Venganza Jinyuuriki

Los Exámenes

– Lo siento Sasuke pero... Simplemente quisiera estar sola por ahora – inclino la cabeza en respuesta a la invitación de salir a pasear.

Sakura giro lentamente y sin mirar atrás siguió su camino de regreso hacia su hogar. Sasuke contuvo con todas sus fuerzas la ira que tenía en su interior y simplemente apretó los dientes mirando al suelo. Nada estaba saliendo bien para este chico.

Pasaron dos semanas desde el primer entrenamiento, los estudiantes de Konoha cada vez iban mejorando sus habilidades con las armas y pergaminos y pronto llegaría en momento donde todo lo aprendido seria aplicado en una prueba que se realiza una vez al año, me refiero a los exámenes "Chunin"

– Bien, llego el momento en donde participarán en el examen Chunin– Dijo Kakashi con la tranquilidad de siempre.

– ¿Exámenes Chunin? – Pregunto Sakura. 

–Recuerden que en el mundo ninja existen niveles "Genin, Chounin y Jounin". Todos los años se realizan pero menos de la mitad de los participantes logran pasarlo con éxito, es por eso que no debemos perder tiempo y seguir entrenando.

– ¡Si! – Respondieron los dos.

Los siguientes días serian muy importantes y cruciales para saber si tienen lo necesario para atrapar a la bestia de nueve colas. Pero para otros seria un buen momento para conseguir que sus planes sigan en el camino correcto.

–Señor Orochimaru los exámenes Chounin se aproximan, ¿cual es el plan?– Kabuto informa mientras le sirve un vaso con agua.

–Es momento de mover las piezas de este ajedrez a nuestro favor hasta que consiga lo que quiero.

– Es una lástima que sus estudiantes no podrán participar y mostrar sus habilidades.

– Descuida Kabuto, de cualquier manera las mostrarán y este mundo no sera el mismo después de eso.

En uno de los cuartos de la guarida, están Naruto y Gaara practicando sin enterarse de nada acerca del mundo exterior, no lo creen importarte por el momento y prefieren usar toda su concentración en su entrenamiento.

  – ¡Jutsu de invocación! – Naruto esta perfeccionando la habilidad de poder invocar serpientes del tamaño que sean necesario.

A su lado apareció una serpiente que era del tamaño parecido a su invocador. Este reptil era de color morado oscuro con algunas franjas negras, ojos verdes que parecían que podían penetrar el alma de cualquiera y regularmente sacaba su larga lengua negra. Estos animales no son muy amigables ni con sus propios invocadores por lo que rara vez les dirigen la palabra sin tratarlos como seres inferiores.

  – Demasiado pequeño... desaparece – En un instante aquella serpiente se desvanece dejando una nube de humo en su lugar que poco a poco se esparce.

Hace no menos de una semana fue que Orochimaru les enseño ese Jutsu de invocación que han estado perfeccionando con el pasar de los días. Naruto a logrado invocar una de 3 metros pero aun cree que no es suficiente, en cambio Gaara a optado por solo copiar los movimientos de estas imponentes serpientes y crear las suyas con arena que puede controlar casi a la perfección.

A causa del uso excesivo de chakra, Naruto se siente cansado y apenas puede mantenerse de pie. Dicha falta de energía provoca que pueda oír la voz de aquella bestia que habita en su interior que lo incita a usar su poder.

  – Escucha, ahora somos aliados que su única misión es rescatar a nuestros compañeros y destruir a nuestros enemigos, no entiendo porque sigues insistiendo en tomar mi cuerpo.

  – ¡Tu y yo no somos compañeros!, ningún ser humanos lo sera y mucho menos los que son los recipientes de mis hermanos.

  – Juro que algún día te haré cambiar de opinión y juntos terminaremos esto de una vez por todas – Naruto muestra su determinación por el ser que ah estado mas tiempo con él. 

Esa misma noche intento hablar con aquel zorro de nueve colas de la manera mas tranquila posible y logro conseguir saber su verdadero nombre, "Kurama" algo que le asombro porque el creía que no tenia. No conversaron mucho tiempo pero Naruto sabia que poco a poco conseguiría ganarse su lealtad y amistad, no podía darse el lujo de no lograrlo si quería que sus planes resultaran  a la perfección.