Oh, Daisy

XVII.

Recuerdo perfectamente este día.

¿Cómo olvidarlo? Fue único.

Roxy cumplía años, la mayoría de edad, y Aaron quiso hacerle una pequeña sorpresa y me invitó.

Al final, terminamos yendo a la playa.

Verte en poca ropa, sólo cubierta por ese diminuto trajo de baño, me volvió loco... Literal.

Lucías sensual, fresca.

Sexy.

Tanta perfección en una sola persona me parecía fascinante.

Ese día me controlé para no perder la cabeza por ti.

Intenté acercarme a ti pero la timidez me ganó.

Lo sé, es difícil de creer ya que soy un hombre de veintiocho años y tengo bastante experiencia con las mujeres.

Pero tú...

Joder, me hacías sentir como un adolescente.

Oh, Daisy...

Si sólo te hubieses acercado a mí.