARRA REBECCA *********

*BBRRPPPP BRRRRP (VIBRACIÓN DE UN TELÉFONO)* 

-¿Diga?- Dije al abrir la tapa del teléfono.

No obtuve respuesta.

-¿Diga? ¿Hay alguien ahí?- Volví a preguntar.- Oiga, esta broma no tiene gracia.- Escuchaba una respiración al otro lado de la línea.- Por favor deje de llamar a este número.- Dije antes de colgar.

Llevaba dos semana recibiendo llamadas de este tipo. Descolgaba el teléfono y nadie respondía, solo escuchaba una respiración. Ya me estaba empezando a asustar, ¿y si era... Ron? No le había querido decir nada a Liam, para que no se alterase. No estaba segura de qué era lo que estaba pasando. Y podía ser que fuera solo alguien que me estuviera gastando una broma. 

Me levanté del sillón y fui a llamar a Nicky que tenía que ir al colegio.

Entré en su habitación y estaba dormida como un bebé.

-Nicky, pequeña. Despierta, que tienes que ir a clase. ¿No estabas ayer tan emocionada?- Le llamé.

-Cinco minutos más...- Me suplicó.

-Llevas un cuarto de hora pidiendo cinco minutos más. Venga sal de la cama.- Le quité las sábanas.

-Está bien.- Suspiró y se levantó de la cama con lo ojos cerrados y se metió en el baño. No sé cómo no se dio con la puerta en la cara.

Salí de su habitación y me metí en la mía para prepararme para ir al trabajo. Desde que me habían ascendido debía cuidar un poco más mi imagen, ya que estaba de cara al público, así que ahora iba todos los días de traje y con tacones. Recogí mi pelo rubio en un moño alto y me puse un poco de colorete y algo de rimmel. Cogí mi maletín y me cercioré de que tenía todo lo que necesitaba. Móvil, cartera, llaves... Sí, estaba todo. Fui a la cocina para prepararle el desayuno a Nicky.

-¿Qué te apetece desayunar, cielo?

-Pues... tostadas, por fii.

-Oido cocina.- Las dos nos reimos.- ¿Estás nerviosa por tu primer día de clase?- Le pregunté mientras ponía las rebanadas de pan en la tostadora.

-Sí, no sé cómo van a ser los chicos en el nuevo instituto, ¿y si no les caigo bien?

-No te preocupes, cielo. Seguro que les caes genial, porque eres encantadora.

-Tu opinión no es objetiva, eres mi madre.- Se echó a reir.

-Quizás tengas razón, pero no conozco a nadie que haya dicho que no le gustas. Y eso es cierto. ¿No conoces a nadie en el nuevo instituto?

-Sí... Jeremy va allí también.- Noté como sus mejillas pasaban a un tono rojizo. 

-Jeremy, ¿el hijo de Stefany?

-Sí, ese.

-Mira que bien, así no estarás sola tu primer día. Y él te podrá presentar a más gente, ¿no es genial?