𝘍𝘰𝘳𝘦𝘷𝘦𝘳 | ʰᵃʳᶜᵒ (en edición)

１１

(•)

Súbete a bordo

Vamos a ir despacio y en alto tempo

Claro y oscuro

Abrázame fuerte y suave

Estoy viendo el dolor, viendo el placer

Nadie más que tú, nadie más que yo, nadie más que nosotros

Nuestros cuerpos juntos

Me encantaría tenerte cerca, esta noche y siempre

Me encantaría despertarme a tu lado

Me encantaría tenerte cerca, esta noche y siempre

Me encantaría despertarme a tu lado

°°°

¿Cómo es que esa maldita comadreja se había atrevido a pisotear de esa forma su orgullo sin su consentimiento? ¡Pero es que era una hija de puta!

El rubio no podía pensar claramente.

¿Hijos?

¿Familia?

¿Amor? ¡Y una mierda!

Si él quería, podía darle hijos a Harry.

¡Mierda! Eso nadie lo sabía.

Nadie podía saber que era diferente... Por que las burlas y criticas podrían aumentar, y ya bastante "agradecido" se sentía con lo que había pasado.

Si nadie se enteraba, nadie preguntaba.

Era lo mejor.

°°°

Draco aún recordaba como es que había empezado a sospechar que algo andaba mal con respecto a su cuerpo.

Una tarde, luego de que Reese hubiese llegado un poco pasado de copas y le hubiese propuesto a su madre, por demás, de manera indecente y vulgar, lo prendido que estaba, él se había sentido terrible.

Unas arcadas incesantes lo atacaron.

Y al principio, él había pensado que todo estaba en orden... Había visto a Reese de esa manera.

Todo podía ser un efecto colateral de tan incómoda y asquerosa situación, pero... Cuando el dolor se propagó durante más de 30 minutos, Draco entendió que algo más estaba pasando.

Él no se enfermaba a menudo, o bueno, tal vez sí lo hacía, pero estar enfermo definitivamente se sentía distinto.

Y trató de hablar con su madre, pero esta, o no le prestaba atención, o estaba junto al cínico de Reese.

Y Draco había decidió tomar medidas propias.

Lucius tenía muy buenos contactos. Draco recordaba como le había presentado infinidad de gente una noche de 'cena empresarial' que se basaba en beber cerveza y reír toda la noche, básicamente.

Su presencia en realidad no era necesaria, sin embargo, su padre prefirió que permaneciera hasta entrada la noche. Y cuando pensó que definitivamente moriría de aburrimiento, hubo un señor de edad, con cabello albino, que se le había acercado de manera indiferente y sin interés esa misma noche.