Capítulo 20.

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Gracias a todos por seguir allí, lamento no haber aparecido antes, pero les compensaré esta vez.

Un agradecimiento especial por la portada a newmarvels

Disclaimer:
Los personajes de la siguiente Historia no me pertenecen, son propiedad exclusiva de Marvel Comics y Stan Lee, pero su trama es completamente mía. No autorizo la reproducción, ni la publicación de esta historia en otro sitio sin mi consentimiento, sea parcial o enteramente.

Capítulo 20.

Sin embargo, ante el comportamiento tan inusual en ella, que siempre alardeaba de su valor como guerrera, de repente esquivo y casi tímido, él lo supo.

-Yo sé lo que soñaste.-Sentenció antes de atrapar sus labios en un beso.

~O~

La besó con intensidad, profundizando en su boca, buscando su lengua de forma demandante mientras la acercaba con una mano en la nuca hacia él, ella se quedó estática por un segundo, sin apartarlo, pero rápidamente respondió al contacto débilmente.

Los labios de él descendieron y se posaron en su cuello, y ella pensó que no podía haber sensación más placentera que la de las caricias de la engañosa lengua. Un gemido ahogado escapó de Sif, y una sonrisa maliciosa se extendió en los labios del dios. En ese momento un atisbo de razocionio se apoderó de ella, que se apartó de golpe con ojos sorprendidos, como si no pudiera creerse sus propias acciones de hace un instante. Pero su huida fue detenida en seco, al igual que la pequeña intromisión de su lado racional y moralista, cuando él la tomó del brazo haciéndola girar bruscamente, como si de una pieza de baile se tratara, para pegarse a su espalda y envolverla con sus largos brazos, al tiempo que susurraba en su oído con voz rasposa:

--¿De qué te sorprendes tanto Sif? No hay nada de malo en lo que hacemos, estamos casados por orden del Padre de Todo ¿Recuerdas?- Sus largos dedos recorriendo el cuello y el escote del vestido de cama.

-Dejame ir.-Sonó más débil de lo que pretendía, era menos una afirmación que una súplica.

-¿Realmente quieres que te deje ir?- La delgada mano colándose por debajo del vestido, rozando sutilmente desde el muslo hasta posarse en el vientre. Un gemido ahogado escapo de Sif, que se giró bruscamente y tomó entre sus dedos el cabello oscuro de Loki, para atraerlo a un beso apasionado.

Para él la sorpresa era grande, pero grata, así que respondió a su beso de buen grado; eras de deseo reprimido amenazando con salir. Pero se contuvo y se limito a pegar la longitud de su cuerpo a la de ella, robándole el aire por la anticipación de sentirlo excitado.

Los sueños de Sif se unían con la realidad dejándola en un estado de completo delirio, su mano viajaba por el pecho de él, mientras otra se hundía en su cabello. Lo necesitaba con urgencia, así que sin pensarlo, y de un solo tirón, la camisa de cama de Loki se abrió en dos en donde la tela se rasgó. Él pareció sorprendido por el arranque, aunque sospechaba que Sif podía ser salvaje, pues lo era en el campo de batalla. Sin embargo él no quería que esto fuera un ataque de impulsividad y luego ser culpado por manipularla o algo parecido, ni tampoco quería su actitud de rechazo y desprecio luego. Eso lo enojaría. Así que, en un acto poco propio de si mismo, decidió darle tiempo para rechazarlo antes de llegar más lejos. Fue por eso que la dejó tocarlo cuando ella acariciaba su pecho mientras lo besaba y él respondía suavemente, aguantando las ganas de hacerla suya de una vez.

Ella notó con decepción que las caricias de él se relantizaban sobre la piel, la cual sentía arder en un estado casi febril:-¿Qué sucede?- Murmuró sobre los finos labios de él.

Y por una vez, quiso ser honesto.

-Te estoy dando tiempo para rechazarme.- Apoyó su frente en la de ella. -Si no lo haces ahora dejaré de contenerme.- Le advirtió.

Inesperadamente para él, una sonrisa ladina que podía competir perfectamente con una de las habituales expresiones del príncipe, apareció en la cara de Sif.

-No recuerdo haberte dicho que te contuvieras.- Dijo ella mirándolo desafiante.

Eso fue todo lo que el dios del engaño necesitó para besarla vorazmente y arrastrarla a la cama, donde las últimas prendas de ambos fueron desechadas, acabando regadas por la habitación.

Se entrelazaron en una lucha sin ganador, en una batalla de besos intensos, caricias desesperadas y deseo, el cual sólo fue sosegado un poco cuando el cuerpo de Loki cubrió con su musculada pero suave forma a la desnuda anatomía de Sif, viéndola a los ojos durante el momento en que su erección se abría paso en la femenina intimidad con una lentitud agobiante, pero que sin embargo les permitía a ambos disfrutar de cada sensación detenidamente. Un gemido escapó sin censura de los labios de Sif mientras envolvía sus níveos brazos en la espalda del hombre sobre ella, el cual sonreía satisfecho ante tal acción. Pero su regodeo interior aumento cuando la guerrera elevó sus caderas hacía él en un intento de intensificar el contacto íntimo entre ellos. Loki comenzó a moverse lentamente en su interior, en un vaivén que se había llevado lejos la cordura de ambos, haciéndolos gemir y marcar la piel ajena con apretones desesperados de sus manos.

Los movimientos cadenciosos del príncipe se hicieron cada vez más profundos, más continuos, llevándolos a ambos a la cima del placer entre besos y caricias, cargados de deseo y necesidad por el otro.

~O~

No sé si esperaban lemon...pero allí lo tienen. Gracias por leer! perdón la tardanza pero la pagina o me dejo subir el otro día.

El Dios del engaño y Lady Sif. ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora