Verónica 7 veces

13. Desaparecer

Desaparecer. Es lo único en lo que pienso.

Mi madre muerta y yo a un lado con manchas de sangre por todo mi cuerpo. y lo peor, murió por mi culpa. ¿Hay manera de sentirme peor? creo que no, o si, esa Verónica cada vez me hace sentir peor.

-A ti, te tuve piedad- Una voz de una chica hace que me sobresalte. Era ella. Sin duda era ella.

-¿Que?... Que ridícula eres- le escupo esas palabras llenas de rabia.

-Solo te hice un favor- me dice. No puedo verla, pero se que está en frente de mi.

-¿Favor? mejor lárgate antes de que...- le digo llena de furia, pero me interrumpe.

-¿Antes de que?- dice soltando una muy sonora carcajada que hace que me lleve las manos a mis oídos -¿Que vas a poderme hacer tu a mi?, eres debil, fragil y chillona... ¿Porque te tendría miedo?-

Ella tiene razón, solo me humillé al "amenazarla"

-¿A que te refieres cuando dices que me tuviste piedad?- me atrevo a preguntar.

-Sigues con vida-

-¿A que te refieres?- pregunto algo cunfundida.

-Cuando alguien me invoca, normalmente lo mato. Son raros los momentos en los que no los mato, como a mi primera víctima- suspira -La recuerdo taan bien- dice y siento como me quedo en un silencio aterrador.

De repente, escucho la puerta, como si la quisieran abrir. Inmediatamente me levanto del piso. El pánico me anraza con fuerza. Mi madre muerta en el piso, yo con manchas de sangre y mis huellas de ADN en ella. Creerán que fuí yo, y si les duento la verdad me encerrarán en un hospital psiquiátrico. ¿Dios que hago?. Me quedo helada sin poder moverme, no puedo pensar y cada vez siento mas fuerte un nudo en mi garganta.

"Alcohol". pienso.

Volteo mi mirada hacia donde se dirije el baño.

Rápidamente corro hacia el. Con manos sudadas y temblorosas, habro la pequeña puerta que se encuentra en el espejo buscando el pequeño botiquín de primeros auxilios.                                                Agarro el alcohol, corro hasta donde esta el cuerpo sin vida de mi madre y se lo hecho todo, hasta la última gota. Corro hasta donde están las bolsas de plástico, me las pongo en las manos y vuelvo hasta mi mamá. Con las bolsas en mis manos, cubro todo su cuerpo con el alcohol mojándola de pies a cabeza. Me levando nuevamente hasta donde se encuentran las bolsas. Agarro otras dos y me las pongo en los zapatos. Agarro todas las demás de repuesto.

Corro hasta las escaleras subiendo hacia mi habitación. Al entrar cierro la puerta con seguro y me recargo en ella. Lloro desconsoladamente dejándome caer al piso lentamente.

Estoy arruinada. Me buscarán hasta por debajo de las piedras, si me encuentran pedirán explicaciones, y yo se las daría sin problema, pero me encerrarían en un hospital psiquiátrico.

El sonido de la puerta cerrarse me hace reaccionar.

Me quedo quieta de repente conteniendo el aire. Como si el más pequeño movimiento pudiera delatarme. Escucho los pasos de mi padre recorrer el piso de abajo, hasta que un silencio muy ruidoso se hace presente.

"Ya la vió". Pienso quedándome aún mas quieta.

Me levanto lentamente dirigiéndome hacia mi cama, donde se encuentra mi mochila de la escuela. Saco todos los libros con cuidado dejándolos debajo de mi cama. Ya con la mochila vacía, me dirijo hasta mi armario. Lo habro lentamente y empiezo a sacar ropa: Blusas, Pantalones, ropa interior y Shorts.

Meto la ropa hecha bola a mi mochila. Cuando la sierro escucho pasos apresurados subiendo las escaleras acompañados de sollozos.

Ahí es cuando entro aún más en pánico y empiezo a tener dificultad para respirar, dando inalaciones muy profundas.

-¡Ally!- escucho ami padre llamarme.

Ahora ya no me importa hacer ruido. Veo que intenta abrir la puerta. Yo entro aún más en pánico y sin importarme el escádalo que haga, llevo mi tocador hacia la puerta para que tarde más en abrir.

Me empiezo a quitar la ropa a tiempo record llena de sangre rápidamente y me poco una blusa floja acompañada con un pantalón ajustado a mi talla. Me quito las bolsas de las manos, después la de los pies y al final los tenis. Me pongo otros tenis limpios muy rápido.

-¡Ally abre la puerta!- Ruge mi padre con furia, pero también escucho sollozos de su parte.

Yo muriéndome de miedo empiezo a llorar con fuerza preparándome para escapar y uir lo más lejos posible. Cuando ya estoy en frente de la ventana, mi padre grita otra vez.

-¡Ally se que estás ahí!- Grita y segundos después, empieza a golpear la puerta con mucha fuerza para derrumbarla.

Yo pego un grito de pánico. Ya subí un pié cuando veo un encendedor en el piso tirado y a un lado había gasolina.

oooh, ya recuerdo, hace mucho se descompuso el carro de Drey y yo me robé su gasolina. Y el encendedor son de cuando me pongo a fumar. Miro esos objedos por unos segundos y corro hasta ellos.

Hecho gasolina por toda mi habitación. En mi cama, en el piso, armario, tocador, etc.

-¡Papá, sal de aquí!- grito encendiendo un cigarro.

-¡Abre la puerta Ally!-

-Papá- digo casi en un susurro -¡DEBES DE SABER QUE NO FUI YO!- esta vez si grito a todo pulmón.

Dicho esto me cuelgo de la ventana y abiento el cigarro. En cuanto hago eso, me dejo caer dándome un doloroso golpe en la espalda y observando que en menos de cunco segundos, mi habitación se prende en llamas, rezando para que mi padre salga lo antes posible.

Aún con lágrimas en los ojos, me levanto del piso, para sacar bolsas de plástico de mi mochila y colocándomelas en los zapatos.

Ahora es momento de hacer una nueva vida. Sola.

....

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Bueno eso es todo Bye Bye.

Pd: Soy una persona.

Pd2: Me caes bien.