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Capítulo 9: La chica y el animal

Lucas y yo nos sentamos en un tronco de madera cerca de las aguas de la tarde, me había fijado en mi reloj y eran casi las cinco. El tiempo de la cita era lo que más me preocupaba, porque deseaba saber más de Lucas y quería tener todo el tiempo del mundo para descubrir más de él y su forma de ser, tan intrigante para mí. Había empezado a verlo como un experimento que aún un muchacho, y eso no era bueno; no quería verlo de esa manera. Él no era un conejillo de indias, solo era curiosidad, como antes se lo había dicho. Solo simple y sencillamente era el fisgoneo. Debía controlarme y ser paciente.

—Y bien, Maddy... ¿no me vas a preguntar cómo fue que conseguí tu número? —me insinuó Lucas

—Ah, sí eso— respondí algo distraída. —Anda, dímelo; ¿cómo obtuviste mí de número celular? — pregunté algo nerviosa

—Mmm...fue muy fácil —dijo colocando sus brazos hacia atrás de su cabeza. —Solo tuve que tomar el teléfono de mi hermano bebé y buscar en su directorio tú dígito. Al principio creí que solo estaría el de tu tío Troy, como él es, bueno...su mejor amigo...—replicó encogiéndose en hombros. —Pero en realidad estaban todos; la de tu casa, tus padres, el resto de tus tíos, y los demás hasta Jack...

>>> No sabía que el abuelo Jack tuviese un celular <<<, pensé al oírlo decir esa parte

—Continua —le pedí

—En fin...—dijo sin mucho afán. —Estaba el tuyo, duré un tiempo bastante largo para poder tener el valor suficiente para llamar; me tomé mi tiempo y estuve casi todo un mes pensando en invitarte si o no, hasta que finalmente...me atreví. ¡Te llama, Madison! — exclamó al final

>>> ¿Un mes? Guau, me sorprendes mucho. Impresionante <<<, pensé con sarcasmo mientras le sonreía

—Pero todavía, Lucas; no contesta la pregunta...más...importante— replique, mirando rápidamente la arena y acomodándome el cabello. — ¿Por qué me invitaste a salir contigo?, digo...creía que no te agradaba como persona... —dije con importancia, pero sin levantar la voz

—Por eso yo solo lo hice, para conocerte un poco...mejor—respondió casi sonrojado. —Como antes te dije quería saber más de ti, además quiero que tú también me respondas algunas preguntas...—dijo serenamente

—Así. — repuse. — ¿Cómo cuáles? — pregunté arqueando un ceja

Me preguntó cómo era estudiar en casa, y que mi familia nos educaron así, mientras caminaba hacia la orilla de la costa y miraba como el sol se hacía acaso frente a nuestros ojos

—Mmm....bueno, a mi madre no le gustaba la idea que estemos en la secundaria del pueblo, porque cree que no nos vamos a comportar de una forma "normal" en frente de los jóvenes. —suspiré. —Y además es mejor que te enseñen en casa. Mis hermanos y yo siempre nos han educado muy bien. No necesitamos ir a la secundaria para aprender...—dije tranquila, encogiéndome en hombros—Mis hermanos y yo somos autodidactas

—Pero deben tener maestros particulares o tutores que los instruyen para que tengan la educación promedia de los demás jóvenes de tu...edad, Madison. Además tu madre debió haber estudiado para ser enfermera ¿o no? —comentó

—Sí pero a mi madre no le gustó mucho después de graduarse, así que nos tiene en casa. Mi padre estudió para ser abogado y no le importa como sea eso. Además, mis padres ya lo resolvieron— le expliqué. — Y ya te dije antes, soy autodidacta

— ¿Y cuál fue la solución a ese problema? — preguntó curioso, por mi respuesta.

—Fue muy sencillo, tontín: ¡mis tíos! — repuse con una carcajada