Más que un trabajo~ H.S~

Capítulo 40

Capítulo 40

- ¿Estás bien?- Preguntó sentándose a mi lado. Apreté la mandíbula y dejé mi vista clavada en el suelo.

- No es de tu incumbencia.- Mascullé molesta. Le oí suspirar y sentí su mirada en mí.

- Realmente no tienes que estar molesta conmigo, Anny.- Dijo. Levanté la mirada y le miré ceñuda.

- ¿Cuándo dejaste las formalidades?- Pregunté confundida. Una pequeña sonrisa se formó en su cara.

- No creo que sean necesarias después de haberte confesado que me gustas.- Admitió. Mis mejillas se tiñeron de rojo y aparté la vista incómoda.

- Lo que dijiste no era cierto.- Negué aún sin mirarle.- Y prefiero lo de Señorita Payne.

- Puedo asegurarte que era cierto.- Me volví a él nuevamente confundida. Su mirada intensa penetró mis ojos.- Y me gusta tu nombre. ¿Anny de qué es diminutivo? ¿Anna? ¿Annete? ¿Annise?

- Anabelle.- Contesté indiferente. Me quedé paralizada segundos después. Acababa de compartir información muy íntima con él. Ni siquiera Harry sabía mi nombre. Me golpeé a mí misma mentalmente. Nuevamente sonrió.

- Anabelle Payne. Es un nombre realmente bonito.- Agregó. Me encogí de hombros y fijé mi vista en el escritorio, por huir de su mirada.

- ¿Por qué le dijiste eso a Harry?- No pude evitar el tono descompuesto de mi voz.- Él es tu sobrino, sabes que eso le dolió. ¿Acaso no tienes corazón?

- A él no pareció importarle si me dolía algo cuando me pegó ese puñetazo.- Contraatacó.- Ni cuando engañó a Scarlett contigo.

Mi cuerpo se tensó cuando escuchó el nombre de Scarlett, pero ignoré el nudo en mi garganta.- Le amenazaste con su punto débil. Eres cruel.

Su mirada sorprendida no pasó desapercibida por mis ojos.- Así que te lo ha contado...- Murmuró atónito.- Vaya, realmente debe confiar en tí.

- Lo hace.- Aseguré con voz clara.- Y yo confío en él.

- ¿Enserio?- Su voz burlona me hizo querer pegarle un puñetazo. - ¿Y también confiabas en que no se casara?

- ¿Qué?- Pregunté.

- Entonces te llevarás una gran decepción al saber que la boda ya tiene fecha.- Me miró serio.- Y es en dos semanas.

No sé lo que más me sorprendió. Si lo que dijo, o su mirada.

La mirada que me dio, diciéndolo fríamente, pero con cuidado. Mirándome como examinando mis movimientos. Intentando descifrarme. Como si estuviera preparado para agarrarme si me desmayaba.

O el hecho de que Harry se casaría en dos semanas. El hecho de que ya lo sabía y no me lo había dicho. Cerré los ojos tratando de contener las lágrimas. ¿Por qué me besó ese día borracho si sabía que pronto sería la boda? ¿Por qué me había permitido volver al cielo si pronto tendría que bajar de él?

- Lo siento, Anny. Pero no tienes oportunidad con él.- Su voz suave sólo me enfadó más. Me levanté de la cama y lo miré furiosa.

- Se casa por tu culpa. Él no quiere hacerlo.

- Pero lo hará.- Se levantó y quedó frente a mí.- Lo hará y ya será demasiado tarde para tí. Ya es demasiado tarde para tí.

Negué con la cabeza y una lágrima resbaló de mi ojo. Patrick alzó su mano dispuesta a retirarla pero la aparté de un manotazo a tiempo.

- No te atrevas a tocarme.- Mascullé herida.- Eres un cerdo.

Con la poca dignidad que me quedaba, salí de la habitación y me metí en la mía para tratar de curar mi corazón roto.