Prodigio

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Aquella noche, la caída del escuadrón de caballeros fue inevitable. Add y Elsword pelearon codo a codo hasta que los refuerzos llegaron, fue una lucha ardua que al final termino con varios decesos y ningún prisionero; ni siquiera Belmey con su característica piel azulada y sus largos cabellos blancos. Al amanecer, la muchacha pelirroja descansaba en una clínica sencilla de la Villa. Había perdido muchísima sangre; en una situación "normal" habría muerto. Sin embargo, Elesis había conseguido hacerse con un "algo" de procedencia desconocida. Se lo había arrebatado a un Amorfista. Un joven llamado Lento, se hizo cargo de ella. La confusión había sido aun mayor cuando se dieron cuenta de que su herida mortal estaba sanando. Al poco rato, Elesis despertó. En sus ojos había una mirada atemorizante, cargada de oscuridad; sus atuendos habían cambiado y su cabello había adquirido una tonalidad rojiza diferente, mas similar a la sangre. Tuvieron que sedarla bajo órdenes de Lento para que se recuperara. Murmuraba entre sueños...juraba venganza contra los seres diabólicos. Lu que siempre había sentido frivolidad por parte de Elesis, ahora se sentía aun mas incomoda. Sin embargo, Ciel le aclaro que no habría de que preocuparse. Aunque ellos fueran un par de demonios, no intentaría agredirlos, en cambio, el mayordomo preparo una infusión de hierbas para hacer reposar a la chica, y también entrego una infusión especial para el resto de la tropa, quienes habían dormido poco y apenas comido. 

Add se encontraba sentado afuera de la habitación, en unas prácticas sillas de pintura desgastada, bastante agobiado. Quería irse a dormir, pero Elsword lo retuvo. No se quería quedar solo. Al poco rato, de uno en uno, pasaron a ver como evolucionaba la joven espadachina. Cuando Eve entró, usó uno de sus Módulos para examinar a Elesis de arriba a abajo. Pronunció algo inentendible para Add en aquel momento. Cuándo salió, les dijo directamente a Elsword y a los demás, que lo que le había arrebatado al Amorfista, era un Fragmento del Él oscuro.

-Creo que no estaria de mas preparar algun refrigerio- comento Rena con rostro demacrado. Ni bien hubo terminado, Lu alzo los brazos como una maníaca mientras gritaba:

-¡Ciel! ¡Prepara galletas por favor!- el resto del grupo la hizo callar de inmediato. Add de inmediato se volvió hacia ellos asintiendo frenéticamente con la cabeza. Las galletas de Ciel tenian un "algo" que les daba un sabor increíble. Y al parecer a todos les gustaban, porque nadie puso pegas. Ciel amaba complacer a Lu.

Eve se acomodó los cabellos tras sus delicadas orejas; cerro los parpados con mucha diplomacia, y tomó a Add del brazo.

-Ven conmigo, ya estuviste demasiado tiempo aquí, tenemos trabajo- soltó Eve en un bufido de ultra tumba. Severo y parco. La presión que ejercía sobre el brazo de Add era demasiada, al punto de hacerle daño. En cierta forma parecía molesta. La joven Nasod podía ser brusca. Pero aquel cambio de humor era tan ...raro...parecía que se le iba la olla. Por no cuñar un termino peor.

Los Dinamos de Add ayudaron a sostener el cuerpo inconsciente de Elesis. ademas, el rastreador ayudo a transportarla, Elsword estaba agotado y quedándose sin fuerzas. El gesto que expresó Eve fue extraño, hueco pero severo.

"-¿Serán imaginaciones mías, o esta Nasod esta celosa?-" se cuestiono Add.


Una vez se hubieron acomodado mejor en las afueras de la clínica, Eve presurosa desplegó una infinidad de mapas holográficos. Con lo que había pasado, ella consideraba que habían perdido mucho tiempo de progreso. Addtambién inicio lo propio con una agradable sensación de felicidad recorriéndole el torrente sanguíneo. 

De algún modo, le ponía feliz pensar que Eve se ponía celosa, ademas, disfrutaba su compañía. Pese a que Eve no hablaba mucho, y a que todo el peso de la conversación caía sobre Add, los silencios entre ellos no eran agobiantes. Aun si solo recibía regaños de parte de ella. Fue como volver a los días en Altera. Los primeros que disfrutaba en mucho tiempo. Cuando Eve hablaba, siempre era por una buena razón. Era alguien bastante prudente, además de una chica muy inteligente. Cualquiera pensaría que eso se debería a que su cerebro era una máquina. Pero bastaba convivir con ella para darse cuenta que tenía otro tipo de inteligencia, cada vez parecía alguien más humana.

Elsword: Crónicas del CaosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora