Más que un trabajo~ H.S~

Capítulo 18: Invitada especial

Capítulo editado

Capítulo 18: Invitada especial

Sentí la mirada de Zayn constantemente en mí, sin embargo no me apetecía observarle. No me apetecía nada en ese momento. Mi mentevolaba hasta llegar a un apartado secreto en mi cabeza, el apartado de Harry.

- Anny.... - Zayn me miró preocupado. Me giré hacia él y le regalé una sonrisa falsa. Algo dentro de mí estaba furiosa con Zayn, sentía que todo esto era su culpa. Pero la yo prudente sabía perfectamente que loúnico que había hecho, era protegerme.

- Lo siento mucho, Zayn. - Me disculpé en un susurro. El moreno debió entender mi mensaje, ya que se acercó a mí y me rodeó con sus largos brazos, estrechándome con fuerza.

- Anny, tranquila. Esto no es culpa tuya. Es sólo de él. - Me aseguró con una sonrisa tranquilizadora. Se la devolví sin ganas y escondí mi rostro en el pecho de Zayn. Inhalé suaroma, pero me percaté de algo.

No era Harry.

(....)

Toméuna gran bocanada de aire antes de abrir la puerta principal. Lo único que encontré fue silencio.

Dejé las llaves en el mueble del recibidor y me quité mi abrigo colgándolo en el perchero. Comencé a examinar la sala. Las luces estaban encendidas y la de la cocina también, pero nohabía un alma por aquí.

De repente escuché voces. Eran bastantes, una femenina resaltaba sobre todo. Las voces se hicieron cada vez más fuertes, hasta que unas personas entraron a la sala.

- Bueno, ese era el jardín trasero, así que creo que.... - Scarlett se calló al verme allí. Me encontraba demasiado desorientada, mis ojos confusos volaron a Harry, quién me observaba fijamente. La rubia esbozó una gran sonrisa y se acercó a mí. - Vaya, veo que llegaste Anny.

- Ya estás aquí, cielo. - Matt murmuró lo suficientemente alto para que todos me observaran. Matt se acercó a mí y colocó una mano en la parte baja de mi espalda, acercándome a él. - Estos son Tessa. - Presentó a una chica rubia de pie frente a nosotros. Su estatura era alta, aunque no tanto como Scarlett. Su complexión delgada pero curvilínea, labios carnosos y ojos azules que me fulminaban en ese mismo momento. - Y su novio, Mark. - Escupió con enfado y miré al chico a su lado. Alto, pelo negro y ojos verdes. Guapo, aunque consideraba que Matt hacía mucho mejor pareja con Tessa.

- Y esta es Anny. - Scarlett se encargó de presentarme. Mark me sonrió, mientras lo único que hacía su novia era examinarme de arriba a abajo.

- Vaya... La verdad, me esperaba algo muuuuucho mejor, Matt. - Tessa me sonrió falsamente y yo bajé la cabeza, afectada por su comentario.

- Tessa, basta. - Advirtió Matt.

- Sólo digo la verdad. Sé perfectamente que es la criada. - Abrí mi boca indignada. - Y sé reconocer basura cuando la veo.

Oh, oh. Esta perra iba a acabar con mi paciencia. Y aún quedaba toda la noche.

(....)

Después de las incómodas presentaciones, Scarlett nos dirigió a todos a una enorme mesa en el comedor. Aún sentía la mirada de la perra que me ponía tensa, y sentía a Matt bastante nervioso.

Me senté con Matt a mi izquierda, en la esquina de la mesa, y a mi derecha Harry, aunque claro, a su derecha Scarlett. En el otro Scarlett.

Me sentía bastante incómoda entre esos dos.

Tessa (Quien se encontraba frente a mí) no pudo cerrar la boca, al parecer, y comenzó con su interrogatorio.

- Bueno, Anny. Cuéntame cómo conociste a Matt. - Más que preguntar, exigió. Me removí incómoda en mi asiento y traté de improvisar una historia lo más rápido posible.

- Yo... trabajo aquí. Nos conocimos aquí.

Por favor, merezco un Óscar.

- Así que es cierto que trabajas aquí. - Su sonrisa burlona me molestó bastante.

- Sí, realmente me parece increíble que hayas acertado en algo. - Le regalé una sonrisa y pude sentir la mirada de todos sobre mí. Alcé la mirada y vi a Harry y Matt tratando de contener la risa.

- Me acabas de decir.... Me has respondido. - Parecía que trataba de procesar la información. Rodé los ojos y la miré cansada.

- Sí, querida. Te he respondido. Supéralo. - Mascullé.

La risa de Harry se coló por mis oídos, y la de Matt le siguió también. No pude evitar sonreír disimuladamente al sentir que de alguna manera me defendían.

- ¿Quién te crees que eres para tratarme así? - Masculló casi jadeando en sorpresa.

- Chicas, basta. - Scarlett trató de poner orden a la descontrolada situación.

- No, Scarlett.- Escupió enfadada. - Quiero que os quede claro una cosa; Si he venido a este lugar ha sido exclusivamente para visitar a mi gran amiga Scarlett y a Harry. Porque si por mí fuera. - Miró intensamente a Matt. - No os vería la cara nunca más.

- Bueno, ya está bien. - Scarlett se levantó. - Voy a traer un magnífico pollo que Anny ha cocinado para nosotros, también para vosotros. - Recalcó la última palabra mirando a la pareja invitada. - Y cuando vuelva la cena será tranquila y civilizada. ¿Lo habéis entendido?

La rubia y yo asentimos con la cabeza sin dejar de fulminarnos con la mirada, y Scarlett suspiró caminando hacia la cocina. Me sobresalté al sentir una mano sobre la mía, que posaba escondida en mi rodilla, y me giré hacia Matt, descubriendo que él no era dueño de la mano.

Abrí mis ojos y sentí mi cuerpo temblar ante la idea de un sólo roce con Harry, y ni siquiera le miré a los ojos debido a mi descomunal sonrojo. Su pulgar trazaba círculos imaginarios en el dorso de mi mano intentando calmarme, aunque estaba segura de que no sabía que lo único que hacía era ponerme más nerviosa. Su piel era cálida y suave. Mi corazón latía a mil por hora y sentía que si abría la boca tartamudearía.

Ni siquiera me di cuenta de que Scarlett había vuelto hasta que la vi con una bandeja de plata enorme en sus manos y un exquisito pollo con verduras sobre ésta. Especialidad mía, claramente. Recordaba que ese plato me lo había enseñado mi madre cuando apenas tenía seis años, ya que me encantaba y tenía una memoria bastante buena, le rogué que me dijera la receta para hacerlo. Ella claramente me la dijo, ajena a que esa información se me quedaría grabada en la mente por años.

Scarlett estaba realmente preciosa. Un vestido negro y corto se ajustaba perfectamente a su cuerpo y resaltaba sus curvas. Era de manga larga pero finas, y al vestido le acompañaban unas increíbles sandalias doradas de tacón y un brazalete de oro.

- Espero que os guste, Anny se lleva todo el mérito. - Me sonrió cálidamente y dejó la bandeja en el centro de la mesa. Se sentó junto a Harry y comenzó a servir porciones en los platos de los invitados. A continuación en los nuestros y finalmente en el suyo.

La cena transcurrió tranquila. El pollo estaba delicioso, y sabía que a Tessa le había encantado aunque no lo admitiera. De segundo plato tomamos una pasta a la carbonara que Scarlett se había empeñado en cocinar (Y que sorprendentemente estaba bastante bien) Y por último un tiramisú de postre.

- ¿Cuánto tiempo os quedaréis? - Preguntó Scarlett curiosa.

- Bueno, teníamos pensado quedarnos tres días, no más. ¿Tú cuándo te ibas, Scarlett? - Preguntó Tessa de vuelta.

- El miércoles. Estamos a lunes, así que sólo nos veremos dos días. - La rubia hizo un pucherito. Tessa suspiró y se encogió de hombros.

- Algo es mejor que nada.

Después de una larga conversación, sentí finalmente mis párpados cerrarse lentamente, así que lo único que pude hacer, fue irme a dormir con la imagen de Harry impregnada en mi cabeza.

Tessa y Mark en multimedia