Al siguiente día era domingo. Era otro día como cualquiera. Pero luego me topé con la carta número cinco. La más preciada. Para mi. Y seguramente pare él también, aunque no se que es lo que piensa.
Sonreí y me levanté de la cama con la carta en mi mano. Avancé hasta el escritorio donde coloqué la carta con su sobre correspondiente.
Me cambié un poco apresurada y salí de la habitación. Recordé que siempre mi madre me deja el desayuno cuando se va a trabajar. Hasta que llega en la noche para la cena. Pero sólo me dirigí a la cocina para comer y luego...
Tal vez sólo esperar las otras cartas del chico Encantador.
Para volver a soñar con ellas.
- Tin - Suena el timbre de la casa.
¿Quien será? Seguro son las cartas del chico Encantador....

ESTÁS LEYENDO
Tus Ojos Encantadores
RomantizmTe vi por la mañana mientras Salias de tu casa. Estabas muy bonita, en serio, esos aretes que cargabas combinaban con tu ropa totalmente. Cargabas algunos cuadernos y los llevabas en tu pecho muy fuerte, y caminabas muy rápido ya que estabas llegand...