-Amigo amigo, está bien?- una lejana voz saca a Santos de su letargo
-Amigo, despierte!!- Santos abre los ojos y ve a un hombre de cabello oscuro que lo mira con cara de preocupación.
El desconocido lo samarrea con más fuerza,
-despierte!!-
Santos hace amagos para sentarse
-Dónde estoy?- cierra los ojos por el sol y se frota el rostro. Mira a su alrededor, está en la Poza.
-Amigo- el hombre lo ayuda a pararse -qué le pasó? Está bien?-
-Sí...sí...- Santos tartamudea. Se para y se apoya en el hombre.
-Disculpe la molestia, ya estoy bien. Sólo me había quedado dormido- sonríe avergonzado
-Yo lo vi tirado como muerto, por eso me preocupé. Que gran alivio que este bien- el hombre también sonríe.
-Sebastián Navarro- le tiende la mano-Santos Luzardo- estrecha su mano.
-No eres de por aquí, verdad?- pregunta Santos
-En realidad sí, nací aquí y pase todo mi infancia en estas tierras. Me fui para terminar mis estudios. Me gradué y volví- responde Sebastián con una sonrisa -quiere un café?- extiende su mano en dirección a la camioneta
-Me vendría muy bien- Santos se frota el rostro
-Puede confiar en mi- Sebastián le palmea la espalda. Se encaminan a la camioneta.
Ya en camino Santos se sobresalta
-Cabos Blancos!!-
Sebastián lo mira incrédulo
-Disculpe?-
-Cabos Blancos, mi caballo, yo llegué a la Poza con mi caballo, lo olvidé-
-cuando llegué no había ningún caballo, quizás se haya ido, dígame está adiestrado?- Sebastián trata de calmar a Santos y frena la camioneta.
-Sí, es muy manso y apegado a mí, su dueño-
-Entonces seguro que aún merodea por la zona o regresó a su hacienda- Sebastián lo toma del hombro -tranquilo, voy a regresar y lo buscamos, calma- sonríe y Santos le devuelve la sonrisa, ese hombre le inspira una extraña confianza.
Regresan a la Poza, Sebastián rodea el lugar con el vehículo y tras unos árboles Cabos Blancos come tranquilo.
-Ahí está!!- señala Santos con un gesto como si el alma le volviera al cuerpo
-Vió? sabía que lo encontraríamos, el pobre tenía hambre- lanza una risa contagiosa y bajan del vehículo.
Santos toma al caballo y lo monta,-qué te parece si el café lo tomamos en Altamira?-
-De acuerdo, vaya yo lo sigo- dijo Sebastián mirando atentamente a Santos. No lo ve muy bien.
Llegaron a Altamira
Marisela corre y se cuelga de Santos
-Mi amor, dónde estabas? Estaba tan preocupada por ti- Lo besa
Sebastián mira a Marisela de la cabeza a los pies
- La salvajita- sonríe
-Qué??- Marisela chilla lanzandole una mirada matadora
-Tú eres Marisela, la hija de Doña Bárbara, la salvajita- le tiende la mano - Soy Sebastián, una vez me tiraste todos los tambores que llevaba en la camioneta porque no te regale no me acuerdo que cosa- lanza una carcajada.
Santos lo mira serio con los ojos entre cerrados
Marisela lo deja con el saludo colgado y se gira a Santos.
-Debes estar hambriento amor, te preparé un riquísimo almuerzo sólo para ti- Mira a Sebastián por el rabillo del ojo.
Sebastián entiende el mensaje y lanza
-Y tú madre? La gran y hermosa Doña Bárbara??-
Santos se sorprende y lo mira con los ojos en plato
Marisela ya está enojada
-Se fue del Arauca- contesta fría y toma la mano de Santos para encaminarse al comedor.
-Santos!! Y mi café??- sonríe de oreja a oreja y levanta los brazos
Marisela bufa
-Claro, por qué mejor no te quedas a almorzar?-
Responde Santos haciendo el ademán con la mano para que los acompañe al comedor
-Y bueno... ya que insistes...- Sebastián se está divirtiendo de lo lindo - a ver que tan bien cocina la salvajita- ríe
-Está aprendiendo- dice Santos divertido, está entendiendo el juego de Sebastián
Marisela bufa y mira a Sebastián muy enojada
-Que lastiman Seba, sólo hay comida para dos- sonríe sarcástica
-que bien!!- se acomoda en la mesa y se frota las manos -Te acompaño Santos, total Marisela esta a dieta y sólo almorzará una manzana, verdad?- mira a Marisela de reojo.
Santos ya no puede contener la risa
ESTÁS LEYENDO
Doña Bárbara 2 : Nueva Oportunidad
FanficBárbara sintió que todo se había cumplido, que su tiempo había terminado. Pero Paulina Durán, no sólo se transformará en su mejor amiga, sino también le demostrará que siempre existe una nueva oportunidad en la vida, si se aprende a interpretar las...