Como conquistar a un chico / Disponible en Dreame

Mike

Cogí mi bolso de la parte de atrás y cerré la puerta del coche. Miré la casa del lago y recuerdos del verano pasado vinieron a mi mente. Seguí a Yohanna nerviosa. Taylor hablaría con Mike hoy, o bueno, ya estaría hablando con él. Robert no tardó en abrir la puerta y saludó a su novia besándola. Le sonreí y entré, allí estaba Liam y Jack.

— Hola —les sonreí—. Cuanto tiempo Liam — me acerqué a él y lo saludé con un beso en la mejilla.

— Yo también quiero un beso —dijo Jack señalando su mejilla—, aunque nos vimos hace poco, pero quiero un beso —sonreí negando con la cabeza y le di uno.

Miré hacia fuera, donde Mike y Taylor estaban hablando cerca del embarcadero.

— Están hablando de ti —me informó Jack.

— Lo sé.

Mordí mi labio mientras los seguía mirando. — Vas a hacerte sangre —escuché la voz de Liam y lo miré.

Solté mi labio y volví a mirar hacia el lago, Mike estaba volviendo, mientras Taylor seguía al principio del embarcadero. Dejé el bolso en un sillón mientras Mike entraba.

— Felicidades —dijo—. Lo conseguiste. Has roto una amistad —se dirigió a la puerta y la escuché abrirse y cerrarse.

Me dirigí a las puertas correderas y salí. Estaba atardeciendo, Yohanna y yo habíamos tardado en ir porque estábamos comprando algunas cosas. Taylor estaba mirando al lago con las manos metidas en sus bolsillos. Me acerqué a él y me puse a su lado.

— Se le pasará —dijo Taylor.

— Soy de las personas que piensan que el amor no debe de estar por encima de la amistad —dije haciendo que él me mirara.

— ¿Por qué?

— Nada es para siempre. Quizás tampoco la amistad, pero es más importante conservar una buena amistad que un amor pasajero —lo miré.

— No creo eso. No te sientas culpable —Taylor sacó una mano de su bolsillo—, se le pasará, tendrá que aprender a aceptarlo —puso un brazo rodeando mis hombros—. ¿Crees que lo nuestro es pasajero?

— No lo sé —rodeé su cintura con uno de mis brazos—, pero...

— Lo sé. Sé cómo te sientes, no te preocupes, conozco a Mike desde hace diez años. Lo he visto vomitar en la primera borrachera, toser con el primer cigarro y verlo por primera vez comprar preservativos. Se le pasará.

No dije nada y Taylor suspiró.

— Creo que tardé tanto tiempo en darme cuenta de que me gustabas porque le gustabas a Mike y no quería verte con otros ojos. Mi mente seguía repitiéndome que solo eras una niñata inmadura —me separé de él y le di un golpe haciendo que él riera—, pero tú no tenías ningún interés en él.

— ¿Por qué saltaste a por mí el día que Jack me tiró del barco? —miré el lago.

— Estaba pendiente de ti.

— Siempre siendo un cotilla. Pensé que te caía mal.

Taylor sonrió de lado. — Sí, supongo que te di esa impresión, lo siento. Recuerdo cuando te vi en el baño con el tampón en la mano —sonrió y no pude evitar sonreír también—. Fue vergonzoso.

— Oh, ¿Para ti? Imagínate para mí, tardé la vida en bajar.

— ¡Chicos! ¡Vamos a pedir algo de comer! —nos gritó Jack desde la casa.

Taylor se giró. — ¡Ya vamos! —Jack volvió dentro y Taylor me miró. Rozó mi mejilla.

— No deberíamos de sentirnos culpables —dejó caer su mano—. Vamos —hizo una seña con su cabeza y lo seguí.