Capítulo 17: Decisiones.

34 4 53
                                    


Narra Lily.

El fin de semana había llegado y con eso mi cita con Eric Luna. El primer chico que me había gustado en primaria y que hoy por fin había aceptado salir conmigo, lo cual sonaba entre irónico y aterrorizante porque siempre había pensado que era gay pero luego de él mismo aclararlo y luego de haber hablado largas horas durante el día me plantee la posibilidad de que quizás él era el chico indicado.

Mientras deslizaba el ceñido vestido negro, y comenzaba a verme en el espejo para maquillarme no podía dejar de pensar en qué diría Ed en este preciso momento. ¿Estaría el orgulloso de todo lo que he logrado? ¿Estaría orgulloso de la manera en que he cuidado a Sophia?.

No podía evitar emocionarme ante el recuerdo de su cálida sonrisa y en la forma en que sus ojos se achinaban en ese mismo acto.

- Lily, llego tu cita–Grito desde abajo Harry al sentir el timbre.

Repase nuevamente el lápiz labial rojo para ponerme los tacones negros y bajar por la escalera. De manera erguida, y con su característica gorra, sentí como aquellos orbes esmeraldas parecían desnudarme con la mirada.

- No me mires así!–Me queje ruborizada.

- Estas guapísima, Lily–Murmuro aun sosteniendo a Sophia quien jugaba con su cabello.

- Oh, pues!... Muchas gracias–Conteste tomando el mango de la puerta principal.

- Más le vale a ese idiota que no te haga daño–Advirtió ayudándome a ponerme la chaqueta.

- Desde cuando te has puesto tan sobreprotector, Styles?–Me burle.

- Soy así con lo que quiero–Respondió.

Me voltee frunciendo el ceño divertido y esperando a que dijese que era una broma pero no. Él lucia sumamente serio mientras inspeccionaba mi rostro ante mi posible respuesta y en cuanto le iba a responder sonó nuevamente el timbre.

- Esto... Será mejor que me vaya–Murmure.–Cualquier cosa me llamas.

Abrí la puerta principal quedando expuesta ahora a los ojos azules de Eric quien sonreía y sostenía en sus manos un ramo de flores.

Vaya cliché. Pensé.

- Flores...–Fingí una sonrisa.

- Igual de bellas que tú–Contesto.

- Eh, doc...–Hablo tras de mí Harry.–Deberías saber que Lily odia eso–Se burló.

- No, que dices!–Exclame intente arreglarlo–Están muy lindas gracias, Eric!

- De verdad no te gustan?–Pregunto con tono triste.

- Ignora a Harry es que le hace falta una chica por eso pretende arruinar mis momentos–Me queje.

Luego de ver como rodeaba los ojos, Eric me encamino hacia su auto para luego de conducir cerca de quince minutos detenerse en uno de los mejores restaurantes de la capital.

- Eric, esto es demasiado–Murmure anonada.

- Tú eres demasiado, Lily–Me sonrió.–Tú te mereces esto y más.

Entramos en aquel lujoso restaurante mientras era observada por una que otra chica envidiosa de estar de la mano con Eric, al parecer él frecuentaba mucho este lugar y lo confirme cuando la mesera le llamo por su nombre para luego agregar un "lo mismo de siempre, Eric?".

Pese a que él intento aclararse la garganta ante la incómoda y coqueta mirada de la chica, nada en mi interior pareció alarmarse. Es más cuando fue a escoger la carta de vino tome mi teléfono para notar como el contacto de WhatsApp de Harry se encontraba en línea, con su ventana de mensaje abiertas mis dedos me exigían teclear cualquier cosa con el fin de hablarle y cuando intente bloquear el teléfono para olvidarlo, esté vibro en mis manos.

"Cómo lo está pasando la chica guapa?" Harry 22.45 pm.

"Genial y tú?" Enviado 22.45 pm.

"Para ser una respuesta tan rápida... permíteme replanteármelo jaja xx" Harry 22.46 pm.

"Ok" Enviado 22.47 pm.

"No te enojes pero tú sabes que eres de esas chicas que odian los clichés, que prefiere estar en una moto antes que un lujoso auto. Eres de esas chicas alocadas que no pretenden ser formales en su vida y que odian tener un ramo de flores; más bien prefieren mil veces a que la callen con un beso y sabes por qué?" Harry 22.48 pm

"Harry... detente" Enviado 22.48 pm..

- Todo bien?–Frunció el ceño Eric.

- Esto sí... Me enviaban un mensaje de la pastelería–Mentí.

"Porque te encanta vivir el momento, Lily. Y eso lo supe en el momento en que te conocí...No soy bueno haciendo promesas pero si te gustaría causar problemas y tener un pequeño secreto encuentro ahora. Sal de ese maldito restaurante cinco estrella y trae a ese jodido hermoso culo conmigo" Harry 22.50 pm.

"Qué te hace pensar que voy a obedecerte, Styles?" Enviado 22.53 pm.

Mis manos temblaron ante el calibre del mensaje que había mandado Harry, jamás me había hablado, o más bien escrito, de manera tan autoritaria. El cuerpo de Eric se apodero de mi plano visual para luego sonreírme de aquella manera encantadora que era propia de él para luego servirme una copa de vino.

"Ahora. Sino juro que te dejaré tranquila para siempre, Lily" Harry 22.53 pm

¿Realmente quería que me dejará tranquila?. Nos fastidiábamos siempre pero aquello jamás influyo algún tipo de molestia, más bien, no me veía sin Harry molestándome siempre.

Sentía como mi corazón palpitaba ante la extraña confesión que me había hecho hace unos segundos.

- Todo bien?–Pregunto Eric y yo asentí.

Pero claramente no era así, todo estaba mal... Malditamente mal. Necesitaba comprobar por mí misma que él estaba fuera de este restaurante, tenía que comprobar por mí misma que era lo que comenzaba producir Harry en mi corazón.

- Eric... Tengo... Tengo que ir al baño–Murmure a lo cual él asintió para indicarme donde era.

Luego de una falsa sonrisa, me aproxime al lujoso baño intentando cuestionarme lo que estaba a punto de hacer. Antes de poder seguir meditándolo, supe que era tarde puesto que mis piernas ya me estaban llevando a la salida.

Sintiendo como mi corazón golpeteaba mi pecho levante mi mirada y lo encontré recostado en una lujosa motocicleta negra marca Harley.

- De donde has sacado eso?–Pregunte anonada.

- Eso importa?–Frunció el ceño mientras permanecía con sus brazos cruzados.

Joder, esa chaqueta de cuero lo hacía lucir ardiente.

- Y Sophia?–Me altere por un momento.

- Mamá llego hoy. Unos minutos luego de qué te fueras así que está todo bien y bajo control, señorita perfección–Se burló acercándose a mí para luego tomarme duramente desde las caderas–Ahora me darás mi rendezvous?

- Joder–Me queje mirando sus apetitosos labios–Esto esta tan mal...

- Pero está claro que a ti te pone lo malo, no?–Mordí mi labio completamente nerviosa y luego asentí.– Por eso soy perfecto para ti, Lily. 

¿Quién dijo que seria sencillo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora