021 || Steve Rogers

13.2K 756 145
                                        

Título: Tú
Partes: 1

Sonrío al oír un chiste en la serie que estoy viendo. Me encuentro en mi casa, en mi salón, expecíficamente.

Steve amaría esta serie. Al pensar en él, la tristeza que he estado sintiendo continuamente me invade, y una lágrima solitaria cae por mi mejilla.

Hace 30 días, 17 horas, 49 minutos y 35, no, 36 segundos mi mejor amigo desapareció en combate. En verdad, ni siquiera era un combate. Solo tenía que recoger información.

Pero eso a HYDRA no parece importarle. Le hicieron desaparecer, dejándome sola y más triste que nunca.

Desde que le conocí (más o menos cinco años) ha sido mi mejor amigo. Por supuesto, siento algo por él. Es decir, es...perfecto. Pero no le dije nada. Pensé en confesarlo justo antes de que se marchase a la misión, pero descarté la idea de inmediato.

Varios toques en mi puerta hacen que me libre de mis pensamientos y me levanto.

Abro la puerta.

Y noto mi corazón dar un vuelco.

Ahí está Steve, sonriendo levemente, con su uniforme prácticamente destrozado, su cara sucia y con rasguños, con un corte sangrante encima de su ceja izquierda, y su pelo rubio manchado de barro.

- Hey -susurra.

Salto a sus brazos de inmediato y le abrazo con fuerza, apretándome contra él. Sus brazos me abrazan de vuelta e inevitablemente, comienzo a llorar.

Me separo para agarrarle el rostro con mis manos, comprobando que es real. Beso sus mejillas, y después su frente. Le abrazo de nuevo, aspirando lo que queda de su característico olor.

- Steve...-murmuro.

Mis lágrimas caen en su cuello y él dice:

- Shh, no llores. Estoy aquí.

- Pensé que...pensé que no te volvería a ver -sollozo.

- Lo sé. Pero estoy contigo ahora -murmura.

Una vez que estoy más calmada, me separo y él pasa.

- ¿Tienes muchas heridas? -pregunto cerrando la puerta.

- Solo las de la cara y algunas en el abdomen -responde sentándose con un gruñido.

Yo asiento, abrazándole por última vez, y me marcho a por el kit de medicinas.

Cuando vuelvo, Steve ya está sin camiseta. Está viendo la serie, y veo que sonríe.

Yo sonrío ampliamente al verle.

Me acerco y él se tumba.

- Te he echado de menos -murmuro mientras limpio un corte en su abdomen.

- Yo también. Pero para algo sirve esto, ¿no? -dice. Saca algo de un bolsillo. Es una brújula. Su brújula, la que utilizó en la Segunda Guerra Mundial. En la que había una foto de Peggy.

La abre y muestra una foto mía. Él mismo me hizo la fotografía.

Steve me mira y más lágrimas salen de mis ojos.

- No llores, por favor -susurra.

Yo asiento, sonriendo, y me limpio las lágrimas.

Su bien marcado abdomen ya está curado. Solo queda su rostro.

- ¿Qué pasó exactamente? -pregunto mientras poco agua oxigenada en el corte.

Steve bufa y responde:

MARVEL //one-shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora