Venganza Jinyuuriki

Un refugio

Naruto y su nuevo compañero han decidido unir fuerzas para poder salir y algún día cuando sus habilidades hayan crecido lo suficiente, acabar de una vez por todas con la gente que mas odian.

-¡Jutsu multiclones de sombras!- Con ese llamado inicia la pelea por la libertad.

Una decena de ninjas aparecen en el acto intentando frenar a los dos niños llenos de odio por el rechazo a como diera lugar.
Por cada uno de ellos hay 20 clones de sombra, dificultándoles la tarea. Gracias a esa ventaja en cantidad no importa demasiado la experiencia escasa en pelea que tienen y logran derrotar a los guardias rápidamente.

A lo lejos se puede ver al ninja que logro atrapar a Naruto, al parecer es una persona muy poderosa y deciden mejor seguir silenciosamente entre las sombras.

El sol se empezaba a ocultar detrás de las montañas con lentitud y calma, mostrando sus últimos rayos del día y dando paso a la noche. Apresar del tiempos requerido, Naruto y su compañero lograron escapar de la aldea sin levantar tanto escándalo pues sus habilidades aun son insuficientes y requieren de un maestro que sea capaz de entrenarlos para su propósito, alguien con el mismo deseo de venganza.

Saltando por las ramas de los arboles es donde tienen mas visibilidad del terreno que los rodea y así poder evitar cualquier trampa. Tienen que buscar un lugar donde descansar sin que nadie sepa donde están.

-Por aquí, mira- Naruto a encontrado una cueva entre dos pequeños montes que al parecer esta inhabitado.

Prendieron una fogata y se quedaron mirando como la madera sucumbía a las llamas del fuego. Tenían muy poco que se conocían y no encontraban la manera de empezar una conversión.

-Mi nombre es Gaara- Naruto lo miro, su compañero tenia la misma edad que él, cabello rojo, piel blanca, sus ojos verdes tenían unas ojeras tan profundas que eran completamente negras, no poseía cejas y en su frente estaba una marca de un símbolo japones que significa "amor". –Pertenecía a la aldea de la arena, mi padre es el Kazekage y tengo a la bestia de una cola en mi interior.

- Soy Uzumaki Naruto, era parte de la aldea de la hoja, no se nada sobre mis padres y tengo al zorro de las 9 colas en mi interior.

Nuevamente el silencio invade el lugar, ha sido un día muy agitado para los dos y merecen descansar un poco antes de seguir su camino.

- Yo no puedo dormir, la bestia me lo impide es por eso que tengo estas ojeras. Yo vigilare toda la noche. - Con plena confianza, Naruto se sumerge en sus sueños mientras Gaara le cuida las espaldas.

Sin embargo, el niño de cabellos rubios no esta soñando, se encuentra de pie enfrente de la jaula enorme de la bestia de las 9 colas donde se escuchan gruñidos y una risa grave llena de sadismo.

-Mira lo patético que eres ahora, escapas como una rata junto con el jinjuuriki de una cola. Si me liberas podre acabar con la aldea rápidamente.

-¿Entonces por que hace 10 años terminaste dentro de mi?, los dos sabemos muy bien que aun no estamos listos para eso, deja de molestar necesito dormir - Desafiar a la bestia es una practica que a este niño prófugo ya no le asusta.

La furiosa criatura presa lanza un terrible rugido que resuena por todo el desconocido lugar.

- ¡¿ESTAMOS?!, ¡¡TU NO ERES NADIE SIN MI!!

-La persona que decide si sales o no soy yo y hasta que no cambies de actitud no saldrás de ahí, reuniremos a todos los jinjuurikis y crearemos un mundo diferente donde seamos beneficiados. Me voy.

-¡¡¡NARUTO!!!- fue lo último que escuchó esa noche donde la penumbra le abría un camino distinto al que sus padres hubieran querido que tuviera.