XXXIII

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🌸Un mes después 🌸

- No pueden ser tan tiernos - dijo Piper.

- Pues lo son.

- ¿Vas a subirlo a insta?

- ¿Por qué lo habría grabado si no?

Era la septuagésima vez que veían el vídeo de el beso entre Sabrina y Leo en la cabaña de Afrodita. Habían llamado a los hijos de Apolo para que empezaran a dibujar el fan art y los de Demeter estaban haciendo ramos de flores para la boda (conste que Leo y Sabri no sabían nada de esto)

- Habría que hacer una cuenta específica para subir todo sobre Leina. - sugirió Drew.

- Pero todos querrían ser administradores.

- Pues les damos un folleto con la contraseña de la cuenta.

- No lo sé, pero yo necesito un lugar donde subir el fan art- dijo Will.

- Para mí que la tendría que administrar yo, soy su mejor amiga- dijo Mafalda.

- ¿Qué? Los hijos de Afrodita tenemos más derecho en estas cosas.

Interrumpiéndolos, sonó la campana que indicaba la hora de la cena.

Acomodaron todo, y partieron hasta el pabellón.

Mafalda buscó con la mirada su mesa, hasta que su hermanastra Annabeth levantó la mano y le indicó donde estaban. Era difícil con tanta gente alrededor.

Se acercó corriendo por la ansiedad y él hambre y se sentó junto a la rubia en la mesa de  Atenea.

- ¡Pizza! - gritó.

- Desesperada. ¿No comiste en todo el día?- preguntó Malcom.

- Estuvimos en la cabaña de Afrodita organizando todo.

Annabeth rió.

- Si siguen así, va a haber un día internacional de Leina.

Mafalda se quedó pensando un segundo.

- Oye, pero que no es mala idea. ¿Saben qué día fue cuando se conocieron?

Uno de los hijos de Apolo se acercó a la mesa exhausto.

- ¡Mafalda! Te estaba buscando. Recuerda que cambiamos el horario de la clase de arquería. Será a las once.

- Estaré ahí- confirmó con un pedazo de pizza en la boca.

- Estoy tan emocionada- exclamó Annabeth. - hoy vendrán los chicos del Campamento Jupiter. Ya estaba extrañando a Frank y Hazel.

Mafalda casi se atraganta. Se había olvidado de la visita de los romanos. Se había olvidado que después de un mes, volvería a ver a Reyna.

No había visto a la pretora desde que habían estado a punto de... Estem... Besarse, cuando Valentina las interrumpió. Reyna no había aparecido para ayudarla con la furia, y cuando volvió al cuartel la última vez, ya se había marchado de vuelta a San Francisco. La verdad no sabia como sentirse respecto a eso; es cierto que no era su responsabilidad ayudarla pero vamos, sabía que estaba en un aprieto y ni siquiera aviso que se iba, ni se volvió a comunicar con ella.

La hija de Artemisa. {COMPLETA}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora