Wherever you will go. (Donde quiera que vayas). Capitán América.

Capítulo 1; New York, New York

En aquel lugar solo se escuchaban los golpes propinados a ese cuarto saco de boxeo sin parar. No se escuchaba ni un jadeo de cansancio, el lugar estaba solo con una persona allí dentro que con cada golpe sacaba el tormento de sus recuerdos. Nick Fury entro sin anunciarse y encontró allí a quien buscaba, al Capitán América, él quien acababa de despertar hacia menos de 6 meses. Steve Rogers ignoro su entrada y colocaba el quinto saco de boxeo.

- ¿No puede dormir? - pregunto obteniendo la atención del otro hombre rubio

- Dormí 70 años, Señor. Ya dormí suficiente - respondió mirándolo para después regresar su atención en el nuevo saco de boxeo

- Entonces debería estar fuera, celebrando, viendo el mundo del que se perdió tantos años.

Ante sus palabras Steve dejo de golpear el saco, lo miro por un segundo para luego girarse hacia sus cosas y quitarse sus vendas de sus manos, se sentía sin ganas de ello, le interesaba poco saber sobre ese mundo que avanzo sin él.

- Cuando desaparecí estábamos en guerra, cuando despierto dicen que ganamos. No dijeron lo que perdimos

-Hemos cometido algunos errores - dijo Fury - Algunos, muy recientes

-¿Viene con una misión? - pregunto al ver como Nick Fury sacaba de su espalda una carpeta para mostrársela

- Así es – acepto el Director de Shield

-¿Quiere regresarme al mundo? – Steve frunció el ceño

- Quiero salvarlo - entonces le entrego la carpeta con la información

- El arma secreta de Hydra - dijo Steve al abrirla y ver el contenido

- Howard Stark saco eso del mar cuando lo buscaba a usted, él pensó lo mismo que nosotros, el Teseracto puede ser la clave para una energía ilimitada. El mundo necesita eso. - explico

- ¿Quién se lo quito? - pregunto Steve cuando cerró y regresaba a las manos de Fury esa carpeta

- Se llama Loki, no es de por aquí. Tendremos que ponerlo al corriente si decide participar. El mundo se ha vuelto más extraño de lo que piensa.

- A estas alturas nada me sorprende - Rogers comenzó a ponerse de pie y tomar sus cosas.

- Diez Dólares a que se equivoca – dijo apostando Fury - Hay un paquete de información en su apartamento. ¿Hay algo del Teseracto que usted sepa y que deberíamos saber?

- Deberían de haberlo dejado en el fondo del océano.

Stevele dio la espalda a Fury marchándose de allí. Fue a las regaderas para salir,este mundo era diferente a lo que recordaba y tenía que acostumbrarse a él,poco a poco lo hacía. Sabía que le ocultaban muchas cosas, que Fury le decíalas cosas de poco a poco y eso podía desesperarle, además de que hay algunasque le ocultan. Desde que despertó se acostumbraba a las ropas, a la gente, alas nuevas calles de su New York y de su New York que ya ni siquiera sabía si podríallamarle suyo, estaba tan cambiado, 70 años han hecho muchos cambios.Habia muchas tiendas nuevas en las calles, mucha libertad en las personas,nuevas universidades y encontraba muchas sonrisas en la gente, no habíapenumbra de una guerra, eso le agradaba. Tenía que aprender a manejar la tecnología,pero también lo haría paso a paso. Caminaba a su departamento, esos meses habíacomenzado a hacerlo para pensar y meditar, también para conocer. Se perdía en sus pensamientos y ponía atención en su alrededor, a los niños, a las casas, a los animales, al cielo, a todo lo que alguna vez se perdió y por tanto tiempo no vio. Escucho un fuerte golpe que le hizo girar su mirada, del otro lado de la calle una chica había caído con sus cosas, varios libros quedaron esparcidos a su alrededor, papeles, su mochila y varias cosas que ella traía consigo. Steve cruzo la calle para ayudar la joven que comenzaba a recoger sus cosas.