Capítulo 10.

1.7K 172 103
                                    

Muchos me preguntaron quién era Jenny, así que se las dejo en multimedia. 

   Empecé a sentir como unos dedos se mecían ligeramente por mi abdomen y como unos rayos salían entre las cortinas de... esta no era mi habitación. Me desperté de golpe y me topé al instante con un par de ojos azules que me miraban risueños.

—Buenos días. —me saludó y yo un poco asustado me levanté del colchón en el que había dormido y noté algo: estaba completamente desnudo, y Jenny que estaba acostada sobre la cama; estaba en la misma situación que yo.

—¡¿Qué mierda?! —grité sorprendido y causé que ella diera un pequeño brinco asustada—. ¡No, no! ¡Esto no pasó! 

—¿Qué te pasa, Natsu? —preguntó y se sentó en la cama, dejando sus senos al desnudo—. ¿Estas bien? 

—¿Cómo quieres que esté bien? ¡Tuvimos sexo! ¡Sexo! 

—No importa. Digo; tú no tienes novia y yo acabo de terminar con Rogue. No estamos siendo infiel a nadie...

—¿Qué hora es? —la interrumpí antes de debatirme o comerme la cabeza por lo ocurrido. No estaba bien lo que había hecho, no lo estaba. Pero, ¡Mierda! No recordaba demasiado de ayer. Estaba con Lucy en la barra de bebidas y luego... ¡Lucy! 

—Pasadas de la cinco de la mañana. —respondió ella y yo algo cohibido empecé a vestirme con mi ropa que estaba esparcida por la habitación—. ¿Qué haces? —preguntó mientras veía como me vestía. 

—¿Qué más? Voy a ir a la escuela, es Lunes. —le respondí y ella también empezó a cambiarse, pero con ropa de su armario. 

—Eres sorprendente, Natsu... —me dijo desde el otro lado de la habitación—. Yo tengo auto, te llevó al instituto. —volvió a decir, pero esta vez se asomó entre su armario para verme sin sentir pena de mi desnudez. 

—Jenny, —la llamé—. ¿Podrías no decirle a nadie de lo que sucedió? —le pregunté y a duras ella asintió. 

   Luego de unos minutos ya estábamos los dos desayunando en la barra de la cocina, donde anteriormente se servían las bebidas y sorprendentemente todo el primer piso estaba impecable. No había ningún rastro de que hace unas horas ahí se había dado una fiesta o si quiera que al menos unas quinientas personas estuvieron ahí para celebrar con Jenny su rompimiento con Rogue, incluso yo había aportado un poco al haberme acostado con ella.

—¿Cómo es que todo está limpio? —pregunté antes de llevarme otra cucharada de cereal a la boca.

—Tenemos servicio de limpieza, justo cuando todos se van; ellos empiezan con su trabajo. Duermen aquí en la casa, sus cuartos están en el tercer piso.  —me respondió ella con simpleza y bebió un poco de su jugo de naranja. 

—¿Tus padres te dejan hacer fiestas tan innecesarias como para celebrar que hayas dejado a Rogue? —le pregunté y ella sólo esquivó mi mirada. 

—No lo sé, no están en casa desde hace dos semanas; están trabajando fuera del país. —respondió con simpleza y siguió con su simple desayuno que consistía en un sándwich de jamón acompañado de un jugo de naranja—. Y yo no terminé con Rogue...

—Pero... —la interrumpí, pero ella volvió a interrumpirme: 

—Él terminó conmigo porque va a ser padre, dejó embarazada a una tipa en una fiesta y decidió terminarme para hacerse responsable de todo. Pero claro, si él no terminaba conmigo yo lo iba a ser con él. 

—Y yo que creí que no se podía ser más idiota que yo. —dije, pero el tono en que sonó, fue como un consuelo y Jenny lo notó. 

—Natsu, ¿podrías fingir que...

—Lo siento, Jenny. —la interrumpí—. Estoy intentando salir con una chica. —respondí y ella se encogió más en su silla. 

—Sí, Lucy me contó de todo. —respondió e instintivamente mi mirada se fue hacía ella. 

—¿Cómo? ¿Tú y...

—Sí, somos amigas. —me interrumpió—. ¿Está mal? —preguntó. 

—¿Qué sean amigas? —pregunté y ella negó. 

—No, que nos hayamos acostado. —corrigió y resopló—. Digo, Lucy es virgen y...

—No quiero acostarme con Lucy. —la interrumpí y ella me vio aún con más sorpresa que con la que yo la miraba a ella.

—Pero... ella creé que te quieres acostar con ella. 

—Claro que no. Bueno, si quisiera pero esa no es mi prioridad. —respondí y ella negó. 

—Cuando Lucy vino diciéndome que sólo la querías para sexo, yo le dije que se alejara de ti. Claro que ella es tan terca que prefirió seguir "conociéndote". 

—Así que detrás de ese papel de perra, das buenos consejos. —le dije y ella sólo me miró ofendida. 

—¿Quién te dijo eso? 

—Gray. —me limité a decir y ella sonrió. 

—Me ama. 

   Después de que desayunáramos, nos fuimos en su auto a el instituto y cuando bajamos, inmediatamente me sentí intimidado. Todos nos habían visto llegar juntos y la mirada que me daban mis amigos era de sorpresa. 

—No me digas que...

—Cierra la boca. —interrumpí a Gajeel y seguí caminando, buscando una cabellera en particular, rubia en especifico. Y la vi, a unos veinte metros de donde me encontraba—. ¡Lucy! —grité y de la nada todos los del pasillo voltearon a verme, incluyendola a ella. 

—¿Natsu? —preguntó y caminó hasta mí, pero antes de que llegara, Rogue se interpuso entre nosotros. 

—¿Cómo te fue con Jenny? —preguntó y sonrió con perversidad. 

—Ahora no, Rogue. —contesté y pasé sobre él para llegar con la rubia. 

—¿Así que te acostaste con Jenny? —gritó por el pasillo y Lucy lo escuchó. Mierda. 

—Natsu, tú... 


Enamorando al Amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora