¡Alerta Roja!

capítulo 1

Todos estos años que he vivido con mi madre, jamás pensé que ella me mandará a una correccional para menores. Me hubiera quedado con mi padre, de seguro estaría en su apartamento viendo televisión.
¡Pero adivinen! Ahora voy en camino a la correccional por mi "mal comportamiento" cuando en realidad soy todo un angelito...

Bien exagero.

No soy el mismísimo ángel, pero tampoco soy el diablo en persona. Hay que poner límites. Soy...un poco de cada cosa.

Mitad ángel, mitad demonio...Soy una chica solamente.

Bien, una de las razones por la cual voy a la correccional es por mi cabello, es rojo. No, pelirrojo no. Es rojo, rojo cereza, mis ojos son negros, tan negros que no se ven las niñas de mis ojos.

Otra razón es que tengo tatuajes en mis piernas, hombros, brazos y cabeza. Si. En la cabeza, me rape y me hice un dragón.

Hemos llegado a la Correccional, ¡que alegría! ¡Que emocionada estoy! ¡Yupi!

Las varillas que tienen como portón miden como mínimo unos 4 metros de alto. Fuera de las varillas hay una casilla donde hay un Guardia de seguridad, este presiona un botón para que el portón se abra. Mis "padres" conducen y detrás de ellos el portón se cierra. Hay guardias por doquier, no pasan ni 2 metros y hay otro Guardia. El auto se detiene enfrente de lo que creo que son dormitorios, se bajan y ordenan que baje mis cosas lo cual hago, no quiero que toquen mi mochila. Entramos a los "dormitorios" y hay un escritorio con otro Guardia, este ve a mis padres y les dirige una sonrisa, voltea a verme a mi y me hace una mueca. ¿Tan fea estoy? Le da una llave a mi madre y esta me la da a mi, la llave dice:234.

-De aquel lado podrás ir a tu habitación está en el cuarto piso te tocará compartir con...bueno, te tocará compartir - me dice el guardia apuntando a una puerta.

Yo sólo tomó mis cosas me despido con la cabeza y voy directo a la puerta. Cuando la abro me doy cuenta que hay escaleras y no un elevador, ese maldito...

Deberían de poner un elevador.

~~~~

Repito...deberían poner un elevador. He llegado al cuarto piso,¡Aleluya! Sólo falta encontrar la habitación 234.

Mierda, sólo hay números impares, ¿ahora que hago? Ese bastardo que tienen como guardia me engaño, juro que lo castro.

Seguí caminando por todo el pasillo hasta que me encontré con los números pares...

¡Que idiota soy!

Perdóname guardia, pensé que me traicionaste.

Busque mi habitación y la encontré. Pegue mi oreja a la puerta para ver si se escuchaba ruido alguno, pero no. Todos deben de estar dormidos.

¡Que inteligente!

¿Quien eres?

¿Tan rápido te Olvidaste de mi? *Se pone una mano en el pecho y finge dolor*

Sólo hay una persona que hace eso...¡Houston! ¿Eres tu?

Obvio

¡No puede ser! ¡Moriré moriré!

Que dramática

Bah

No se asusten, no me drogo ni nada así soy.

Introduje la llave en el picaporte y entre, todo estaba obscuro ni un sólo rayo de luz.

Entre como si nada y tropecé con algo provocando que callera al sensual piso.

-Arriba las manos, estoy armado - dijo la voz de un chico. Las luces se prendieron provocando que me quedará ciega.

-Mierda, mierda, ¡apaga esa luz gilipollas! Me has dejado ciega - gritaba mientras que rodaba en el piso con mis manos en mis ojos.

Las luces se apagaron de nuevo.

Unas manos se posaron en mi cintura, me cargaron y me dejaron caer sobre un sillón.

Mis ojos se acostumbraron a la oscuridad y logre ver una gran sombra enfrente de mi. ¡Maldición me quieren violar! La sombra trató de poner una mano en mi boca, pero antes de que pudiera lograrlo me moví de lugar, tome a la sombra por la cadera y me trepe como un Chango en su espalda, patee la parte de atrás de su rodilla y este calló hincado enfrente del sillón, tome lo primero que vi y se lo metí a la boca me quite mi sudadera para poder usarla como cuerda me levante y busque el interruptor, encendí la luz y me encontré con un chico con cabello Castaño.

Me acerqué a él y lo tome por el cabello.

-¿Que era lo que querías hacerme?-pregunté mientras miraba lo que puse en su boca. ¡Que ascó! Le puse un boxer

-Asdfghjklñ- dijo el chico.

-¿Que? -pregunte confundida.

Me fulminó con la mirada y ahí comprendí todo. Le quite el boxer.

-¡No quería hacer nada, pensé que venías a robar o algo así! -dijo mientras volteaba a mirarme.

¡Pero que ojos! Son como grises o azules.

-¡Claro! ¡Vengo a robar a una Correccional! ¡Que lógico! -dije con ironía.

-Deja el sarcasmo, desata me y larga te de mi habitación - dijo tratando de desatarse.

-Soy tu nueva compañera, cariño. Me tendrás que soportar - dije mientras lo desataba y dejaba su cabello.

No entiendo como un hombre puede tener mejor cabello que yo

-Te sabes defender...me caes bien. Soy Axel- dijo mientras que me extendía su mano.

-...dime Forest - dije estrechando su mano.

-Un gusto Forest. ¿Y porque mandaron a una chica a este lugar? Son pocas las veces que mandan a una - se sentó en el sillón y alzó una ceja.

-Tú dímelo. Me mandaron por mi cabello, piernas, brazos, hombros, comportamiento, personalidad...¿sigo? -dije ingenua.

-Así está bien. Yo iré a dormir... por cierto - tomo su barbilla y la acarició. En un movimiento rápido me tenia hincada frente al sillón - no te metas conmigo me susurró en el oído.

-Que extraño...yo pensaba decirte lo mismo - en un movimiento rápido tire a Axel al piso y detuve sus manos en su espalda para inmovilizar lo.

-Rojita. No te metas con un White- dijo para tenerme bajo el con mis manos encima de mi cabeza -¿entendido?

Negué con la cabeza

-No, no entendí y al parecer tu tampoco. Te lo diré lentamente
NO-TE-METAS-CON-UNA-BLACK -  gruñi cada palabra para después darle un cabezazo, levantarme del piso,tomar mis mochilas y maletas e irme de la sala principal y lograr entrar a una habitación vacía.

Hoy fue un LARGOOOOOOOO día.

Me iré a dormír.

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Forest Black en multimedia.

Voten.y cometen! Espero y les guste.

Nos leemos luego!  Shiao