Desperté con emoción, ilusión e incertidumbre sobre mí misma. Apenas abrí los ojos una sola frase ha dado vueltas en mi cabeza "Hoy empiezas a construir tu futuro". Con ella se pasean muchas cosas, una universidad, Abraham, ballet, fotografía, me gustaría estudiar fotografía, o cocina, o ser atleta, o una artista, o una actriz, o presentadora de televisión, mejor una reportera. Tantas ideas estaban dando vueltas en mi cabeza que no había notado que ya son las 9:24 y lo único que he hecho es divagar en mi mente imaginando las miles de profesiones que me gustaría ejercer.
Tal vez si busco universidades, me decidiría por una. ¿Pero de verdad quiero estudiar en una universidad? ¿Y si mejor tan solo empiezo a trabajar? No se si sea buena idea. Llamaré a Valentina, ella me conoce, sabrá aconsejarme.
Cuando tomo el teléfono ella me está llamando:
-Muy bien, si yo no te llamo no se nada de ti. ¿Estás en tu casa?
-¿Dónde más podría estar?
-Tienes razón, voy en camino.
No les mentiré, conozco a Valentina y se que no llegará antes de 40 minutos, así que tomo ese tiempo para bañarme, desayunar y tirar en la papelera el montón de papeles arrugados que lancé por la habitación.
-Si no es así no te veo
Dice Valentina y me abraza.
-No seas tan mala, no soy tan asocial.
-Siempre inventas excusas, Naty
-No empieces, estaba a punto de llamarte, necesito que me ayudes
Valentina se sienta en esa incómoda silla violeta, me señala la cama y me indica que le cuente.
-Bien, no se que hacer con mi vida.
-Por favor Naty, no empieces. Has pasado tu vida entera planeando absolutamente todo, eres una obsesiva.
-Valentina, así soy, necesito saber que va a pasar, que es lo que estoy haciendo, a donde me lleva eso, y justo en este momento no estoy haciendo nada, esto no me está llevando a ningún lado, siento que solo estoy perdiendo tiempo valioso.
-Muy bien, tienes razón. No es que yo sea una orientadora, pero una vez leí una frase que podría ayudarte: Si no necesitaras ganar dinero, ¿qué harías?
Suspiro y veo al suelo. Miles de cosas pasan por mi mente.
-No lo sé. De verdad no lo se. Quisiera ser ingeniera químico, pero luego pienso que es un trabajo muy matemático para mi. Luego quiero ser bailarina, fotógrafa, pero no quisiera bailar y tomar fotos el resto de mi vida.
-Es que, es ahí donde está el problema Naty. Crees que esta decisión cambiará tu vida y que será así el resto de tu vida, que jamás lo podrás cambiar. ¿Quién te dice que no puedes cambiar de profesión cada 10 años, cada 8 años?
-Tienes razón.
Me quedo pensando en el silencio que se ha creado, Valentina tiene razón, podría empezar a hacer algo y luego cambiarlo, luego dedicarme a otra cosa, nadie tiene el poder de detenerme.
-Entonces, ¿Qué es lo primero que quieres hacer, Naty?
-Fotografía- respondí decidida y sorprendida de mi misma.
-Bien, investiguemos.
Encendió mi computadora y googleó cursos de fotografía. Luego de un buen rato buscando nos decidimos por uno, guardamos la url y pasamos la mañana hablando de tonterías. Hasta que tocó el tema en el que no quería pensar:
-¿Y Abraham?
-¿Es en serio? ¿Vas a preguntarme por él?
-Sí, no me has dicho nada más y es obvio que se gustan.
-No es obvio, y no lo sé, decidimos no hablarnos más. Parece que va a regresar con su ex.
-Me estás jodiendo Naty, me estás jodiendo.
-Claro que no, la última vez que hablé con él puse distancia entre los dos por eso mismo.
No quise decirle que habíamos pautado una cita en 3 meses, seguro armará un escándalo y me conseguirá un vestido de novia para esa fecha.
-Nathalia, esa niña está embarazada.
-No es cierto- me desmoroné, ¿será de él?- ¿Cuánto tiempo tiene?
-Apenas unas semanas, no se sabe de quien es, ella solo ha dicho que está embarazada.
-Demonios.
-O sea, que te importa Naty.
-Cállate, estoy intentando entender lo que me acabas de decir.
-¿Que probablemente será papá? Sí, pero la verdad es que yo no me imaginaba que fuera de Abraham, ella ha estado con varios chicos desde que Abraham y ella terminaron. Cuando me dijiste que pensaban volver fue cuando lo sospeché.
Muy bien, no te preocupes Naty, a la final esto es solo un problema menos, algo en lo que no debes pensar más. El día antes de la cita llamaré a Abraham y lo felicitaré por su hijo, así entenderá que no iré.
-Muy bien Naty, casi son las 14:00, debo irme. Si me entero de algo te escribo.
-Bien, no te preocupes, está abierto.
-Vale, bye.
Después del beso y el abrazo respectivo, me dirijo a la computadora y decido bloquear a Abraham de mi mente, hay muchas cosas en las que necesito pensar más importantes que él y su futuro hijo.
Busco grupos de fotografía, blogs, fotógrafos famosos, cámaras, todo lo que pueda informarme en el ámbito.
Al llegar mi mamá, bajé a la cocina y le dije que decidí estudiar fotografía. Me apoyó, aunque no la vi decidida, como toda madre, creo que hubiese preferido que estudiase derecho, arquitectura, algo así, pero ella también me conoce y sabe que eso no es lo mío
-¿Y dónde piensas estudiar Naty?
-Ese es el pequeño detalle mamá, el mejor instituto del país y el único que va a darme el título que quiero está en la ciudad, y sabes que queda muy lejos de aquí.
Vivimos en un pequeño pueblo, que aunque no es tan pequeño, todo aquel que quiera una carrera universitaria debe viajar 2 horas diarias para llegar.
-Bien, mi día libre del trabajo lo vamos a tomar para ir hasta el instituto y averiguar los precios y los horarios, ¿te parece?
-Genial mamá, gracias, te amo.
Le di un fuerte abrazo, de esos que se han vueltos constantes desde que Robert no está.
-No vayas a olvidar todos tus papeles, si me parece bien, puedes inscribirte de una vez.
-Mamá eres la mejor, en serio. Arreglaré mi carpeta antes del lunes. En serio, gracias.
Subí bailando a mi habitación, por fin siento que me estoy acercando a algo, a un futuro, a esa Nathalia que puedo ser en 5 años.
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Mil amores menos uno
Teen FictionMil amores menos uno, cuenta la historia de una mujer y todos los amores que ha tenido que vivir para encontrar al amor de su vida. ¿O eso es lo que ella cree?