Epílogo

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Forcé a Luke a que me mirara directamente a los ojos, y al parecer mi táctica de confrontación había funcionado. Por un instante, los ojos de Lucas y los míos se encontraron de una forma intensa y concreta. Me centralice únicamente y exclusivamente, en ver directamente los ojos de Lucas; porque para ser sincera, tenía la ligera sensación de que esto no iba a hacer una conversación muy placentera que digamos.

Maldije en mis pensamientos

—Lucas, dime. Por favor —le susurré, mientras sostenía con ímpetu su mentón. — ¿Qué pasó en tú casa antes de venir para acá? — le pregunté con firmeza en cada una de las sílabas.

Movió con indecisión sus labios. Y le apareció un pequeño tic nervioso, significaba que estaba intranquilo, pero luego de un instante, se relajó y yo dejé su barbilla en paz. Estaba listo para decírmelo.

—Pues...—empezó diciendo con un tenue tono de voz. — Había dos razones por...las cuales viniera esta noche hasta acá, Maddy...—me dijo en un tono dulce y apasionado

Suspiró y prosiguió

— ¿Y? — insistí

—Una de esas razones era la de ver...a ti, Maddy— susurró, acariciándome la mejilla

—Lucas...—musité con deseo, mientras tocaba su ferviente mano sobre mi piel. — ¿Y la otra? — le pregunté

—Y la otra...tenía que ver con tu tío, Maddy...—repuso con otro tono serio y frío

—Cuéntamelo— le pedí con desespero. —Dime que pasa con él

Vaciló por un instante y retomó la explicación

—Regrese a White Rose a eso no menos de las seis y media de la tarde. — me dijo con seriedad. — Mi viejo, mis hermanos y los muchachos se alegraron de verme. Se pusieron muy contentos de verme por estas fechas y de que estuviese bien; Elizabeth sollozos al verme, mi papá me dio un abrazo, y Chad y el resto de los chicos, me empezaron a preguntar qué cosas había hecho y visto en mi "travesía". En fin...—suspiró. — Estábamos muy bien y todo eso, pero lamentablemente Axel y Charlotte no pudieron venir para la fiesta de fin año, por razones que no nos quisieron explicar o que se yo... —dijo encogiéndose en hombros. —Pero después de todo, mi hermano y mi cuñada fueron demasiado lejos con los obsequios de este año, en especial Charlotte...—repuso complacido

Levanté las dos cejas ante su comentario

— ¿Qué quieres decir con eso, eh? —

—Humm, Axel envió regalos para todos...—repuso con tranquilidad. — En pocas palabras mi hermanastro dio nuevos regalos, pero los mejores los dio Charlotte.

Entonces, frunció el ceño con recelo y arrugó los labios con enojo.

— ¿Lucas? — dije mientras acariciaba su mejilla

—Los chicos se pusieron locos cuando ella nos trajo dos consolas de videojuegos; dos de las mejores del mundo — masculló. —Se volvieron unos verdaderos imbéciles con los aparatos para videojuegos y también los cientos de juegos que trajo. Por suerte están en inglés— chasqueo con la lengua

Yo aún no entendía qué tenía que ver con lo que me estaba tratando de explicar sobre mi tío, pero aun así debía esperar, a ver que más me decía al respecto. Suspiró pero volvió a ponerse tenso y retomó su explicación:

—Luego de llegar yo...a la casa; duramos un rato bromeando y haciendo payasadas sin sentido por ahí, como unos perfectos idiotas excitados por la fiesta de fin de año —suspiró. — En fin Elizabeth se arreglaba para la llega de tu tío a la casa y Michael hacía algunas comidas y traía las botellas de cerveza y demás cosas— repuso algo enojado. — Al cabo de dos horas apareció tu tío, pero nos sorprendió muchísimo verlo, sin su auto o una sonrisa sobre su rostro. Al contrario estaba algo...molesto y estaba serio, al momento de entrar— dijo con algo de confusión

Luz y Oscuridad © ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora