La Princesa De Ojos Lunares

De Regreso a el Laberinto de los Mil Lamentos

Llegamos a donde estaba aquel animal, pero no lo veía por ninguna parte, espero que no nos haya dejado.

-Y bien Aradia, ¿es aquí?-, pregunta Aragon, mientras deja a Lili en el piso, para que descanse apoyada en el tronco de un árbol, -Pues, si, se supone que aquí debería de estar-, digo un poco intrigada, ya me estoy preocupando, -¿Estar quien Aradia?-, en cuanto Aragon termina de hablar, la silueta de aquel animal majestuoso aparece entre los arboles.

-¡Oh vaya!, un ¿Caballo?-, un ¿Caballo?, ¿así se llama este animal?, ahora recuerdo, en el reino cuando era pequeña, solía montar junto con mi madre en un animal parecido a este, pero ese no tenia alas.

-Ellos son, Aragon y la Guardiana Lili-, digo mientras el Caballo se va acercando, -Un placer conocerlo joven mago-, en el momento que el Caballo habla, la cara de Aragon se torna pálida, como si hubiera visto un fantasma

-Qu... que Un... un ¡¡¡Caballo que habla!!!-, al terminar la frase sale corriendo a donde esta Lili, a mi también me sorprendió pero creo que Aragon le tiene miedo, es inevitable sonreír por su actitud.

-Si, Aragon, yo también me sorprendí la primera vez.

-Pero, ¿como es posible que un Caballo hable?.

-Yo tampoco lo se-, el Caballo despliega sus majestuosas alas, -¡Ah! y tiene alas, genial, ahora falta que camine sobre un arcoiris-, la forma sarcástica que tiene Aragon para decir las cosas puede ser un tanto graciosa, pero no creo que le hiciera gracia al Caballo por el aspecto que tiene en su cara.

-No joven, no camino sobre un arcoiris, eso seria ridículo.

-¿¡Y me lo esta diciendo un Caballo que habla y tiene alas!?.

-Ya basta los dos, por cierto no me has dicho tu nombre-, conocí a este Caballo majestuoso y aun no se su nombre. En cuanto me iba a responder, la voz débil de Lili, irrumpe en la conversación.

-Se llama Pegasus, es el Guardián de los cielos, y fiel compañero de Paralda-, Lili se levanta poco a poco y camina hacia el Caballo.

-Tiempo sin verte Pegasus.

-Yo igual Guardiana, es un placer volver a verla-, los dos se hablan, como si fueran viejos amigos, ¿De donde conocerá Lili a Pegasus?.

-Es hora de irnos su alteza, suban a mi lomo los llevare hasta el Reino.

-¿Que Subamos a su lomo?, yo no me subiré ahí, ni en sueños-, Aragon reprocha la idea de irnos montados en el Lomo de Pegasus, no se a que le tiene miedo, -Vamos Aragon, no seas un niño miedoso-, lo animo para que se monte, -¿Miedoso?, ¿Yo?, pu... pues es que miralo, esta de miedo-.

-Vamos Aragon es solo un Caballo.

-Si, un Caballo que habla, y tiene alas, eso no es normal...

-No creo que seas el indicado para hablar de normalidad-, cuando nuestra discusión de quien es mas normal que quien se esta poniendo mas interesante, siento un golpe en la cabeza seguido de las palabras de Lili, -Ya basta niños, vamos todos a montar a Pegasus, y tu Aragon, deja de ser un niño miedoso-, Lili se ríe cuando pronuncia la ultima frase, -Que no soy un niño Lili, y menos miedoso-, Aragon pone un cara de enojado, pero de enojado no tiene nada, como de valiente, el pensamiento hace que me sonría, -Me gusta verte sonreír-, logro escuchar tenuemente las palabras de Aragon mientas pasa a mi lado, todos nos montamos en Pegasus.

-Sujetense que esto se pondrá intenso-, todos nos sujetamos como indica Pegasus, las alas comienzan a moverse, cada vez mas y mas fuerte, nos despegamos del piso rumbo al castillo, -Sin sujetarse muy fuerte Joven Aragon, me lastima-, Lili y yo volteamos a ver a Aragon, quien esconde su rostro por pena, lo que hace que nos reímos por su actitud.

Vamos volando por los cielos, el paisaje es magnifico, el bosque desde arriba es hermoso, los colores verdes de los arboles unido con el color rojo, amarillo y rosado de las flores hacen un paisaje de ensueño, a lo lejos un par de montañas adornadas de flores de todos los colores, el cielo azul intenso nos cubre, y una tenue luz dorada del sol nos baña con su calor. Pasamos por un pequeño riachuelo, los animales del bosque nos saludan, o eso pienso, miro a donde esta Aragon y veo que tiene los ojos cerrados, vaya se esta perdiendo de la vista tan hermosa.

Tomo la mano de Aragon, -Abre los ojos Aragon, te estas perdiendo de una vista magnifica-, trato de que Aragon se sienta seguro, -No creo poder le tengo miedo a las alturas-, vaya, algo a lo que este chico le tiene miedo, -No te preocupes yo estoy aquí, abre los ojos-, Aragon poco a poco va abriendo los ojos, y cuando los abre por completo se sorprende, sus ojos se iluminan con el sol, lo que hace que se aclaren un poco mas.

-Son realmente hermosos.

-¿Que cosa Aradia?-, rayos, creo que pensé en voz alta, -Bue... Bueno el paisaje y todo, es realmente hermoso-.

-Si, tienes razón, gracias-, Aragon me regala una pequeña sonrisa y se queda admirando el paisaje, ufff de la que me salve.

-Sujetence iremos mas rápido-, Pegasus aumenta la velocidad, el paisaje hermoso cambia por uno mas sombrío y tétrico, los bosques luminosos y verdes ahora son oscuros y nublados, entre dos montañas a lo lejos puedo ver una gran pared gris que se alza hasta alcanzar los cielos, mucho mas alto de donde volamos ahora.

Cuando casi estamos por llegar a ese lugar Pegasus comienza a perder vuelo, nos precipitamos a una gran velocidad hacia el suelo, -¿Que pasa Pegasus?, ¿Por que estamos cayendo?-, pregunto alarmada, mientras nos sostenemos para no caer, -No lo se su alteza, por algún motivo, no puedo usar la magia de mis alas para volar-.

-Es el Laberinto-, puedo escuchar decir a Aragon, -Lili hagamos ese hechizo juntos si no moriremos-, Aragon mira preocupado a Lili, en lo que ella asienta con su cabeza, ambos recitan unas palabras, y antes de caer al piso nos detenemos por unos segundos, haciendo que la velocidad que teníamos se reduzca, pero aun así caemos muy fuerte en el piso, lastimandome la pierna derecha.

Escucho un quejido de dolor proveniente de Pegasus, -¿Estas bien?-, pregunto examinándolo, -Es mi ala alteza me la he roto por la caída-.

Lili y Aragon están bien y vienen a nuestro auxilio, Lili toma a Pegasus y sana su ala, Aragon toma mi pierna cuidadosamente y la pone firme, recita unas palabras y una luz comienza a salir de sus manos, quitándome un poco el dolor de la pierna, -Ya esta listo Aradia, aun te dolerá un poco, pero ira sanando-.

-¿Como esta Pegasus Lili?.

-Pegasus esta bien pero no podrá volar por unos cuantos días, el daño que ha sufrido ha sido grave.

-Gracias Lili, te debo una-, Pegasus agradece a Lili, -¿Y para mi no hay agradecimiento?-, escucho decir a Aragon con una sonrisa en el rostro.

-Gracias Aragon eres mi héroe-, por algún extraño motivo salto a los brazos de Aragon, el se queda perplejo por mi acto. En cuanto soy consciente de lo que he hecho, me retiro de él apenada, Lili nos observa con una sonrisa picara lo que hace que me sonroje aun mas.

-¿Y... y que es eso?-, digo señalando la pared enorme tratando de desviar el tema, a lo que Aragon me responde en un tono algo sombrío y carrasposo.

-Ese es el Laberinto de los Mil Lamentos...

Continuara...

Gracias por leer este nuevo Capitulo :D