POSSESSIVE.

SOY UN MONSTRUO Y VOY A COMERTE.

 — ¿El Sr. Staples? — pregunté, con incredulidad.

— ¿S-sí? — él parecía confuso, su pelo castaño estaba desordenado como si hubiera pasado las manos por él continuamente.

— ¿Fue el Sr. Staples? — Harry se volvió hacia su hermana, con una mirada sospechosa y sin poder creerlo.

Ruth asintió. — Sí.

— ¿Q-qué hice y-yo? — preguntó, tomando la compostura.

— ¡Fue él! — gritó golpeando con fuerza su pecho. — Tú, tú, cochino, maldito bastardo.

— N-no e-entiendo n-nada. — dijo tartamudeando, con una cara de terror.

No lo culpaba, Ruth podría dar miedo a cualquiera.

— ¡Trataste de violarme! — gritó.

— ¿C-cómo? — parecía sorprendido. Realmente sorprendido.

— Ruth, ¿estás segura de que fue él? — pregunté.

— Por supuesto que sí. — dijo. Hizo una pausa. — Me crees, ¿verdad, Nicole?

— Bueno... — mi voz se apagó, sin saberlo, ya que me había quedado en una encrucijada.

Ruth era mi mejor amiga, pero, por Dios, él era el Sr. Staples. Y al que Ruth odiaba.

— No puedo creerlo Nicole, no me crees, ¿verdad? Creí que eras mi mejor amiga. — me lanzó una mirada que me hizo sentir culpable.

— No la culpo. — la voz de Harry fue bastante baja.

Me volví hacia él al igual que Ruth y el Sr. Staples. Estaba apoyado contra una pared, frente a nosotros, pero con la mirada dirigida hacia Ruth, que tenía una mirada confusa sobre su rostro, se metió las manos en los bolsillos.

— Siempre tienes que hacer lo mismo ¿no?, Siempre tienes que ser el centro de atención sólo para divertirte un rato, estás enferma.

— Harry. — solté, sólo estaba empeorando las cosas.

¿Qué era lo que le pasaba últimamente? Actuaba como si su hermana fuera su peor enemigo.

— No estoy mintiendo. — agregó Ruth.

— N-no sé l-o que h-ha p-pasado, p-pero puedo a-asegura q-que y-yo n-no hice n-n-nada. — habló el Sr. Staples.

— ¡Está mintiendo! — soltó Ruth.

— N-no. — se defendió, miró a Harry. — N-no sé a l-lo que t-tu h-hermana está j-jugando, p-pero está acu-casándome de c-cosas absurdas.

Miré a Ruth y luego al Sr. Staples. No sabía a quién creer. ¿Ruth sería capaz de hacer algo así sólo para llamar la atención? ¿Por qué el Sr. Staples trataría de violarla? Él la odia y ella lo odia. No hay duda sobre eso.

— Deja de mentir. — dijo Ruth.

— Cálmate. — hablé.

— ¿Qué está pasando aquí?

Todos nos volvimos hacia la Sra. Benson, la directora.

— Creo que ya hice una pregunta. — dijo con irritación. — ¿les importaría decirme que pasa aquí? — tenía una expresión severa en su rostro.

— Oh, eh... — afortunadamente, Ruth me salvó de contestar.

— ¿Vas a decírselo tu o lo hago yo? — miró al Sr. Staples.

Ruth lo estaba desafiando con la mirada.

— K-Karen, la Srta. S-tyles me a-acusa de a-acoso sexual. — dijo, pareciendo incómodo y avergonzado.