Las Adicciones De Un Príncipe.

Capítulo 10.

"Sus Sueños Se Perdieron Cuando Él, Delante De Todos. Gritó Que No La Quería".

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*Raven en multimedia*.

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Antes de entrar a mi casa, me miré en el espejo, todo parecía en orden. Acomodé mi ropa y entré con una sonrisa.

— ¡Ya llegué! —. Grité alegremente.

— Alexandra, esos modales.

Volteé como el exorcista hacia mi madre. Joder, ella sabe que odio que me llamen así. Pero insiste en hacerlo ya que , según ella, Alexis suena mal.

Alexandra suena peor.

— Hola madre —. Me acerqué a ella y le dí un corto beso en la mejilla —. ¿Donde están los chicos?

— Les dije que se vistieran de una manera más formal —. Me observó de pies a cabeza — Tú haz lo mismo. Iremos a una reunión, más bien será una cena con la madre de Raven, la tonta noviecita de Ashton.

Madre odia a Raven. Es muy gracioso ver como Raven intenta caerle bien haciendo estúpidos comentarios de cosas que madre ama. No consiguiendolo obviamente, asi que madre por lo usual prefiere ignorarla.

— Si no hay mas remedio —. Respondí en un cansado suspiro.

— ¿Donde están mis queridas Astrid y Mía? —. Las adora. Creó que mas que a mí.

Fuera negatividades Alexis, siente el poder salir de ti.

— Con sus novios —. Respondió Ashton, tiene un lindo traje negro, se ve tan gracioso. A su lado esta Jordan vestido igual que él, solo que su traje no tiene corbata —. Como debe ser Madre.

— Tonterias Ashton. Sería mejor si dejaran de engañarse. Ambos.

Ella sabe muy bien la situación de las chicas, sueña con que algún día los chicos y ellas sean novios, algo en lo cual la apoyo.

— Vámonos ya, madre —.Lloriquea Jordan.

— ¡Pero, no me he cambiado!

— ¡Apresurate, entonces! —. Gritaron los tres a la vez.

— ¡Su odio me quema! —. Grité tocando mi pecho.

Corrí a mi habitación y me coloqué un vestido azul dos dedos arriba de las rodillas y un ligero toque de rimel. Tengo complejos de hombre y odio maquillarme. Unos zapatos bajos color negro, agarré una bolsa y metí mi celular, un cargador, un labial humectante, algo de crema.

¡Lista!

— ¡Ya estoy lista, vámonos! — Grité.

— ¡Chris! —. Gritó Ashton.

En esta familia siempre gritamos.

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Chris Aparcó en el frente de la casa de Raven, madre le dió lo que queda del día, libre.

Bajamos del auto y Chris le dio las llaves a Jordan.

En la entrada de la casa, nos recibió uno de los del servicio y nos guió hasta la sala, donde está la madre de Raven sentada en uno de los muebles. Al vernos se pusó de pie rápidamente.