Sixteen and pregnant. Shawn Mendes

Capítulo 28.

Francis y Gemma llegaron juntas a mi casa en punto de las siete de la tarde. Haríamos una "pijamada".

Cuando Gemma propuso la idea me sentí extraña, ¿una chica embarazada de 16 en una pijamada? ¿A un poco más de dos meses de dar a luz? Sin embargo, no estaba sintiendo molestias, y fue el día de hoy en la tarde cuando les llamé, estaba llena de energía y quería hablar con alguien. Hace una semana había salido con Harley y Shawn había tomado doble turno en el hospital ya que un chico se ausentó unos días.

Dejaron sus cosas en mi habitación y nos dirigimos a la sala de televisión. Terminamos viendo una película de comedia disparatada, a la mitad llegó la pizza y la devoramos en minutos.

-Mia, la chica de mi clase que se embarazó ya dio a luz- comentó Gemma.

-¿En serio? ¿Y cómo está?

-Tuvo un par de complicaciones... Pero está bien- agregó tras ver mi cara de espanto.

-¿Qué tipo de complicaciones?- pregunté interesada.

-La primera es que estaba programada para parto pero terminó en cesárea- comenzó a decir pero al parecer decidió detenerse.- Lo demás no lo recuerdo. Pero ella y su bebé están bien.

-Menos mal.

Seguimos viendo la película que nos arrancaba algunas sonrisas, en caso de Gemma, carcajadas. Y aunque lo que me dijo de la chica me dejó angustiada, decidí no pensar en ello.  Al terminar nos dirigimos a mi cuarto y ellas transfirieron el colchón grande del cuarto de invitados al mío.

-Un poco más a la derecha para que pase por la puerta- dirigí.

-A sus ordenes jefa- dijo una de ellas irónicamente.

-Saben que ayudaría, pero no puedo hacer esfuerzos- repetí.

-Uff, cuánto me encantaría decirle eso a mi entrenador de voleibol- comentó divertida Gemma.

Al terminar de acomodar todo, de que cada una pasara al baño por turnos y de poner las sábanas nos echamos sobre el colchón. Yo me quedaría en mi cama, pero decidí echarme en el colchón por ahora para no tener que estar toda volteada. Gemma se colocó en mi cama mirándonos desde arriba inclinada y Francis a mi lado.

-Oye Mia, tengo una duda.

-¿Qué pasa?

-Cuando quedaste embarazada... ¿Era la primera vez que Shawn y tú lo hacían?

La pregunta de Francis me tomó por sorpresa.

-Sí- respondí sin titubear.

-¡Qué mala suerte!- exclamó Gemma y tras la mirada fulminante de mi otra prima, agregó-: lo siento.

-Bueno, sí fue un poco de mala suerte. ¿Cuántos adolescentes no andan de calientes por todas partes y no les pasa nada? ¡Y sin usar protección!

-¿Tú sí usaste?

Abrí los ojos como platos. Mierda.

-Bueno...

-¡Mia pues no fue mala suerte si no descuido!

-Basta Gemma- la regañó.

-Tú eres la de las preguntas raras.

-No se preocupen chicas, está bien. Si hubiera querido evitar todas las dudas no habría accedido a la idea de la pijamada- comenté divertida.

-En ese caso, ¿ustedes lo han vuelto a hacer?- preguntó Francis ahora.

/A la semana de enterarnos de la noticia estábamos en casa de John. En una pequeña reunión con amigos en la que terminaron el quíntuplo número de personas que invitó originalmente. Shawn y yo subimos al cuarto de invitados, dije que había demasiado ruido abajo.

-Shawn, tengo una pregunta- le dije tras cerrar la puerta y asegurarla.

Lo besé suavemente, después pasé al cuello. Él seguía caminando, haciendo que topará con la orilla de la cama.

-¿Cuál?- preguntó agitado.

Me paré de puntillas y le susurre al oído.

-No pasa nada si tienes relaciones mientras estás embarazada, ¿cierto?

-No.

Sentí su sonrisa cerca de mi oreja.

-Incluso dicen que es más placentero- le dije y tras eso me dio un pequeño empujoncito.

-Podríamos comprobarlo.

Tras eso, lo hicimos algunas veces más. Pero sólo los primero meses. Leí en internet que incluso podías seguir teniendo sexo antes de que se rompiera la fuente. Pero para mí era agotador hacer cualquier esfuerzo.

-Te prometo que después te compensaré- le dije tras la última vez. Pero él no me pidió nada, entendió, comprendió./

-Sí- respondí la pregunta.

-¿Cuántas veces?

-Oye, eso no lo diré- le dije dándole con el cojín en un costado y comenzamos a reír.- Mejor cuéntenme ustedes de sus amores.

-Bueno, estoy empezando a hablar con un chico de la escuela, pero no se ven indicios de que le guste- explicó Francis.

-Yo sigo enamorada de Jake.

Vi como mi prima rodeó los ojos y después le dijo "ya supéralo"

Jake, el amor imposible de mi prima desde la secundaria.

-No tiene nada de malo. Es mi AP- se defendió.

-¿AP?- pregunté.

-Amor platónico.

-Más bien crush. Amor platónico sería Justin Bieber- la corrigió.

Pasamos la noche hablando y hablando. Chismes familiares, recuerdos de pequeñas, artistas, chicos... No volvimos a tocar el tema de mi embarazo. Seguía siendo una adolescente como ellas.