The nerd is mine |c.d|

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— ¿Enserio Cameron? ¿Lo harás por ella?— Le preguntó Matthew

— Si Matt, además odio los lentes— Le respondió el castaño rodando los ojos.

— Te está cambiando y demasiado rápido— Le respondió tristemente Aaron.

— Nadie me está cambiando Carpenter— Respondió frustrado Cameron.

— Claro que si Cameron, es más que obvio, todos lo han notado incluso los profesores— Lo miró colerico Matt

— Ustedes no tienen derecho a decirme si me han cambiado o no ¿qué a ustedes no los cambiaron? ¿acaso yo les dije algo?— Los chicos guardaron silencio— Roxana te cambió a ti Carpenter y a ti Espinosa lo hizo Daksha, ¿y saben por qué no les dije nada? ¡Porque estaba feliz por ustedes! ¡Porque me alegró que mis amigos hayan encontrado a alguien! ¿por qué ustedes no pueden hacer lo mismo por mi?— Les preguntó con un deje de rabia en su voz.

No espero respuesta por parte de sus amigos y siguió su trayecto hasta la óptica, rápidamente encontró al oculista y le explicó, le hicieron el examen, le tendrían listos sus nuevos lentes en unas tres horas, asintió y salió a buscar algo que hacer.

Pasadas las tres horas regresó a la tienda, le entregaron sus nuevos anteojos y no dudo en ponérselos ahí mismo, se miro al espejo y de su boca sólo salió un débil wow pues no era el Cameron de siempre, lucía distinto, por primera vez comenzaba a sentirse bien consigo mismo.

Valentine te tengo una sorpresa, estoy en tu casa en 10

Fue lo que le texteo a la chica antes de salir rumbo a su casa.

— Mierda, Cameron viene, tienes que irte Shawn— Fue lo primero que dijo la chica al poder safarse de los feroces besos que el chico le brindaba.

— Que venga, no me importa si nos ve juntos— Le respondió Shawn

— No, Shawn vete— Escuchó un bufido por parte del chico

— Bien, te veo luego preciosa— Sin esperar respuesta por parte de la chica salió de la casa, pensando en que Cameron Dallas se las pagaría caro.

La puerta sonó, indicando que el chico había llegado, se hizo un moño despeinado y fue a abrirle, encontrándose con un ramo de margaritas frente a ella.

— Hola Cam, están muy bonitas— Dijo tomando el ramo entre sus manos, sin fijarse en el cambio del chico.

— Pero no más que tu Val— La chica se sonrojo al instante, sin saber que le pasaba, hace mucho que no lo hacía, volteó a verlo y se quedó boquiabierta

— ¿Qué le paso a tus lentes Cameron?— Le preguntó con el ceño fruncido

— ¿No te gusta?— Le preguntó triste el castaño

— Por supesto que me gusta es sólo que...— No supo como terminar la frase, aquel cambio del chico la hizo sentir peor, el estaba cambiando por ella y debía admitir, el chico era demasiado guapo y el, merecía a alguien mejor, el merecía a alguien que lo amase.

— ¿Qué pasa Val?— La miró extrañado, la chica no respondió y sólo le dio un beso, que para el sentir del chico ha sido el más tierno que alguna vez la chica le ha dado.

— Te quiero Cam— Lo abrazó intentando no llorar frente al chico.

— Te quiero más Val— La abrazó más fuerte, intentando demostrarle que no quería perderla y nuevamente la chica se sintió peor.