Soy Uchiha [ Naruto Fanfic]

Capítulo 3: Academia Ninja: ¡Entra Uzumaki Naruto!

Leía detalladamente el papel en mis manos. Un informe del Hokage que debía entregarle al profesor de la Academia para que me dejara unirme a la clase de estudiantes proximos a genins. Cuando tocara la puerta, oficialmente me volvería una futura ninja de Konoha con el conocimiento y las habilidades para proteger la voluntad de fuego que nos heredó el primer Hokage.

O eso se supone que debería hacer. Mi sensei me enseñó mucho el tiempo que pasamos entrenando, pero yo aún ansiaba saber más. La decisión de volver a Konoha no fue fácil, pero el fin justifica los medios ¿no?.  Debía aprender y experimentar en verdaderas misiones para poder llegar a mi objetivo, además, éste lugar significaba mucho para mi hermano, su legado yacía aquí y yo debía continuar con ello.

Así dos promesas llenaban mi ser.

Matar a Itachi Uchiha y;

Honrar a Shisui Uchiha.

Como si eso fuese un incentivo, alcé mi mano y toqué varias veces la puerta de madera. Detrás de esta, se escucharon algunos bostezos y un poco de bullicio mientras unos pasos se acercaban. Segundos después, la puerta fue abierta mostrándome un alto hombre de coleta y una cicatriz horizontal en la nariz. Al verme sonrió ampliamente intentando darme confianza.

Antes de que siquiera dijese algo, extendí el papel.— ¿Usted es Iruka-sensei?.

— Sí, y tu debes ser la nueve estudiante que se nos une el día de hoy. Bienvenida a la Academia Ninja. — recibió el papel y lo leyó inmediatamente, sus ojos se abrieron en sorpresa pero trató de disimularlo. Supuse que fue por mi apellido, quizás verme en persona volvía realidad el hecho de que soy sobreviviente del clan. — Oh, ya entiendo mejor. — dobló el papel y dio un paso hacia la derecha dejándome el camino libre para entrar a lo que sería mi curso de estudiante. — Ahora eres miembro de este salón, pasa para presentarte a tus nuevos compañeros.

Asentí. Cuando entré detrás suyo, el bullicio existente dejó de escucharse. Mientras recorría el pequeño pasillo, sentí muchas miradas en mí, por lo cual me sonrojé un poco ya que no solo la mayoría de las niñas me miraban con un poco de disgusto sino que los niños me veían con un sonrojo pequeño en sus mejillas e incluso pude divisarles corazones en los ojos a unos cuantos.

Pero cuando mis orbes se dirigieron hacia una de las ventanas mi corazón empezó a latir con fuerza. Había un chico ahí, pelinegro y con una seriedad aplastante. Me resultaba familiar pero mi mente no esclarecía de quien se trataba, sin embargo mi corazón parecía conocerlo. Ese sujeto era el único que no me miraba.

— Escuchen chicos, hoy tenemos a alguien nuevo. Por favor, trátenla bien ¿de acuerdo?, ahora ella se presentará.

Una risa quiso emerger desde mi interior. En el momento que escuchen mi apellido podrían caerse de sus bancos y es que casi nadie sabía que aún existía una sobreviviente de un clan masacrado hasta la inexistencia.