Capitulo 19. "Cloaked In Silence".

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Quiet's P.O.V (Corto)

Carta de Quiet.

Yo no elegí el camino que transito en estos momentos. No elegí mutar hasta el punto de ser el fenómeno que soy, no elegí nada. Seguro te preguntarás: ¿Por qué tienes esos poderes? ¿Por qué te autodenominas "fenómeno? ¿Al decir que no lo elegiste quieres decir que odias el camino que transitas? Todas las respuestas te las daré en este trozo de papel. Seguramente nadie lo lea, como también puede ser que alguien olvide que está sobreviviendo para ponerse a leer esto.

Todo comenzó cuando decidí entrar a esa fábrica de gasolina, con mi compañero para buscar gasolina, obviamente, ya que nos habíamos quedado sin gasolina para el único coche que teníamos. Al entrar todo estaba tranquilo, con unas simples miradas decidimos que yo iría primero, no habíamos visto ningún podrido, por ende pudimos hacer nuestro trabajo sin ningún tipo de interferencia ni contratiempo. Estábamos a punto de salir, pero sorpresa, el contratiempo que no se nos presentó antes, ahora estaba aquí. Eran bastantes muertos, supongo que más de 30 aunque ahora puedo con esa cantidad sin siquiera cansarme, antes no. Es más, no solía matar muchos dado que mi puntería era mala y cada vez que lo hacía, mataba por suerte o simplemente por que usaba un cuchillo de cocina viejo. Al percatarnos que teníamos a los muertos cerca –MUY cerca.- nos dimos la vuelta y comenzamos a correr, hasta quedar acorralados. Matamos a casi todos, pero un grito de dolor me alertó. Habían mordido a Josh, las lágrimas comenzaron a salir de mis ojos y sorpresa, sentí un dolor profundo en mi brazo, un dolor profundo y punzante que me hizo gritar. Me habían mordido. Comencé a llorar disparando a todos lados y de repente, una llama abrumadora envuelve mi cuerpo, había disparado a un galón de gasolina y había hecho reacción a la chisma, provocando fuego, sumado al gas combustible que había en el aire, provocaron que todo se vea envuelto en llamas, incluyéndome. Luego del terrible dolor, sintiendo mi cuerpo cocerse y escuchando los gritos de mi compañero, salté por la ventana, y caí en el césped, que no tardó en prenderse fuego también, sabía que faltaría pronto para mi fin, aunque me equivoqué. Todo se volvió negro para mí, sentí como mi cuerpo se retorcía, recordé todo lo que pasó en mi vida, creo que estuve dos o tres días durmiendo. En algún momento, logré ver luz, pero me quedé quieta, sabía lo que sucedía si iba a la luz, entonces algo pasó, abrí los ojos. Me sentía extraña, intenté exclamar algo, pero simplemente la voz no salió. Tampoco podía respirar, es decir el aire no entraba por mi boca, solamente sentía que mi cuerpo respiraba de por sí solo, estaba completamente desnuda dado que la ropa que traía había sido calcinada, pero mi cuerpo estaba intacto, como si nunca hubiese pasado nada. Me levanté y sentí que mi cuerpo no pesaba nada, comencé a caminar y a caminar. Hasta que llegué a algún lugar donde dios dejó algo para mí. Era un rifle, un hermoso rifle que tenía grabada una mariposa en donde se lo apoya en el hombro, debajo de ella, había escrito: "Mariposa malévola" Esta traía balas –bastantes- junto con un cinturón que traía breteles que pasaban por mis hombros, me lo puse y logré darme cuenta que calzaba bien en el cinturón, tomé la mayoría de los cargadores del rifle y los puse en algunos huecos que supuse yo eran para cargadores en el cinturón. También había algunos que no podía meter porque el cinturón estaba lleno y también había balas sueltas, así que me até la bolsa al cinturón con las balas y los tres cargadores dentro, continué caminando y llegué a una casa, donde conseguí ropa, aunque no podía ponérmela porque sentía que me asfixiaba, pero al momento de ponerme un bikini –que me lo puse solo porque no perdía nada probándolo- No sentí nada malo, también me puse su parte inferior, encontré unos leggins de red, también me los puse y no sentí nada malo, luego unos guantes, uno de ellos llega hasta el codo así que me lo puse en el izquierdo mientras que en el derecho me puse el guante normal, ahora estaba vestida como visto actualmente.

La razón por la cual tengo esos poderes, la estuve investigando. Supuestamente mi cuerpo es inmune, porque ya me mordieron otra vez además de la primera, pero la segunda no tuvo ningún efecto. Al parecer mis poderes aparecieron dado el daño crítico que recibió mi cuerpo, las quemaduras, todo. Mi cuerpo mutó junto al virus, en el momento en el que caí, una hoja había entrado a mis pulmones, gracias a ella y al virus, mi cuerpo mutó. Ahora sé que mi cuerpo funciona como una planta, me alimento con el sol, tomo agua a través de la piel, etc. Lo que sucedió realmente es que al tener un fragmento de planta dentro mío y el virus mutando en mi cerebro... Mi cuerpo tomó el ADN celular de la pequeña hoja en mis pulmones y los multiplicó por todo mi cuerpo, haciendo que mis células que habían sido regeneradas por el virus, también tengan algunas cualidades como la célula vegetal, como por ejemplo el pigmento verde, también conocidos por cloroplastos, aunque sacando un poco de sangre –apenas tengo- logré ver que mis células son parecidas a las vegetales, solo que sin la pared celular, eso hace que tenga movimiento, también no soy verde dado que mis otras células que fueron creadas a partir de ADN humano impiden la mutación de color, aunque no me sorprendería amanecer verde. Al ser una planta no puedo estar cerca de varias sustancias, como por ejemplo el cloro, o la sal. Eso hace que mi cuerpo se irrite y muy rápido, provocando quemaduras en mi piel.

Luego de encontrar mi ropa, descubrí mis poderes, un algún momento pensé en lo lindo que sería ser invisible y así pasó, en ese momento estaba frente al espejo de la casa en la que encontré la ropa y luego de pensar acerca de la invisibilidad, no logré verme el reflejo. Luego también descubrí que mi velocidad aumentó considerablemente y que ahora ya no pesaba tanto y nunca más pude decir nada, ni una sola palabra.

Soy un fenómeno, aunque me siento bien cuando ayudo a la gente, si encuentras esto, quiero que recuerdes de mí, que sepas que si algún día me cruzo en tu camino, no estaré mucho en él, pero si estás en problemas te ayudaré.

Yo soy Quiet, yo soy la ausencia de palabras.

*Fin de la carta*

Dejé la carta frente a una reja, en la cual había unos muros, ahí se había ido el muchachito de sombrero de sheriff junto a la otra niña, escapando de una gran horda. Supongo que debería de ayudarlos, digo, siempre ayudo a los que veo. Todavía era de noche y siento que toda la gente estaba reunida en un mismo punto dentro de los muros. Le resté importancia y me di media vuelta, iría a buscar a los demás del grupo. Comencé a correr, mi cuerpo se había hecho invisible, tomaba grandes impulsos provocando estruendos mientras la tierra se levantaba dos o tres metros por el aire para luego caer de nuevo. Pasaba con gran velocidad por el bosque, hasta que me di cuenta que ya estaba bastante lejos, y que había una horda delante de mí. Tomé mi cuchillo y corrí nuevamente en dirección a la horda, me hice invisible y tomé impulsos, mientras cortaba cabezas a una velocidad indescriptible. Ya había pasado entre ellos, todavía habían muchos muertos que seguían caminando, pero continué mi camino.


Regresando de la muerte // Carl Grimes.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora