—¿Pasa algo?-me pregunta Ruben y niego con la cabeza.
—N-no, sólo..olvídalo-suspiré, y tomé su mano con miedo.
—Estás temblando, ¿qué viste, Miguel?-pregunta a la par que para el paso.
—No es nada, vayamos a casa ¿si? me siento cansado.
Él asiente y seguimos caminando.
No quería preocuparlo, pero algo me decía que Daphne no era lo que aparentaba.