𝘍𝘰𝘳𝘦𝘷𝘦𝘳 | ʰᵃʳᶜᵒ (en edición)

１４

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-Ninguna persona merece tus lágrimas, y quien se las merezca, no te hará llorar-

-Gabriel Garcia Marquez

-La sinceridad a veces cobra algunas lagrimas, pero la falta de esta, destroza los corazones-
-Lorena Donaji

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-Draco- mencionó la castaña con evidente tono de preocupación en su voz. Ella no podía permitir que su amigo se fuera, no por culpa de Harry.

-¿E-Eh?- sollozó el rubio mientras pasaba sus manos por su rostro mojado y totalmente rojo. Seguía sin entender como es que no se había desmayado ahí, frente a todos.

-¿A dónde vas?- preguntó de nuevo la Gryffindor, desesperada.

El hurón no apaciguaba su caminata y estar persiguiéndolo sin saber su propósito la estaba llevando a pensar lo peor posible.

-Mione, déjame solo, por favor- pidió Draco lo mas respetuoso que pudo. Temía hacer algo de lo que después seguramente se arrepentiría.

-No- le dijo Hermione, de manera firme. Siguiente a eso, decidió halar una de sus mangas y hacer que el ex-príncipe de las serpientes detuviera su andar en seco -¿A dónde vas?

-Hermione...

-¡Maldita sea! ¡¿A dónde mierda vas, Draco?!

-¡Me largo de este maldito colegio! ¡¿Entendiste?!- gritó exasperado el Slytherin. Decidió moderar su tono de voz al ver como Hermione entraba en un estado de sorpresa y todos los colores habían abandonado su cara -Lo siento, Herms. Es sólo que... No lo sé. Quiero irme

-P-Pero...

-Amiga...- susurró Draco, logrando que nuevas lágrimas se instalaran tras sus párpados -Sabemos que Harry y yo no volveremos a tener una relación, así sea de simple amistad. No lo soporto. Q-Quiero irme

-Pequeño- susurró la castaña, acunando el rostro de su amigo en sus manos en señal de apoyo -Hay mas peces en el agua

-Pero yo no quiero otro pez, Mione

-D-Draco- susurró su amiga.

Lo único que atino a hacer antes de romper en llanto junto a su amigo fue envolverlo en un abrazo totalmente correspondido.

°°°
Listo. Ya estaba todo preparado.

Su equipaje en la puerta, su cama hecha, su varita en manos de la directora... Vale, todo estaba saliendo acorde al plan.

Draco suspiró al mirar de lleno su habitación totalmente carente de desorden. Sonrió con melancolía y algo de confusión al ver una corbata escarlata colgando del perchero.

¿Como había llegado esa peculiar prenda allí? Vale, recordarlo no era lo que quería en ese preciso momento.

Se acercó a la puerta y con un suspiro, tomó sus maletas fuertemente y se empezó a desplazar por todo el pasaje de las mazmorras.

Todo lo que podía escuchar a su alrededor eran cuchicheos o suspiros de asombro.

Toda esa partida de personas sin gracia.

¿No tenían nada mejor que hacer que estar pendiente de lo que pasara con su miserable vida? ¡Vaya tela!

Descubrió como una pequeña Hufflepuf se le quedaba mirando con expresión de haber visto lo mas majestuoso e importante del mundo.