A la mañana siguiente, unos de los primeros comentarios de su papá, fueron:
—¿Cómo la has pasado anoche?
Harry lo miró, y paró de servir café en su taza.
—Espero que la hayas pasado bien —sonrió divertido.
El rizado frunció el ceño.
—Quiero decir, no es que supiera con quién has estado...
Volcó el café.
—¡Harry, cariño! ¿Te has quemado? —preguntó su mamá en un tono preocupado—. Hijo, debes fijarte más. Des, por favor, no lo distraigas.
—No yo solamente lo distraigo... ¿sabes?
—¿De qué hablas?
Des alzó los hombros, y se dirigió al sofá para sentarse y mirar televisión.
Así comenzó el día.
Primero; su papá sabía que había estado con Louis en la noche. No es que le molestara que supiera, pero es que Des hacía comentarios respecto a todo las 24 horas del día. Aunque eso hacía sonreír a Harry muchísimo.
Cuando Louis se fue, no sabía cuándo volvería a verlo. Sólo supo en ese preciso momento que no quería que se fuera pero lo hizo. Se despidió, y comenzó a caminar lejos del rizado.
Cada paso que Louis daba para alejarse, era un dolor más en Harry. Aunque no sabía como manifestar eso.
Aunque sabía qué Louis no estaba en condiciones de pagar sus gastos pero haría lo que sea por hacerlo, o Harry haría lo que sea para ayudarlo. O tal vez podía decirle a su padre... quizá él podría entender y podría ayudar a Louis, pero Harry debía informarse bien primero.
No sabía qué hacer.
—Deja de pensar un poco, Harry —habló Des—. No importa cuánto pienses, es mejor si lo haces realidad.
¿Estaba seguro? Lo dudaba.
Des palmeó junto a él para que el rizado se sentara, y lo hizo.
—No tienes por qué ocultarme de que Louis te agrada más de lo que lo hace, Harry —habló su papá, y giró su cabeza para mirarlo—. No sé por qué no está viniendo seguido, pero estoy seguro que él por dentro te quiere.
"Te quiere". No sabía.
Anne bajó de las escaleras, y dijo:
—Harry, amor, ¿sabes de lo qué me he enterado? —sonrió mientras se paraba frente a Des y a Harry—. Nuestra vecina Peggy te ha mirado mucho a lo largo de estos días.
Eso era imposible. Ni siquiera salía. Frunció el ceño confundido, y miró a su papá que estaba de la misma manera que él.
—¿Peggy?
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LOU | Larry Stylinson
أدب الهواة❝Me encanta que digas sólo Lou, Harry. Qué solamente sea yo para ti.❞ 【Harry tiene 16 años y en su corta vida sólo ha dicho "Lou". Nada ni nadie puede hacerle decir otra palabra que no sea "Lou". Hasta que un día, él encue...