XLII.

3.3K 361 31
                                    

Probar tu boca por primera vez fue como visitar el paraíso.

Con un boleto gratis de ida.

Aquel día estabas muy triste y deprimida.

No parabas de llorar.

Tus lágrimas empapando mi camisa favorita, pero no le di importancia.

Nada importaba... Sólo tú.

Habías perdido a dos personas importantes para ti en tan poco tiempo.

Lo entendía.

Entonces, me acerqué a ti y te besé.

Admito que me aproveché de tu vulnerabilidad.

No me culpes.

Tú estabas tan cerca y yo no pude resistirme.

Moría de ganas por besarte.

Las ganas fueron más fuertes que yo en ese momento.

Oh, Daisy...

Gracias por el mejor beso de toda mi vida.

Oh, DaisyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora