One Shot. Percy Jackson y los héroes del Olimpo

163. Cita Express

THALICO.

Iba a matar a Hazel.

Bueno en realidad no. ¿¡Dónde se había metido!?

Comencé a caminar por el departamento viendo la hora a cada minuto, solo para asegurarme de que el tiempo no había avanzado tanto en los últimos segundos de mi agonía, mire nuevamente el sitio a mi alrededor, me había tomado tres horas, pero había conseguido que el departamento quedara, presentable.

El timbre sonó por todo el departamento, antes de que la persona que estuviera afuera pudiera volver a tocar, corrí hacía la puerta y la abrí, mi hermanastra entro por ella cargando un montón de bolsas, cerré la puerta tras ella y tome algunas para dejarlas sobre la mesa.

— ¿¡Dónde estabas!?

— Comprando, ¿¡a caso piensas que en la hora pico, no hay nadie en una tienda!? — ella se metió en la cocina cargando con algunas bolsas y luego volvió a salir — ¿¡Por qué no estás vestido!? ¿¡Quieres que Thalia te vea en pijama!?

— ¡No me grites! — entre corriendo en mi habitación

— ¿¡Te diste un baño en las últimas 72 horas!? — salí corriendo de mi habitación para meterme en el cuarto de baño

¿Era acaso alguna tortura de los dioses tener que lidiar con mujeres histerias? A penas termine, salí corriendo nuevamente a mi habitación, tome algo de ropa –no había diferencia porque todo tenía el mismo color– y mi cazadora, para salir al encuentro de Hazel.

— Tienes que cuidar el pollo y revolver los fideos — beso mi mejilla y salió corriendo del departamento

Luego de comprobar que Hazel no había sacado la puerta de su lugar, camine hasta la mesa y tome las velas que había comprado, las comience a dejar por todo el salón, en estantes, en el suelo, junto a la ventana y en la pequeña mesa de café que había en el centro, apague las luces para dejar que las velas hicieran su "magia" y luego busque entre todos los CD de canciones, uno que fuera con la ocasión.

— Velas, flores, música y comida — tome mi celular para asegurarme de que no fuera la hora a la que había acordado con Thalia, por suerte todavía faltaban 15 minutos

El característico olor de la comida quemada fue el que me saco de mi trance, salí corriendo hacía la cocina, saque la bandeja del horno y quite la olla del fuego, me asegure de que el pollo no estuviera tan dañado, pero... estaba negro, las papas parecían carbón y las zanahorias piedras volcánicas.

— Es solo pollo — lo tome y lo tire a la basura junto al carbón y las piedras, destape la olla y metí un cucharón, que salió cubierto con una masa de lo que alguna vez, fueron fideos — Tampoco tengo fideos

Tire la olla completa al cesto de basura, por suerte era de Hazel y no mía, mire el reloj, quedaban 10 minutos, algo bueno que tenía Thalia, nunca llegaba puntual, tome las llaves y algo de dinero, para salir corriendo del departamento, mientras esperaba llegar a la recepción, saque mi celular y marque el numero de emergencias.

— Bienvenido al sistema de pedidos telefónicos McDonald's, ¿qué desea llevar?

— Hola Jerry, quiero una Bic Mac y otra Daily Double, junto con dos raciones grandes de papas fritas y, ¿qué tienes de postre para ofrecerme? — salí del ascensor y camine a paso rápido por la recepción para salir al mar de personas que eran las veredas de Manhattan un viernes por la noche

— Buenas noches Nico, ¿lo usual o algo más? — di vuelta en la esquina intentando no empujar a ningún niño que se cruzara en mi camino

— Algo más

— Rachel preparo pastel de oreo — eso sonaba mejor que helado

— Que sean dos porciones — volví a girar en una esquina y estaba a unos metros del McDonald's

— Genial, nos vemos en un rato, lo cargare a tú cuenta

Guarde el teléfono en mi chaqueta y corrí hasta el lugar de comida rápida, me moví entre los autos que esperaban retirar su comida y me asome a la ventanilla donde atendía Jerry, él me sonrió y me entrego el pedido, después de eso, corrí como alma que lleva el diablo hasta mi departamento.

Entre corriendo y coloque las dos hamburguesas en una bandeja y luego les eche las papas al lado, tome el postre y lo deje en la heladera, el timbre sonó, Thalia había llegado.

— Eres un gran cocinero Nico — Thalia dejo la cuchara al lado del plato y tomo su vaso cargado con Coca-Cola para dar un trago — Tú comida tiene gusto a McDonald's y todo

Ambos reímos por su comentario.

N/A: No murió nadie (⊙.⊙(☉_☉)⊙.⊙)

Algo malo se aproxima, lo presiento.

Personajes, caminen con cuidado.

SoleDiAngelo-16 (>  ‿ ◠)✌