Capítulo 4

57 27 1
                                    

No quiero ir a la escuela. Me odio cuando lloro . ¿Por qué no puedo ser feliz cómo lo son mis primas?
Ellas siempren salen a divertirse ,ellas tienen muchos amigos.¡Estoy Harta de esto! Nací para sufir. Desde que tengo uso de memoria he sufrido, desde pequeña. No sé como decirle a mis papás que aún tengo miedo, miedo del pasado, de volver a caer.

— Tienes que salir a conocer otro mundo.— dijo mi antigua psicóloga.
—Ya no sé que hacer doctora, ya he salido y nada. No pasa nada, vuelvo a lo mismo.
Kristen,eres una chica muy bonita, eres muy inteligente. Sal de tu pequeño mundo lleno de basura.
—¡Pero no sé cómo! —chillé desesperada sin encontrar alguna respuesta a todas mis preguntas de la vida. —ayúdeme porque ya no puedo. — negué con la cabeza limpiando los mocos que salían de mi nariz.
— Por favor, retirate Kris, solo por hoy, no estás muy bien y no me gustaría que me estés gritando solo porque estás molesta o no sé yo qué es lo que tengas.
— Está bien, lo siento y gracias. — me levanté. Me odio, me odio tanto por no ser 'una chica normal' me siento rara, tan inútil, siento que solo mamá y papá me trajeron al mundo a sufrir,no quiero que mi vida sea tan fácil, pero yo sé que se necesita sufrir para ser fuerte. Pero ya he sufrido demasiao que siento que un día de estos caeré y no podré levantarme,así como me pasó hace... tres años atrás.

— Oye Lorena, a Kristen nunca la hemos visto con un novio, ¿qué a caso no le gusta el otro bando?— me enojaba que mis tías etiqueran algo que no es verdad. Ellas no saben nada. Yo tengo mala suerte para eso siempre he quedado en segundo término: los chicos que me gustaban tenían sus novias y era como que ellos me ignoraban, y si se llegaban a enterar que me gustaban ellos, simplemente me ilusionaba y después adiós. Así que nunca he sabido que es una relación formal y que es el amor. Trato de vestirme de lo mejor pero todo sale mal, ni aún así consigo encontrar a un chico que me quiera.

— Te lo juro mamá, ya no puedo más, esta maldita depresión me tiene tan mal que siento que se están llevando el aire que respiro y me deja morir lentamente.

— Me da miedo que alguien me toque. — le comenté a mi psicóloga. — me da mucho, mucho miedo.
— Kristen — habló mi psicóloga mientras escribía algo en un pequeño pizarrón — ¿alguna vez han abusado de ti? o ¿Qué tú no hayas querido o algo por el estilo ?— me dijo mientras dejaba de escribir y volvía a asentarse en su asiento respectivo.
¿Pero qué? ¿qué clase de pregunta es esa?
—¡No! — dije asustada porque esa pregunta es muy fuerte, muy fea que una chica le teme que le hagan, pero por suerte no me ha pasado eso. — lo siento si la asusté con mi tono de voz— le dije al ver que peló los ojos. — es solo que me sorprendió mucho su pregunta.
— No te preocupes Kris, muchas chicas reaccionan igual que tú. Puedes retirate, tu terapia terminó.
Asentí y me dirigí hacia la puerta.
Recordé las veces que había ido al psicólogo y de solo pensarlo me afecta. Me recuerda tanto mi depresión, esos tés que tomaba para dormir, esos calmantes, los pensamientos que aún me sigen. Odio esto. Tengo que salir adelanté. Yo puedo.

Rompiendo Corazones |H.S|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora