¿Alguien quería drama?¿Alguien deseaba la actualización de este fic? Espero que estén preparadas para lo que se avecina XD Solamente diré que me ha gustado mucho escribir este capítulo, no sé, siempre me enternece pensar en Kamui cuando era un pequeño e inocente niño. Pero ya me darán sus opiniones ustedes cuando terminen y se queden impactadas : ) Lo sé, soy terrible.
*-*-*-*-*
No entendía por qué debía vestirse de esa manera tan restrictiva cuando solamente era un niño, un simple infante que no se preocupaba por las apariencias ni lo que la gente pensara sobre su manera de vestir. Pero parecía que su opinión no pesaba lo suficiente para sus padres, para esos que iban un par de metros por delante de él mientras llevaban de la mano a quien no solamente disfrutaba del paseo matutino, sino también de esas bonitas ropas que portaba.
Sin embargo, no podía objetar abiertamente, no cuando la hermosa y cálida sonrisa de su madre se asomaba por sus labios y se la dedicaba tranquilamente. Ella sabía muy bien cómo mantenerle tranquilo y cooperativo.
—Sé que no te gusta vestir esa clase de ropas, pero iremos a una comida formal y debes estar presentable —decía amablemente la mujer a la vez que se acercaba a su pequeño y le tomaba de la mano aun cuando él no gustaba mucho de ello por lo reservado que solía ser para las muestras de afecto.
—He ido miles de veces a esa casa a comer...y nunca he tenido que usar esto —no podía existir algo más divino que su hijo portando un pequeño smoking negro de vestir.
—Eso es porque hoy es una ocasión especial —agregó.
—¿Y qué se supone que se celebra?
—Oh, ¿acaso ya lo has olvidado? —preguntó con una risita burlona—. Si no dejabas de mencionarlo todos los días... Decías que comerías un delicioso pastel y mucha comida hasta reventar —le recordaba animosamente. El pelirrojo simplemente miró en otra dirección, sonrojándose por la pena—. Eres un completo glotón.
—¡Fiesta, fiesta, fiesta!¡Regalos, regalos, Kagura quiere regalos! —tarareaba felizmente la pequeña que no era difícil que captara la atención de todos.
—Papi te comprará algo cuando sea tu cumpleaños, Kagura —le decía Kankou a su pequeña descendiente—. Así que debes ser paciente porque Papi te traerá algo realmente alucinante.
—¡Sí, sí, ya quiero que llegue mi cumpleaños! Celebrémoslo mañana.
—Todavía falta mucho para noviembre —explicaba Kouka—. Pero podríamos comprar un pequeño pastel para todos.
—Oh, los que venden cerca de la estación saben muy bien —apoyaba la noción el pelinegro.
—Pero compremos ese que trae muchas fresas y cerezas.
—¿Algún motivo en especial? Tú siempre elijes el de chocolate —curioseaba el padre.
—Hace unos días pasamos por allí mi hermano y yo, y él se quedó viendo ese pastel largo rato mientras sus ojos brillaban como estrellas —exponía con una sonrisita encantadora—. Así que compremos ese para que lo pruebe.
—¡Kagura, no tienes que estar contándoles eso! —exclamó claramente apenado—. Era un secreto entre los dos —replicó.
Conocía perfectamente todo lo que le rodeaba con lujo de detalle. Desde ese serpenteante camino que llevaba hasta el jardín trasero, hasta la gran escalinata que iba directo a la puerta principal; también reconocía al personal que trabaja allí y que ocasionalmente le daban una que otra golosina sin que nadie se enterara.
También reconocía a la mujer que esperaba por ellos a la entrada de su hogar con esa sonrisa que nunca faltaba en sus labios. Sí, esa misma que siempre vestía elegantemente con hermosos y coloridos kimonos que le sentaban espléndidamente bien.
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~Our Promise~ [CANCELADA]
Fiksi PenggemarÉl era una bestia adicta a las peleas y a los grandes problemas. Ella, una niña insolente harta de su estilo de vida. Él era como el sol, imponente e indomable. Ella era como la luna, protectora pero solitaria. Ninguno encajaba en el mundo del otro...