Las Adicciones De Un Príncipe.

Capítulo 23.

"Destruye Cualquier Adicción Que Haya En Tu Corazón, De Lo Contrario Te Destruirá A Ti"

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Ahora mismo me encontraba en la sala de espera. Astrid y Dylan estaban aquí también.

Le pedí a Astrid que viniera a traerme ropa decente, ya saben  estaba en pijama. Ella dijo que igual se quedaría, apoyo moral o algo así.

Estaba realmente muy preocupada, me sentía culpable de alguna forma.

Alice esta aquí también al parecer son hermanos. ¿Pueden creerlo? Yo no. Son polos opuestos,  bueno no taaaan opuestos, pero aún así es tan extraño todo esto. Él es su hermano, esta enamorado de mí y Alice me odia. No creo que le haga gracia saber eso.

Volviendo al tema, que realmente importa, espero que Jake este bien.

— No entiendo que haces aquí, estúpida —. Recrimina Alice.

— Lo mismo que tú, zorrita, esperar noticias sobre Jake — Respondo.

— No te mortifiques Alex, las perras a veces no entienden —  Dijo Astrid con una sonrisa.

Esa es mi chica.

— Escuchame bien, rubiecita teñida, cuando seas competencia para mí podras escupir tus idioteces, pero no lo eres, ni lo serás, solo eres la tonta chica que se quedo con las sobras del novio de Raven —. Tomé rápidamente a Astrid del brazo, ya que ésta intentaba lanzarse encima de Alice — De hecho, Alexis igual de quedo en segundo término, nosotras estuvimos primero.

Ahora fue el turno de Astrid de agarrar mi brazo, miré mal a Alice provocando una sonrisa en su rostro. Astrid se plantó delante de ella y dibujó una ligera sonrisa. Conozco esa sonrisa.

— Si tienes razón —. Comenzó Astrid — Soy rubia teñida, y sí, Raven estuvo primero con Ashton y tú con Dylan — Astrid acercó su rostro al de Alice — La única diferencia es que cuando Raven estaba con Ashton, él suspiraba por mí, yo fui y siempre seré su primer amor. Y Alice querida, Alex ni siquiera luchó ganó por qué Dylan la eligió, él pudo elegir y adivina, él no te escogió a ti. Deja de ser tan ridícula y callate de una vez.

Astrid se alejó con una sonrisa victoriosa y Alice la miró muy, muy mal. Estaba por decir algo pero Dylan se puso de pie, callandola de inmediato.

— Chicas, basta —. Dijo él com cansancio. Que se joda — Alice ya deja de provocarlas, Astrid no caigas en sus juegos. Este no es el lugar ni el momento para que discutan, tengan un poco de respeto.

Las tres bufamos y guardamos silencio, tenía razón así que todas nos sentamos esperando noticias de Jake.

Mi celular comenzó a sonar, una llamada de Mía, opté por no responder, no tenía ganas de hablar con ella, ni con nadie para ser sincera.

Minutos más tarde el celular de Astrid comienzó a sonar también, era Mía.

Ella si había respondido a la llamada mientras salía y se perdia por los pasillos.

Pocos minutos después regresó, caminó hasta mí y tomó mi muñeca obligandome a salir, bajo la muy confundida mirada de Dylan.

Una vez solas y los bastante lejos de los otros, Astrid me miró con el ceño fruncido.

— ¿Quién es River Vidan? —. Preguntó ella molesta.

— Un chico — Murmuré.

— Ya lo sé, no soy estúpida, ¿Quién fue él en tu vida?