Siempre mia #P.BigDonut. #wattys2017

capítulo 18

Capítulo 18

¿Ya está...?,¿Cómo que ya está...?

-como siempre ha sido un placer, pero aquí, una madruga mañana para trabajar.
-mira que graciosa,como nosotros.¿ Robert acercas a Sara a casa?
-como siempre....eso no se pregunta. Voy a por la llaves del coche.
Muchas de las veces he decidido quedarme a pasar la noche aquí. Pero tengo muchas cosas que hacer todavía y tengo que preparar parte de los temarios que debo preparar para los exámenes.
-si no te importa Robert, seré yo quien acerque a su casa a Sara. A fin de cuentas me pilla de camino.
Un silencio invade nuestro entorno.
Maya mira a Robert que a su vez mira a Gabriel  y yo los miro a los tres.
¿Y ahora que digo yo?
-no sabes  donde vive.- dice Maya.
Se ríe...Gabriel se ríe y cada vez que lo hace me acerca un poco más a él.
-Bueno me imagino que Sara si lo sabrá. -menudo chiste más malo.
-voy a por mis cosas. - digo antes de ser sometida a sus miradas. Me levanto y sin mirar a mi hermana que doy por sentado que me está observando salgo al recibidor.
Me pongo el abrigo , la bufanda y mi gorrito y detrás de mí veo por  el  espejo a Maya.
-ten cuidado.-me giro hacia ella y termina de colocarme la bufanda.
- estamos hablando de una amigo tuyo.
-estamos hablando de Gabriel y no le conoces.
-pero es tu amigo, que problema hay.
-ninguno. No en el sentido que piensan. No encontraría a nadie con  el que pudieras estar más segura .
-entonces, dónde está el problema.
-el problema no es ahora sino más adelante cuando no haya solución.
-Maya. ..por favor. ..te importaría ser más clara por una vez en tu vida.
-es fácil engancharse a Gabriel. -la miro.
-y lo sabes por...experiencia?
-y lo sé... de muy buena tinta.
-¡te ha gustado Gabriel alguna vez!
-no seas gilipollas. Claro que no.
-¿estas lista?
Nos giramos las dos a la vez y nos miramos compenetradas,seguramente pensando lo mismo. ¿cuánto tiempo llevaría  Gabriel ahí?, me acerco a Maya y la doy un beso.
-no es mi tipo.-le digo al oído. Y no se porque digo eso. Quizás por no preocuparla pero por como me mira no da resultado.
-llámame en cuanto llegues a casa.
Asiento con la cabeza y voy al lado de ese hombre que me tiene cautivada desde hace horas.
El trayecto es corto, podría haber ido andando, prácticamente no me ha dado ni  tiempo a ponerme el cinturón cuando ya me lo tengo que estar quitando. Tan solo son veinte minutos andando que en coche se transforman en diez.
-¿qué ha pasado esta noche en esa casa? -dice Gabriel.
Preguntas....por las cuales temía  afrontar.
-¿qué ha pasado de qué? -aparca el coche y se gira para mirarme de frente.
-¿cito lugares para que te situes?
-por favor -le digo girandome yo también.
-recibidor, al llegar.
-sorprendida.  Creía que todo esto de la cena era una artimaña preparada por todos vosotros.
-¿con qué fin?
¿Para reiros de mi?  Pensé.  Pero no lo dije en voz alta.
-no lo sé.
-¿en el comedor cuando nos disponíamos a comer?
Pienso y se me escapa una risa  al recordar ese momento  vientre tableta.
-nada.
-babeabas.
-¿Cómooo ?-me rio de la vergüenza. ¿tanto se me notaba?- creído.
-mentirosa.
-prepotente.
-eres preciosa.
Y esto último que no me espero me deja en estado de shock. Recordando el momento del vestido, en su cara. En esos ojos como me miraban y que nadie me había mirado como lo hacía el.
-en la cocina...-y lo dice en un susurro, porque si lo dice un poco más alto su voz sería ronca. Me acaricia  la cara y agarrándome de la nuca me acerca a él.  Y se que me va a besar. Lo sé.  Y espero impaciente ese contacto con ese cosquilleo de tripas que me lleva acompañando desde que sali de esa cocina.
-te dije que te besaría. ..y no una sino muchas veces, ¿verdad?.
No puedo contestar.
Cuando siento esos labios en mi boca  estalla  una explosión en mi interior,una patada interna y agradable. Su lengua, abriendo paso con delicadeza entre mis labios, saboreando con cuidado,como si no hubiera un mañana, sin prisa y sabiendo que solo es el principio de un beso que a regañadientes llevo esperando desde que le vi. Pidiendo más  se escapa de mi boca el tormento al que estoy sometida y abriendo ligeramente los labios dejo que se adentre dentro de mi. ¡Se puede morir por un beso?, porque ahora estoy preparada para ello. Necesito agarrarme a él.  Necesito acercarme a él y sentirle más. Si no estaba preparada para el preliminar menos aún a este beso que estoy cogiendo con tanta ansia. Ese baile de lenguas. Esos gemidos que se nos escapan al compás  pidiendo más.  Nos sabe a poco . Queremos  más y  yo me veo como una quinceañera escondida en un coche por miedo a ser pillada  por algún conocido.
El sonido de un móvil nos pone en alerta a los dos. Primero por el lugar y segundo por lo ocurrido. El separarme de él me devuelve a mi propia realidad.
-creo que es el tuyo.-me dice.
Rebusco  en mi bolso y compruebo la llamada, se trata de Maya.
-¿qué pasa?
-no llamabas.
-apenas he llegado.
-¿estás dentro?- y la pregunta me sorprende. Miro a Gabriel, que no para de mirarme y tocarme el pelo.
-¿dentro de donde?
-tu casa. ¿Estas dentro?
Pienso en la pregunta para saber la respuesta que es evidente.
-si. Estoy en casa. Voy a ducharme y a meterme en la cama, estoy agotada.
La oigo soltar un profundo suspiro. Como si la contestación la hubiera quitado un peso de encima.
-descansa. -y cuelga.
-mentirosa.
-¿te vas a dirigir a mi siempre así?
Me vuelve acercar a él y vuelvo  a sentirle. No hay dudas,es todo directo, sabe lo que quiere y se lo.que quiero.  Pero nos frena otra música de móvil.
-creo que ahora es el tuyo.
-no voy a contestar. -me dice besándome.  Me devora . Me absorbe. Le agarró del pelo,tan suave como esperaba y  que se escurre entre mis dedos. Pero el sonido de la melodía me impide continuar.
-deberías contestar.  Parece importante.
Mira el móvil y me muestra la pantalla reluciente con el nombre de Maya reflejado en ella.
-lo sabe. - le digo.
-no sabe nada. Por eso llama.
-cógelo,  si no lo haces pensará mal.- me mira.
-pensara la verdad.¿ Que pasa.?-dice descolgado.
¿Pensara la verdad?¿qué verdad?
- tranquila...Sana y salva...Ya puedes dormir feliz...Hasta mañana.
Le veo mirar al frente. Parece estar pensando.
-¿qué te ha dicho mi hermana?
-lo mismo que a ti será mejor que subas ya. Se hace tarde.
-¿quieres...subir...?.-lo digo titubeando y cierro los ojos por la vergüenza porque al escucharme me ha sonado a desesperada.
-mejor no.
Me sorprende su contestación pero intento disimular.
-  ¿te puedo hacer una pregunta?-asiente-¿por qué te fuiste de esa manera el otro día? - ya está.  Sino lo decía explotaba.  Llevaba rondándome esa pregunta desde que me abrió la puerta esta tarde.
-por lo mismo que no quiero subir.
Y yo que pensaba que estábamos bien. Y que estábamos avanzando.
¿Qué significa eso?
-¿Ya está? ¿no tienes nada más que decir?
Suelta un gran suspiro y me mira. Está claro que no me va  a decir la verdad.
-hasta mañana .-le digo abriendo rápido la puerta  para salir del coche   y no oír lo que tenga que decir. Estoy avergonzada y arrepentida por lo sucedido.
Pero le oigo...
-¡¡¡JODER!!!
Oigo un golpe seco y compruebo que ha sido Gabriel cerrando la puerta del coche y dirigiéndose a mí a todo velocidad.
Me agarra de la cara y me mira.
-ni se te ocurra volver a irte así.
-¿ya está?
-joder Sara.  -Junta su frente con la.mía.- porque es todo tan difícil contigo. ¿No puede seguir así, sin preguntas?
-¿sin un mañana?
-por lo menos un hoy o un ahora.  De momento.
Pienso en lo que me dice. Me siento feliz porque Gabriel quiera algo conmigo por lo menos demuestra que le gusto. Pero no entiendo esa absurda condición.
-¿nunca has mantenido una relación?
Se ríe.
-claro que sí.pero no más de una semana. Y yo quiero más contigo.
-entonces no te entiendo.- Mi cuerpo empieza a temblar.
-venga. Subamos a tu casa  antes de que cojas una pulmonía.
-pero si acabas de decir...
-olvida lo que he dicho. Subimos y hablamos. Creo recordar que teníamos una conversación pendiente.

Sentados los dos, uno enfrente del otro. Nos miramos incómodos por los nervios. Por lo menos los míos.  Jamás he tratado el comienzo de una relación así.  Pero también es verdad que jamás he tratado con hombres como Gabriel.
-pregunta.
-¿por que has subido si no era tu intención?
-para aclarar las cosas. No quería que te fueras con una idea equivocada.
-¿equivocada? Por dios si llevas toda la tarde entrando a degüello.
-¿Cómo?
-nada.
-nada y te pones  colorada.
-creo que si te lo explico parecere una creida y para nada lo soy.
-me percató de ello.
-así? ...
-si.
-bueno volviendo al tema...
-por qué no te quedas con el hecho de que me interesas y quiero tomarme esto con calma.
-¿porque mi hermana me advierte de ti.?
La pregunta le a echo erigirse en el asiento y moverse incómodo.
-¡Maya ha dicho eso?
-¿te sorprende  después de haberte llamado aún habiendo hablado conmigo?
-esperaba la llamada.
-por qué lo hizo.
-no lo sé. Bueno... ¿Qué me dices?
-a qué?
-a lo que te propongo.
-¿vivir al día sin pensar en el mañana.?-asiente con la cabeza y sonríe dando luz a esos ojitos dorados.
-lo pensaré.
-¿lo pensarás? Bueno eso es algo mejor que nada.
Se levanta y le imito.
-y ahora será mejor que me valla.
-claro. -y le sigo hasta la puerta y le miro...y él me mira...y me acuna la cara y yo cierro los ojos ...y respiro soltando un gran suspiro de tranquilidad.... Y me besa....y me besa... Y yo le beso...y me agarro a su cuello poniéndome de puntillas pero aún así me cuesta ponerme a su altura y me suelta la cara y me agarra de la cintura elevándome hacia arriba y yo por inercia me agarró a su cintura con mis piernas y me empuja hacia la pared. Y no... para nada es rápido ni agresivo. .. es lento pausado pero demoledor y sin más. ..termina de besarme dejándome en el suelo.
-espero tu llamada. - y me da un último beso en la frente y cuando  cierra la puerta me toco el corazón y me dispongo a controlar esa  respiración que por poco pierdo.