Las Carter's | Ross Lynch

Capítulo 10

Al abrir mis ojos, ya no había música, tampoco escuchaba los gritos de los invitados de Emma, observo la hora desde mi despertador, las 8:43am. Sonrió.

Me volteo, encontrándome con Ross, tiene los ojos cerrados, su respiración esta calmada, y tiene una de sus manos posando en el hueso de mi cadera.

Con temor de despertarlo, quito la mano que tiene en mi cuerpo, y me levanto de la cama, me pongo una bata de seda, y salgo de mi habitación. 

Al salir, me encuentro con botellas de cerveza tiradas en el suelo, trozos de pizza con mordiscos, condones sin usar y usados, entre otras botellas vacías de vino, etc 

Pongo los ojos en blanco al escuchar el ruido de la aspiradora, seguramente Emma estaría durmiendo en su habitación y Kelly limpiando, como siempre pasaba luego de las fiestas de Emma, bajo los escalones a paso lento y me dirijo a donde viene el sonido de la aspiradora.

Frunzo el ceño al notar que Emma es la que esta limpiando, ¿Qué? ¿Qué demonios había hecho para que ella este limpiando a estas alturas?

-¿Te encuentras bien?- Pregunto yendo hacia ella, apaga la aspiradora.

-No, tengo resaca, pero tome pastillas, ya se me pasará.

Y agarra uno de los trapos que están en la mesita de centro y limpia los estantes de la sala principal, entreabro la boca.

-¿Qué demonios hiciste anoche?- Continuo, sonando extrañada- ¿Desde cuando tu limpias al día siguiente luego de una de tus fiestas? ¿Que demonios tomaste? 

-Nada, sólo no me pareció justo dejar que tú y Kelly limpien todo este desastre, fue mi fiesta, yo me encargaré- Murmura algo fastidiada- Hice el desayuno, esta en la cocina, si quieres puedes llevarle algo a Ross

Y me guiña un ojo

Aunque parece que esta algo molesta, ¿Consigo misma? ¿Conmigo? ¿Con Ross? ¿Como saberlo? Mis mejillas arden ligeramente, y voy a la cocina.

Me impresiono al ver tantas cosas en la mesa que había en la cocina, la que sólo utilizábamos para tomar el desayuno o cenar. Trago saliva.

Panqueques, huevos revueltos, jugo de naranja, leche, cereales, croissants, fruta recortada en cubitos, jamón, tocino, huevos, entre otras cosas más.

Definitivamente Emma se había golpeado la cabeza, y muy fuerte 

Un pequeño y ridículo pensamiento invade mi mente, ¿Y si le ha puesto algo? ¿Y si me hace una broma? ¿Y si todo eso sabe feo, lo como y toma una foto de mí? ¿Y si tiene veneno? 

Niego con mi cabeza, no, ella no sería capaz de eso

Un pequeño dialogo viene a mi mente: "Tú mataste a mamá, algún día me encargaré de matarte yo también" 

Me dirijo a la cocina, abro la nevera y saco una botella de agua helada, bebo de ella.

-¿Qué te pasa?

-Nada- Respondo agarrando una manzana del estante- ¿Por qué?

-Prepare todo esto, me llevo toda la mañana, ¿Y tú comerás sólo una manzana y beberás agua?

Ladeo la cabeza.

Emma pone los ojos en blanco.

-No le he puesto nada malo, lo juro

-No te creo

Alza las cejas, y comienza a probar todo con un tenedor que luego lava con sus propias manos. Frunzo el ceño. ¿Qué demonios le pasaba? 

-¿Lo ves? Y de todas formas, ¿Me crees una persona tan loca como para envenenar a mi propia hermana?

-¿De que piso te caíste?

Respondo dejando la manzana a un lado y comiendo un poco de tocino, evidentemente, no había puesto ningún tipo de veneno.

Emma ríe y sale de la cocina con una escoba. 

Decido ignorar su nueva actitud por lo más raro que me haya parecido.

Seguramente esa actitud se le quitaría en unas horas.

***

Ross me toca el trasero, me río, a pesar de que por dentro sólo quería que se fuera de mi casa

Lo quiero, sí, y se supone que no debería ser así

Mientras más lo quiera va a ser mucho más difícil ganar la apuesta, y la cosa es ganarla, pero, sin que me duela ni un poco dejarlo 

Sus labios besan los míos, froto mi pelvis con la suya haciendo que un gemido salga de sus labios

-Me pones tan...

-¡DURO!- Exclama Emma haciéndome sobresaltar, me volteo al instante pero no hay nadie en la puerta- ¡Eso es, dale duro! 

Mis ojos se abren a tope, me retiro del encima de Ross y voy hacia la puerta de mi habitación, no hay nadie detrás de ella. Bajo los escalones, y la encuentro, viendo lucha libre, mientras come palomitas de maíz.

Vuelvo a subir los escalones, cierro mi puerta con seguro antes de volver a cerrarla.

-¿Qué paso?

-Emma esta viendo lucha libre- Me siento encima de él, lo beso, pero él se separa de mí- ¿Qué sucede?

Y hago un puchero.

Ross me sonríe divertido.

Puedo adivinar lo que quiere, me quito la camiseta y la dejo en el piso.

Ross se lame los labios aunque me esta mirando solo los ojos.

-_____- Ríe- No es eso... creo... eh... quiero que conozcas a mis padres- Mis ojos se abren a tope, y la palidez del otro día vuelve a mí- La vez pasada no pudiste conocerlos, y conociste sólo a mi hermana, pero, creo que sería una buena idea que los conozcas, ¿No es así? 

Asiento, más que nerviosa

-¿Cuando sería eso?

Pregunto intentando no tartamudear de los nervios.

Ross me besa el cuello, suelto un suspiro

-¿Te parece bien mañana por la noche?