LOU | Larry Stylinson

Capítulo 8

Eran las 16:10 PM y Harry se miró al espejo unas... 17 veces porque para él estaba totalmente horrendo. Se alejó del espejo cuando su mamá entró a su habitación sorprendiéndolo.

—¿Y tú chiquillo dónde piensas ir, eh?

Harry se miró a sí mismo y luego levantó su rostro para mirar a su madre que se encontraba con los brazos cruzados. Esto nunca pasaba con su papá y ahora mismo necesitaba su ayuda. Quería gritar: "¡Papáááá!" pero obviamente no podía.

—Lou —dijo y luego señaló hacia afuera—. Lou —se tocó el pecho con la palma de la mano.

—¿Quién es Lou?

—Louis —habló Des entrando a la habitación.

Y Harry respiró mejor de lo que ya hacía. Y asintió en dirección a Anne.

—¿Louis? ¿Quié-?... ¡Oh! Ese chico. ¿Qué pasa con él?

—Harry saldrá con él a caminar, cariño —dijo Des con una sonrisa.

—¿Qué? ¿Cuándo pensabas decirme Des?

—Amor, no es algo que necesites saber.

Anne lo miró con suspicacia. Y Harry reprimió una sonrisa.

—Harry... —habló Anne acercándose a él. El rizado ya sabía lo que venía así que suspiró—. ¿Entiendes que tú a Louis no lo conoces, cierto?

Bueno, eso era verdad. Pero... pero quería conocerlo. Había algo en Louis que hacia que él confiara plenamente. No sabía si era por sus ojos tristes, o por la sonrisa sincera que le brinda cada vez que lo ve.

Sus ojos tristes... le hacia poner la piel de gallina.

Asintió con la cabeza.

—Anne, eso n-

—Des... No conocemos a Louis. Y Harry jamás ha tenido... —suspiró—, jamás ha tenido amigos. Y he dicho que Louis es muy grande para él. Quiero decir, sólo estamos protegiéndolo.

—No tiene amigos porque él es especial en todos los sentidos y es un gran chico y los demás sólo ven lo externo, ¿sabes? Louis... Creo que Louis tiene la edad suficiente para ser amigo de nuestro hijo, Anne.

—No estás entendiéndome, Des... Yo... amo a nuestro hijo y yo necesito protegerlo. No podemos dejar que vaya solo con un desconocido, ¿tienes idea de lo peligroso qué está todo?

Harry los miró y rodó los ojos. Empezaban a discutir otra vez y por culpa de él.

—Sé lo peligroso que está todo ahora, y lo entiendo. Te entiendo amor, yo lo hago de verdad. Pero Louis no le hará daño y...

—No lo conoces.

—No pero Harry confía en él y estoy seguro que ahora son amigos. Y no cualquier amigo.

—No lo sé. Esto... esto jamás pasó.

—Sólo deja a Harry salir en paz, Anne. Él estará bien.

—¡Sólo tiene dieciséis años! —elevó la voz y el rizado se sobresaltó un poco—. Des, por Dios. Es lo único que tenemos.

—Estás exagerado —dijo él comenzando a molestarse—. Anne estás exagerando. Sólo saldrá a caminar.

—¿Cómo sabemos que estará bien, eh?

Harry se estaba hartando. Él estaba presente allí, estaba ahí. No hacía falta discutir.

—Lou —dijo, y Anne volteó a mirarlo—. Lou.

—Lou... Lou, ¿es Louis?

El rizado asintió.