Título: Te quiero
Partes: 1(?)Seco mis manos con el trapo mientras me muerdo el labio, nerviosa.
Hoy es el día en el que le voy a confesar mi amor eterno a mi mejor amigo.
Solo de pensarlo me pongo enferma.
Saco la bandeja del horno y la coloco en la mesa.
Oigo unos pasos y rápidamente, cubro las galletas con un trapo, pensando que es Steve.
Sin embargo, resulta ser Nat, por lo que destapo las galletas y saco un plato para colocarlas.
- Hey, T/N. ¿Qué haces? -pregunta sentándose.
- Galletas. Son para Steve. Son sus favoritas -murmuro evitando su mirada.
Nat eleva una ceja.
- Alguien no me quiere contar algo...
Yo suspiro y confieso:
- Voy a decirle a Steve que estoy enamorada de él.
Nat sonríe y dice:
- ¡Lo sabía! Te lo dije, Clint -dice para sí misma.- Enhorabuena. Al fin te atreves.
Yo intento sonreír y murmuro:
- Sí.
Nat coge una galleta y dice:
- Oye, T/N, no estés nerviosa, ¿vale? Estoy casi segura de que Steve siente lo mismo.
Yo asiento, más tranquila, y continúo colocando galletas.
- Así que...¿llevas mucho tiempo colada por él?
Yo, sonrojada, asiento y digo:
- Casi desde que le conocí. Al principio parecía un poco serio, pero luego resultó ser bastante gracioso. Y atento. Nunca había conocido a alguien así, ¿sabes? Nunca había sentido esa sensación de conocer a alguien tanto como para saber lo que está pensando solo con la mirada. Oh, sus ojos azules. Joder. Y sus labios. Mejor no hablemos de eso, que me da un algo. Pero, Nat, ¿has visto su pelo? Ugh, lo lleva siempre tan perfecto y...
Paro de hablar cuando Nat ríe.
- Perdona, lo siento. Continúa -dice cuando puede respirar.
- Bueno, el caso es que cuando estoy con él no me encuentro nerviosa, sino todo lo contrario. ¿Es algo malo? -pregunto.
Nat se encoje de hombros y dice:
- No estoy segura, aunque creo que, cuando encuentras a la persona indicada, sientes tanta confianza que simplemente estás tranquila y en paz.
Yo sonrío.
- Eso espero. Es que...creo que estoy más que enamorada. Dios, le quiero tanto...-susurro.
Nat sonríe con ternura.
- Ataca antes de que se enfríen las galletas. Creo que está en su habitación -dice dándome un leve codazo.
Yo asiento y cojo el plato.
- Allá voy.
- Suerte, T/N.
Yo asiento y salgo de la cocina, dirigiéndome a la habitación de Steve.
Mientras, en mi cabeza, repaso el discurso.
Steve, tengo que decirte algo. Desde que te conocí, supe que eras alguien especial. Eres atento, caballeroso e increíblemente amable. Te ofreciste a ser mi amigo, y fue lo mejor que me ha pasado nunca. A lo que pretendo llegar es que Steve, estoy enamorada de ti y te qui...
Paro de caminar y de pensar al oír unos ruidos en el pasillo de al lado.
Ando despacio y me asomo en la esquina.
Qué mala decisión.
Ahí está mi mejor amigo, mi compañero del alma y (por muy cursi que suene) el dueño de mi corazón.
Por desgracia, no está solo. Sharon, la nieta de su antiguo amor, la agente más fuerte y valiente, le acompaña.
Y ambos están muy cerca. Steve tiene sus manos en la cintura de ella, y besa sus labios con pasión.
Y yo, lo único que puedo hacer, es quedarme paralizada. Mi cuerpo está tieso, y mi mente en blanco.
Parece que ellos no me han visto. Claro, están demasiado ocupados.
De pronto, se separan y juntan sus frentes.
Y casi antes de que pronuncie esas dos palabras, mi corazón se rompe.
- Te quiero, Sharon -murmura Steve.
Noto mi corazón hacerse pedazos. Duele tanto que el dolor parece físico. Y lo único que puedo hacer es soltar un gemido.
Ambos se separan y se giran, y creo que me miran, aunque no puedo saberlo con exactitud, pues mis ojos están borrosos por las lágrimas.
Antes de que alguien diga algo, suelto el plato de galletas, las galletas favoritas de Steve, de nueces y chocolate, que tanto me había esforzado en hacerlas, y salgo corriendo.
El dolor de mi pecho se extiende por todo mi cuerpo y noto cómo lás lágrimas caen por mis mejillas rápidamente.
Mi mente no reacciona, lo único que hace es reproducir el beso una y otra vez.
Abro la primera puerta que veo y entro en la sala, que resulta ser un diminuto armario de limpieza. Cierro la puerta con pestillo y me siento en el suelo, tapando mi boca con las manos para evitar que se oigan mis sollozos.
Escucho unos pasos acercándose y su voz, la voz más bonita que he oído nunca, y la que va a ser dueña de mis pesadillas, habla:
- ¿T/N? ¿Dónde estás? ¿T/N, estás bien?
No, Steve, no estoy bien. ¿Quieres saber por qué? Porque tú, el que quiere evitar hacer daño y proteger a la gente, has roto mi corazón.
Supongo que nadie puede protegerte del amor.
...
Ouch.
STEVE YO TE AMO IGUAL.
Tenía que hacer uno triste con Steve.
SPOILER SPOILER SPOILER
Además, así me sentí yo cuando besó a Sharon en civil war.
Rompiste mi corazón, Steve.Y lo has hecho de nuevo hoy, maldito. He ido a verla por segunda vez y oh dios, es demasiado. Es la mejor película del universo.
Aunque, extrañamente, hoy no he odiado tanto a Sharon. No sé, ha sido raro. Me encantaría no odiarla. Creo que estoy dejando de hacerlo, aunque me sigue cayendo fatal. Tal vez es que simplemente ese odio enfermo ha pasado a odio normal😂😂Ahora en serio, espero que os haya gustado y comentad si queréis más tristes (o si los preferís felices) y si queréis segunda parte, o algo.

ESTÁS LEYENDO
MARVEL //one-shots
FanfictionOne-shots o imaginas de los personajes del Universo Cinematográfico de Marvel y sus actores.