Un lío de amor ©.

CAPÍTULO 14.

Papá toca la puerta de mi habitación una y otra vez, pero no quiero verlo y mucho menos hablar con él, no pensé que no iba a tener la suficiente confianza para contarme que era lo que pasaba, mi corazón en estos momentos esta destrozado gracias a él y a sus mentiras, todo por ocultarme desde un principio lo que pasaba con la señorita Jennifer, papá tiene todo el derecho a estar con una persona, pero no tiene el derecho a engañarme y mucho menos a estar en ciertas escenas en un lugar que para mí es FAMILIAR, hablo de mamá, él y yo, no hablo de el y la señorita Jennifer casi teniendo sexo en la barra de la cocina, ¡Me repugna ese par!.

Tomo mi celular y reproduzco mi lista de música, tomo mis audífonos y así logro escaparme de todo lo que me está atormentando. No sé porque tiene que pasar esto, mi vida estaba feliz, tengo a Andy, Kris y Thomas, me hace feliz saber que puedo contar con ellos y justo papá lo arruina todo, ¡Carajo! extraño tanto  a mamá y a nuestra antigua vida, dejo mi celular a un lado y busco quedarme dormida, unas cuantas llamadas de Andrés pero no contesto, no tengo ganas de hablar ahorita, mi padre se cansó de tocar la puerta y tal parece a decidido marcharse, mis ojos empiezan a cerrarse un poco y logro quedarme dormida.

En medio de mi sueño escucho unos golpes en la puerta y unos gritos de un hombre al que no logro identificar, me asomo a la ventana de mi habitación y puedo ver claramente a papá con su camisa por fuera del pantalón, su saco colgando en su hombro, su corbata suelta y un poco despeinado, le da golpes a la puerta y grita un par de cosas con un hipo de por medio que no logro comprender, mi sangre hierve y lo único que pienso es ''¡Bravo papá!, tienes un problema familiar y lo que haces es salir a beber'' tomo mis pantuflas y bajo rápido las escaleras, le abro la puerta a papá y éste se tira sobre mi llorando y susurrando -Perdóname pequeña, es algo que no volverá a suceder, perdóname Ali, ¡perdóname!-. Tomo su brazo y lo poso en mi hombro haciendo que se sostenga un poco sobre mi, tiro la puerta con mi pie izquierdo y subo con papá hacía su habitación -Excelente, tengo quince años y ya estoy lidiando con un borracho- Digo mientras tengo a papá con su hipo encima de mí, lo tumbo en su cama y quito sus zapatos, su camisa y su correa, lo dejo descansar y bajo por un poco de agua, pero antes paso por mi habitación para buscar mi teléfono, 20 llamadas perdidas de Andrés, 3.00a.m, no creo que sea buena hora para devolverle la llamada ¿O si?, marco su número y repica muchas veces pero no contesta, intento de nuevo y ya puedo notar que habla con un gran esfuerzo...

-¿Aló?

-Hola amor, soy Ali
-Ah, eres tú

-Sí, ¿Quien más te podría estar llamando a las 3:00a.m?
-No lo sé Alicia, no lo sé

-¿Estás bien?- Pregunto mientras espero un NO
-No, contigo no, ¿Qué es lo que te pasa? ¿Por qué no contestas mis llamadas y por qué me llamas a esta hora? ¿Donde estás?
-Andrés cálmate, tuve un problema con papá y no quería hablar con nadie, hace unos minutos papá llego ebrio y me levantó para que le abriera la puerta, justo ahora estoy en la cocina tomando un poco de agua
-Alicia, si te recuerdo soy tú novio y conmigo puedes contar siempre, no debes porque ignorar mis llamadas y mucho menos hablarme cuando se te da la gana
-Perdón amor, lo siento mucho pero de verdad no estaba para hablar con nadie, te extraño y espero que termines de pasar una buena noche, descansa, yo te escribo cuando despierte y hablamos mejor, lo siento

-Adiós.  

La llamada con Andrés no terminó muy bien, siento que vendrán problemas en esta relación.