El inicio del infierno...

323 17 1
                                    

~~Narra Escritora~~

Hay estaba ella, esa pequeña niña de solo 8 años; sentada en una esquina de su habitación,con su cara escondida entre sus piernas, sus ojos cerrados y tratando de no llorar.
Esos gritos, los gritos de sus padres nuevamente peleando por cosas que ella aún no entendía.

Sintió pasos fuertes y rápidos dirigirse a su habitación.
Ella ya sabia lo que le esperaba, pues...no era la primera vez que le hacían eso...

Pego un pequeño salto al escuchar la puerta de su habitación abrirse fuertemente.
Vio como su padre, un hombre gordo e imponente, con la mirada más fría que cualquier cosa.
La miro con odio a su hija, cosa que esta se asustó más al ver y saber lo que le esperaba.
Vio que su padre tenía un cinto en su mano, con el abrojo de metal.

-!Eres una perra,jamás tuve que haberte tenido!-grito enfurecido su padre.
La tomo de los cabellos castaños a la pobre niña, para tirarla a su cama, subirle su remera hasta sus pequeños hombros....y empezar a darle golpes muy fuertes en su pequeña espalda con la parte del abrojo de metal.

Ella lloraba, le implorava que parara, pero el solo siguió.

Las lágrimas caían de sus ojos color marrones, ahora rojos en la parte blanca por culpa de las lágrimas.

-! Padre por favor...para!-le gritaba ella.
Las marcas de el abrojo estaban al rojo vivo, ya de algunas partes salían hilos de sangre.

La pequeña niña abrió un poco sus ojos al ver a su pequeña hermana de 6 años; parada en el umbral de la puerta, mientras miraba la ecena.

-Vete Celeste...vete...-le imploro la niña de 8 años a su hermana de 6.
Ella no logro escucharla ya que su vos era como invisible por causa del dolor.
Su padre dejo de pegarle, para ahora concentrarse en la pequeña Celeste.

-! Tu pequeña demonio, te enceñare a no pintar las paredes de las casas !-le grito su padre a su hermana.
Este empezó a acercarce a su pequeña hermana.
Ella no podía dejar que le peguen a Cel, no dejaría que le agan daño...

Ignorando el dolor, pero con una mueca en su rostro, corrió a su pequeña hermana y la envolvió entre sus brazos y la cubrió con su cuerpo; para que el abrojo no la golpeara.
Sintió como ella recibía los golpes a cambio de su hermana, el dolor era insoportable, no lo podía aguantar.

Sintió como los golpes cesaron, pero sintió como su padre la tomaba nuevamente de sus cabellos y la elevaba, poniéndola frente de el.

-Sí vuelves a protejerla, te aceguro que las pagarás.-le dijo para luego marcharse de la habitación.
Ella estaba tirada en el suelo, vio a su pequeña hermana y le sonrió, era una sonrisa fingida, cargada de dolor.

-¿Etas ben Jesseca? -le pregunto su hermana pequeña.
No pudo evitar que las lágrimas salieran de sus ojos, las seco rápidamente y se acerco a su hermana.

-Sí...estoy bien Cel,estoy bien - le dijo para luego abrazarla.
Ella daría todo por su hermana, no dejaría que la lastimaran.

Se separo de ella, le sonrió y se levantaron del suelo.

-Ve a darte una ducha Cel, yo iré en un momento con tigo haci jugamos.-le dijo su hermana a su pequeña hermana.
Esta asintió y salio de la habitación directo al baño.
Jessica se levantó del suelo, toco su espalda y al ver su mano:esta tenía un poco de sangre.
Siempre fue haci, siempre su padre le pegaba hasta hacerla sangrar, pero no dejaría que la lastimaran a Celeste, nunca.

Salió de su habitación, bajo las escaleras y fue directo a la cocína, antes de entrar bajo su remera de color negra hasta su cintura, cosa de que no se vieran las lastimaduras.
Entro a la cocína y vio a su madre leyendo el periódico, ni rastro de su padre.
De seguro estará en el bar como siempre.

La guerrera...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora